William Seco el sudor de mis manos en mis jeans oscuros mientras observó desde afuera por las ventanas de cristal como emma se desenvuelve con maestría, para ayudar a las camareras a entregar sus pedidos. A simple vista está atestado de gente. Luce un delantal naranja al igual que todos los empleados con la insignia del cafe y a pesar de que se mueve con diligencia su rostro luce triste. Es solo una sombra de ¡mi emma! que tanto amo y admiro como la mujer fuerte e alegre que en realidad es. Sin poder contener más mis ansias, ingresó al lugar, la campanilla en la puerta corrediza anuncia mi entrada. Emma no me presta atención al principio hasta que una empleada del lugar que me conoce muy bien, por qué era compañera de mi hija, me ve y corre a samarrear el brazo de emma para que mire en mi dirección. Ella me mira y se queda estática con la bandeja cargada en la mano, enlaza sus ojos con los míos por unos instantes, pero luego deposita la bandeja en las manos de su empleada y se voltea
Esperanza ¡Hoy es el gran día! ¡mis bebes cumplen su primer añito! es mediodía y estamos todos de gala, acompañando en ceremonia a mi amado padre y emma. Observamos cómo los esposos intercambian sus anillos frente al cura que les dió su bendición. Luego de aquí, vamos todos al penthouse a celebrar doblemente. Estoy parada a lado de emma derramando lágrimas de alegría con kwan a upa. Pocisionado junto a papá, está mi hombre, que carga a mi hombrecito, Vladimir. Al rato de finalizar la ceremonia, le pedimos al fotógrafo que nos tome una foto para recordar este día memorable. Están los esposos en el centro, la familia smirnov, rodeándolos, y pienso, lastima que esmeralda no pudo asistir por su embarazo de riesgo, aunque soy feliz por su milagro concebido, no quita que la extrañe mucho y bueno... ni hablar de olivia, alegó que no podía dejar a su esposo, por qué se encuentra en su etapa de enfermedad más crítica. Cuando el fotógrafo ve que estamos todos listos para capturar la imagen...
Nikolay Todo el trayecto en vehículo, sostengo la mano temblorosa de Sam, cargandola sobre mi regazo a pesar de tener un gran estómago, su cuerpo luce delgado y ligero de peso. Fadeei maneja muy a prisa, abriendose paso entre el bullicioso y largo camino de autos, tocando bocina y agitando un pañuelo blanco por la ventanilla, para que le den prioridad a su andar. De vez en vez, examina el rostro sin color de Samanta, cuando nota que se estremece en mis brazos y comienza a cerrar sus ojos con pereza. Demanda. –¡Nikolay! ¡No la dejes que pierda el conocimiento, hábla con ella hasta llegar a la clínica! Cada una de las palabras de mi amigo me calan hasta lo más profundo. –Sam ¿Tienes frío? Ella solo asiente, esforzándose por mantenerse lúcida. La cubro con mi abrigo y me sonríe volviendo a cerrar sus párpados sin poder evitarlo... musita débilmente. –Hace mucho tiempo que no me llamabas por mi apelativo ¡Sam! Suena bien. Sabes Niko, en este maravilloso tiempo que decidí ser madre
ESPERANZA Veo a mi esposo, derrotado, ingresar por la puerta. Su semblante denota agonía y sus pupilas lucen perdidas en algún punto fijo, donde no me nota, camina con dificultad y sin dudarlo corro a abrazarlo. El me envuelve con su brazo izquierdo, miro para su costado derecho y noto que lleva de la mano a Samanta. Su estado es peor que el de mi Nikolay. Por detrás de ellos viene llegando con una valijas pequeñas, fadeei. –Cariño, cuánto lo siento. No puedo reprimir el sollozo que se escapa de mi interior, me destroza verlo tan devastado, es mi otra mitad y todo lo que le duele o lo lástima, me afecta de igual manera. Nikolay se suelta de Samanta y me abraza contra si, aspirando con fuerza. –Mi amor. Todavía no puedo aceptarlo, no lo asimiló, siento un vacío en mi interior que me está desgarrando ¡Se fue una parte de mi! Y a pesar de todo lo que hicimos, no basto ¡nada fue suficiente! para que ella se quedará con nosotros. Nikolay se quiébra en mis brazos y compartiendo el m
