POV de Jayden

Ahí está ella. La reconocí al instante cuando el director de marketing me mostró la foto de esta empresa pequeña. La sangre me hierve al ver a ese tipo besarla, y de repente, como un relámpago, me atraviesa la cabeza esa imagen: Winona en un traje formal, dándome un beso y deseándome suerte antes de una entrevista.

Esa punzada de dolor se desvanece tan rápido como vino, dejándome solo esta irritación que me carcome. Menuda falta de profesionalismo. ¿No se supone que son socios de negocios? Claro que tiene derecho a rehacer su vida, pero este ardor en el pecho no se me quita.

Sus ojos se cruzan con los míos y el rubor le sube a las mejillas. Empujo la puerta y entro con un aire despreocupado, como si nada de esto me afectara. Traigo en la mano un contrato que podría cambiarles la vida, y pienso cerrarlo hoy mismo.

Dejo caer el documento sobre su escritorio. "En el contrato están todos los detalles. Tienes veinticuatro horas para firmarlo. Si no lo haces, nuestra empresa no