Capitulo XL

Es imposible salir de casa, hay docenas de fotógrafos, periodistas y cronistas apostados en la vereda. Todo se ha vuelto un circo. Pero, la desesperación por la falta de información sobre Lourdes me lleva a tomar una decisión, de la que seguro voy a arrepentirme.

Trato de arreglarme un poco antes de abrir la puerta. Aún tengo muchas cicatrices del accidente, pero poco a poco mi rostro ha vuelto casi a la normalidad. Acomodo un poco mi cabello y plancho con las manos la arrugada camisa que llevo puesta.

Apenas pongo un pie en la acera, todos se empujan tratando de llegar hasta mí. No llego a escuchar ninguna de las preguntas que gritan, solo es una especie de murmullo muy alto. Levanto una de mis manos y pido un minuto. Cuando finalmente logro acallar el griterío comienzo a hablar.

—Gracias a todos por estar, como les dije antes, no voy a hacer comentarios referentes al caso que lleva el fiscal Ferreyra. Eso

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP