Capítulo 4 Nuevas Amenazas
POV de Winona

Es mi segunda noche en este cuarto de hotel, esperando a Lisa. Me arrastro a la ducha después de pasar casi todo el día en cama, hundida en la tristeza. Ya me encargué de que el hotel prepare un pastel y llene el minibar para la ocasión.

No voy a tomar ni una gota de alcohol, pero me serviré tragos y fingiré beber. Mañana me voy y ni siquiera podré contarle mi secreto: este bebé que crece dentro de mí. No puedo arriesgarme a decírselo a nadie, si es que quiero proteger a mi hijo.

Tengo que convencerla de que estoy bien, aunque me rompa el corazón saber que no podré dejar que venga a visitarme. Quién sabe cuándo volveremos a vernos, pero solo será cuando esté segura de que la víbora de Judy no podrá hacerle daño a mi bebé.

Es todo lo que me queda ahora. Faltan quince minutos para que llegue. Le escribo rápido que la puerta estará abierta, que me estoy duchando. Me contesta con un emoji de pulgar arriba.

Dejo que el agua caliente corra por mi cuerpo mientras acaricio mi vientre plano todavía. En poco tiempo será imposible esconderlo. Necesito desaparecer, irme a un lugar donde nadie sepa quién soy, y donde pueda rehacer mi vida desde cero. Me quedaría aquí bajo el agua para siempre, pero sé que tengo que seguir adelante.

Cierro la llave del agua y agarro una enorme y esponjosa toalla blanca del hotel para envolverme. Saco una toalla más delgada para el pelo y me la enrollo en la cabeza. Me agarro del lavabo al ponerme de pie porque siento que me voy a desmayar. Tal vez el agua estaba demasiado caliente o me agaché y me levanté muy rápido.

No puedo ir al médico aquí. Tendré que esperar hasta encontrar dónde vivir en mi antigua ciudad, pero lejos de donde solía estar. Nadie puede recordar quién soy.

Mi otra mano va instintivamente a mi abdomen mientras me apoyo en el lavabo.

"Más te vale no estar embarazada."

Abro los ojos sorprendida. Esa no es la voz de Lisa, es de Ashlyn.

"¡Por Dios! ¿Qué haces aquí? ¡Sal!"

Su rostro se transforma en algo que nunca había visto antes. "La puerta estaba sin llave, deberías ser más cuidadosa."

"No deberías entrar en habitaciones ajenas. Además, ¿cómo supiste dónde me estoy quedando?"

"Parece que soy más astuta de lo que piensas." Sus ojos siguen cada uno de mis movimientos.

No me siento segura ahora mismo, rezo para que Lisa llegue en cualquier momento. "Mejor vete antes de que Lisa llegue." Paso junto a Ashlyn y voy a la sala para abrir la puerta para que se vaya.

"¿Estás embarazada?" me pregunta mientras avanza.

"No es asunto tuyo, ¿lo sabes?"

"Técnicamente si es de mi incumbencia."

Me río para desconcertarla un poco. "¿Te sientes amenazada? ¿Tienes miedo de perder a este hombre que te ama tanto?" le digo con sarcasmo.

"Si crees que un bebé cambiará lo que siente por ti ahora, estás muy equivocada. Jayden me ama ahora y yo lo amo a él." Sus ojos arden con hostilidad.

Me dan ganas de abofetearla. Tal vez está lo suficientemente desesperada como para intentar cualquier cosa para mantenerlo con ella. Tal vez incluso ya lo ha hecho.

"No estoy embarazada, Ashlyn." Le digo con voz aburrida. "Nada sería peor para mí ahora mismo. Solo quiero irme de aquí y olvidarme de todo lo relacionado con Jayden. Así que solo vete."

Me mira con sospecha.

"Más te vale no estar mintiendo." Sus ojos enloquecidos me miran con enemistad.

Hemos sido amigas casi tanto tiempo como Jayden y yo estuvimos juntos. Era como una hermana menor para mí. Le enseñé de todo, desde tareas escolares hasta cómo hacer relaciones. Ahora me está dando vibras intensas de acosadora.

Su familia también es rica, pero ella parecía tan diferente a todos ellos. Es hija única como yo. Al principio quería mucho mi amistad. Nunca había tenido a nadie que me admirara así.

