84 Alaric La llamada de Mason nos pone alerta y redoblamos seguridad en la manada Garra Plateada, hoy era el veredicto de las mujeres que estaban presas y el veredicto fue la muerte por traición en contra de su alfa y futura luna.Los días pasaban y estábamos cada vez más paranoicos en cuanto a la seguridad de Adara y el cachorro, pero respiraba aliviado cada vez que pasábamos un día más sin saber de esa loca vampira.—¿Estás bien? —me pregunta Adara levantándose llegando a donde yo estaba.Casi no dormía, estaba viendo por las puertas del balcón, quería mantenerla a salvo.—Ya casi viene la reunión con ambos consejos y eso me pone un poco nervioso —le dije a Adara.No era una mentira total, peor no quería agobiarla.—Todo estará bien, ya leí lo que Eva investigó y es concluyente. Han existido otras parejas como nosotros y ella pudo recuperar la documentación respectiva que muchas manadas ni sabían lo valiosas que eran —me cuenta emocionada— ahora, vuelve a la cama.Su vientre
85 Narrador Omnipresente.Hoy era el día de la reunión con los dos consejos de ancianos, y la tensión era palpable en el aire. Todos estaban nerviosos, pero ninguno tanto como Adara. Su corazón latía con fuerza, y un nudo se formaba en su estómago a medida que la hora se acercaba.—¿Cómo sé que no me van a sacrificar? —le pregunté a mi madre, con una mezcla de miedo y desesperación en la voz.—Ay, niña, no digas esas cosas. Nadie te va a sacrificar —respondió ella, intentando tranquilizarme, pero la preocupación en su rostro era evidente.—No confío en ellos, madre. Piensan que soy una bruja —dije, sintiendo cómo el pánico se apoderaba de mí.—En cierto modo lo eres —dijo mi madre, intentando aliviar la tensión con una sonrisa—. Has hechizado a esos hombres; respiran y viven por ti.—Madre, por favor, no digas eso frente a otras personas, o de aquí no salgo viva —le advertí, mirando con aprehensión la puerta cerrada. La amenaza no era del todo infundada; conocía demasiado bien las his
86Adara se encontraba de pie frente al consejo de ancianos, su corazón latiendo con fuerza mientras esperaba el veredicto. Las miradas de los miembros del consejo estaban fijas en ella, cada uno evaluando la situación con atención. El rumor de que Adara podría ser una bruja había causado un gran revuelo en ambas manadas, especialmente por el hecho de que tenía dos compañeros alfas, algo que muchos consideraban antinatural.—¿De verdad dejaran que se salga con la suya? —murmura alguien entre la multitud.—¿Es siquiera posible tener dos alfas como mates? —cuestiona otro lobo.La situación se estaba caldeando y Adara se estaba poniendo nerviosa.—¿Cómo piensan llevar las manadas con una sola Luna? Es imposible —resopla alguien más del grupo reunido.Los murmullos en el bosque eran apenas perceptibles, pero Adara podía escucharlos a todos y sentir la tensión en el aire. Sabía que su destino estaba en manos del consejo, y aunque confiaba en su inocencia, el temor era inevitable.Finalment
87La biblioteca era un refugio de paz para Adara, quien, muy embarazada y rodeada de una pila de libros, parecía más feliz que nunca. Con una mano en su vientre y la otra sosteniendo un libro de mitología antigua, se perdía en los relatos de tiempos remotos mientras comía sin pausa. Los alfas estaban muy ocupados últimamente, ocupándose de los asuntos de la manada, y para ella, esos momentos de tranquilidad eran un placer sagrado.De vez en cuando, su madre, Santa, asomaba la cabeza para vigilarla, asegurándose de que estuviera cómoda y cuidada. La felicidad de Adara era palpable, y Santa sentía que era su deber protegerla de cualquier sombra que intentara asomar en su vida. Especialmente ahora, con el bebé que estaba en camino.Pero no todos compartían esa felicidad. Cleo, en un rincón de la casa, observaba con amargura. Ella, quien había aspirado a ser la próxima Luna, ahora miraba cómo Adara ocupaba el lugar que siempre había deseado. Y para empeorar las cosas, Alaric, el alfa, pa
