POV de Winona

Me quedé sin palabras. Lo miré fijamente y me senté en la silla frente a él. ¿Qué significaba todo esto? Aparte de lo de los deseos, que de todas formas es una tontería, necesito llevarme bien con él por el trabajo.

Habrá ocasiones en las que tengamos que salir juntos. Quizás es mejor arrancar la curita de un tirón y acabar con esto rápido.

Como si leyera mi mente, me dijo: "Será una cita de negocios. Solo eso. De verdad, no podemos estar siempre en la oficina. Es solo una cita".

No pude evitar recordar la primera vez que me invitó a salir.

***

Era el tercer año de preparatoria. Observaba a dos tontos copiándose en un examen de matemáticas, y uno de sus apuntes se cayó, flotando hasta mi escritorio. No es que fueran tontos, simplemente eran demasiado vagos para prepararse para el examen. Pero claro, tenían dinero de sobra.

Y el profesor de matemáticas, conocido entre los alumnos como el Viejo Bulldog, no toleraba ese comportamiento, sin importar la riqueza de las familias