GRAN VALLEY CONDADO /DE ESTADOS UNIDOS Olivia taylor una mujer pelirroja, delgada de 25 años tez clara, ojos color ámbar. Entra a una casa con una bebé de días de nacida en brazos, envuelta en una fina mantilla y vestida con ropa cara, recorre la pocilga viniendose abajo por última vez, con tristeza. Cuando ve a William Jones, padre de sus gemelas, sentado en la única silla del comedor, con aspecto desarreglado y ojeroso se acerca a el y le entrega a la niña. El la recibe gustoso a pesar de la angustia que traspasa su corazón y la mirada perdida, solo susurra mirando a su hija- ¡mi niña bella! -la abraza contra su pecho derramando lagrimas. Olivia intenta darle un papel a William que este cuando ve que es un cheque, reacciona levantándose furioso y lo toma entre sus manos para hacerlo añicos, luego le grita- ¡largo de aquí! perra interesada, no necesitamos tu caridad, yo educare a mí hija con mí mayor esfuerzo. Y espero ¡que nunca más! volvamos a ver tu desprecia
4 años después (esperanza)Esperanza trabaja en un resto de comidas rápidas y cafetería llamado "fast food" hace 3 años, desde la mañana que abren sus puertas hasta la hora de la cena que es alrededor de las 20:00 PM hora que cierra el establecimiento. Termina agotada pero ella no emite quejas, las propinas que recibe le salvan el día para sus gastos diarios y los de su padre. Han transcurrido 4 años de ese fatídico día en que su padre tuvo un acv isquémico, producto de la preocupación y estrés por haber perdido su empleo, hacía una semana antes del día del viaje a la universidad de esperanza. En la fábrica donde trabajaba William había bajado la producción hasta que terminó en la quiebra, y lo habían indemnizado con un dinero mediocre por dedicar 16 años de su vida a su trabajo. No le comento nada a esperanza para no condicionarla, sabiendo que ella no viajaría si sabía de está situación. No queria arruinar sus metas y sueños, deseaba con fervor un futuro pr
ESTADOS UNIDOS Esperanza no pudo pegar un ojo en toda la noche estaba trabajando como una autómata y recién era mediodía. Su interior era un mar de sensaciones, su mente no dejaba de maquinar a esa mujer que su padre la había denominado como su madre. Buscaba explicaciones, excusas o motivos para intentar de justificar su abandono, pero era inentendible la razón del ¿por que?. Emma se acerca a esperanza para sarandearla suavemente de su codo. -¡Esperanza! ¡te eh estado nombrando como tres veces! para que vengas a atender a los clientes de la mesa 5 (observa su semblante pálido, ojeroso con los ojos levemente inflamados, como si hubiera estado llorando por horas y le pregunta con preocupación)- cielo ¿Estás bien? ¿Sabes que puedes contar conmigo verdad? te ves muy mal. Esperanza mira a su jefa y le dedica una media sonrisa, como no se cansa de repetir desde que la conocio. Emma era un ángel, la apreciaba como ser humano y la consideraba una amiga, ya que no tenía vida
Pov de esperanza Estamos en el aeropuerto despidiéndonos con mi padre y mi hermana, a Dakota la saludé en casa, me aclaro que no le gustan las despedidas. Solo me voy con lo puesto sin maleta ya que tendré que ser una sustituta de ropa, objetos e identidad. A partir de ahora dejaré de ser "esperanza Jones" para convertirme en "esmeralda Brown" por tiempo indefinido. Luego de desprenderme entre lágrimas del abrazo de mí padre, estoy abrazando a mí gemela y por mí rabillo del ojo noto que mí padre se pone livido de la ira, observando un punto fijo detrás de mí espalda. Me volteo para ver a unos metros detrás nuestro a esa mujer que por desgracia es mí madre ¡Rayos! le adverti que me esperara en la puerta de abordaje. Pero al parecer su necesidad de enterrar más el puñal en el pecho de mí padre, es su deleite. Mi padre furioso con los ojos en llamas se va al humo contra ella, lo detengo de un brazo y a la vez mí hermana lo sujeta del hombro. Lo miro con ojos de súplica-¡padre p