88—Queríamos que fuera un lugar especial para ti… y para el futuro de White Moon —añadió Mason, con un tono suave pero lleno de significado.La mezcla de ambas manadas había sido una tarea difícil, pero ahora, viendo cómo Adara parecía brillar de alegría, se sintieron seguros de que habían tomado la decisión correcta.Adara, sin poder contener su gratitud, se acercó para abrazar a Sienna primero, susurrándole un sincero "gracias" al oído. Luego se volvió hacia Alaric y Mason, abrazándolos con fuerza, sintiendo el apoyo y la calidez de ambos. En ese instante, se sintió verdaderamente en casa, rodeada de quienes amaba y en un lugar que era solo suyo.Sienna, con una sonrisa de satisfacción, observó la escena antes de despedirse.—Mi trabajo aquí está hecho —dijo, cruzando los brazos y mirando a los alfas—. La dejo en sus manos.Alaric le dio un fuerte abrazo de agradecimiento, y Adara también la abrazó una vez más, estrechándola como si no quisiera dejarla ir.Cuando Sienna se marchó,
89AdaraMe levanté de la enorme cama solitaria como cualquier día tranquilo ya que mis sexys lobos ya estaban trabajando arduamente desde el amanecer, senti el peso del embarazo en cada movimiento. Apenas logré acomodarme cuando mi madre entró con una bandeja de desayuno.—Tus mates dijeron que no te sentías bien —dijo con una risita, mientras colocaba la bandeja en la mesita de noche.—Claro, este niño no me deja dormir y no paro de ir al baño —me quejé, dejando caer la cabeza contra las almohadas.—Ya, ya… pero estamos casi en la meta final —respondió mi madre, divertida.—Mami, ya quiero que llegue —le dije con un suspiro, acariciando mi vientre.De repente, una punzada intensa me cortó la respiración. Me doblé en dos, ahogando un gemido mientras el dolor recorría todo mi cuerpo. Mi madre dejó todo de inmediato y se apresuró a mi lado, tomándome por los brazos.—¿Adara? ¿Qué pasa? —preguntó alarmada, sosteniéndome mientras yo trataba de respirar.—Mamá… —jadeé, cerrando lo
—No es tu mate es mía —rugió el lobo encolerizado.—¡Por favor basta! —suplicó la desdichada omega en el suelo con lágrimas corriendo por sus mejillas.—¡No! No aguanto más. Debes elegir a uno de los dos —exigió uno de los alfas.Adara—¡Adara! —me llama mi madre —estas afuera, ya casi sale la luna ¿acaso escuchaste lo que te dije? —me pregunta en regaño— por la diosa, niña presta atención.—Ya entendí, madre. Debemos comenzar a plantar las semillas, mañana me quedo en casa encerrada— hablé resignada.Trabajo muy duro en la manada Luna Dorada, específicamente con el aseo de la casa grande, a veces trabajo en los cultivos y en donde haga falta para que mi madre y yo no tengamos ninguna carencia, no vivimos como ricos, pero para ser omegas no nos va tan mal, casi nunca me cruzo con el alfa y el círculo importante de este, y no creo que vayan a dejar que una loba como yo se acerque a él, hace unos treinta años trajeron a algunos sobrevivientes de la manada White Moon a Luna Dorada.Manad
2 MasonDos días antes—Sabes que debes casarte, es tiempo —dice mi padre y alfa de la manada—. Ya estas en la edad de hacerte cargo de la manada.—Tú encontraste a mamá, es una buena Luna y tú un buen alfa —preferí adularlo antes de que sigamos por este camino— tú puedes tumbar esas reglas.—Que astuto, eso no funciona conmigo —dijo mi padre señalándome— elige a Daniela, es la hija de mi Beta, si tu madre la entrena será una buena Luna.—No cuentes con eso, Ulises —dijo mi madre dejando de lado su libro.Mi madre era una empedernida de los libros y cuando se acabaron los de la manada mandó al equipo de búsqueda a comprar más libros.—¿Por qué no? Eres una excelente Luna, puedes darle consejos a la muchacha— le responde mi padre frunciendo el ceño, tratando de parecer intimidante.—Esa muchacha no será una buena Luna, pronto te darás cuenta del error que quieres que tu hijo cometa y espero que no sea después de que nuestro hijo la marque— sentencia mi madre.—Voy a caminar— decreté y