Se sentía bien ser un modelo a seguir. Nos conocimos en una noche de cócteles que organizó la madre de Jayden. Me acerqué a saludarla cuando la vi sola en un rincón. Es tres años menor que yo. Allí hablamos sobre sus problemas en la preparatoria, y me ofrecí a ayudarla.

Siempre me copiaba en todo. Nos maquillábamos y peinábamos juntas, además de ir de compras juntas. Me parecía tierno, pero ahora sospecho que ha estado enamorada de Jayden desde hace mucho. Probablemente desde el principio.

Desde que me recuperé del coma y estuve tratando de convencer a Jayden de nuestro amor, Ashlyn fue muy comprensiva. Pero obviamente se sorprendió al verme de vuelta y ellos claramente eran demasiado cercanos para mi gusto.

Parecía tan tranquila y cariñosa con él, haciéndole creer que respetaba nuestro matrimonio si eso era lo que él decidía. Poco después de que volví a buscarlo, me di cuenta de que tenían más que una amistad y que su familia, especialmente su madre, prefería mucho más a Ashlyn que a mí.

"¿Tienes miedo del día que me recuerde?" contraataco mientras pasa junto a mí para salir. "¿Temes a que quiera lo que tú y yo sabemos que tuvimos?"

Ver su cara ponerse blanca como el papel me da algo de satisfacción.

Pero luego su rostro se endurece. "No importará si no estás viva cuando lo recuerde." Su expresión ahora realmente me asusta. Me contengo para no responderle, porque tengo que pensar en mi bebé.

A diferencia de mí, todos ellos vienen de familias poderosas y con mucho dinero.

Sin el Jayden que conocí y amé, no hay nadie que me proteja a mí o a este niño.

"Ashlyn, me voy mañana. No estoy embarazada y es obvio que Jayden te ama ahora. Ya lo acepto. Solo déjame ir y vivir mi vida. Espero que sean muy felices."

"¿Qué diablos hace ella aquí?" Lisa viene hecha una furia por el pasillo hacia nosotras en la puerta.

Agarra a Ashlyn por el brazo y la saca de mi habitación, alejándola de mí. "Debería darte una bofetada. Cómo te atreves a estar aquí. Ya conseguiste lo que querías. Deja en paz a Winona o te haré perder tus dientes."

"Lisa. Está bien. Ya se iba."

"Claro que se va." Lisa tiene las manos en las caderas.

Ashlyn pasa junto a ella y entramos y cerramos la puerta. La cierro con llave.

"¿De qué se trataba todo eso? ¿Por qué la dejaste entrar?"

"No lo hice. Había dejado la puerta abierta y de repente entró aquí."

"Te lo dije, ella es muy rara. Siempre lo pensé. Es una acosadora de primera."

"Mira, solo disfrutemos nuestra noche. Olvídate de ella y de Jayden. Este es un nuevo comienzo. Déjame ir a vestirme y luego te sirvo unos tragos."

"Suena perfecto."

No voy a llorar, pero quiero hacerlo. Esta noche puede ser la última vez que vea a mi mejor amiga, y ni siquiera puedo compartir con ella la experiencia más increíble de mi vida. Sería una tía increíble.

Pero mañana empieza mi nueva vida. Estoy renunciando a tanto, incluyendo a mi mejor amiga. Toda mi vida va a cambiar. Cuanto más pienso en existir aquí así, más me atrae un cambio.

Aquí no hay nada más que recuerdos de una vida que nunca podré recuperar. Sé que a mi madre adoptiva le encantará tenerme allí y le encantará mimar al bebé. No puedo ir a ningún otro lugar y empezar de nuevo. Necesito reconstruirme.

Por encima de todo, necesito desaparecer y que nadie venga a buscarme, así que ni siquiera a Lisa puedo contarle que estoy embarazada. Estoy bastante segura de que todos aquí estarán contentos de despedirse de todo el drama que he traído últimamente.

Nadie más que Lisa. Le he preguntado constantemente sobre la noche que Jayden y yo dormimos juntos hace dos meses. Ella estaba allí, también Lance, pero juran que no pueden recordar nada. Tal vez nunca descubra quién drogó a Jayden esa noche o por qué.

Pero estoy dispuesta a abandonar esta vida por el bien de mi bebé. Jayden y yo estamos divorciados y él se va a casar con Ashlyn. Eso es todo lo que necesito saber ahora mismo.

Nunca he estado tan insegura de algo, pero no tengo miedo de hacerlo.

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