55- JenniferMe siento fatal, sin embargo, la compañía de Sam es algo medianamente tranquilizador, aunque siento que me estoy perdiendo de algo. No me gustó para nada conocer así a mi suegro, justo cuando se le necesita, el toque de Sam se siente familiar, pero también extraño, este accidente fue extraño y todos caminan sobre cascaras de huevos a mi alrededor como si me fuera a quebrar.Nadie me termina de contar como fui arrollada por un auto y me esfuerzo por recordar algo y simplemente todo queda en blanco y los dolores de cabeza me atacan cuando me fuerzo a recordar algo.Me siento como si me hubieran arrancado hojas de mi historia que necesito, como un rompecabezas sin todas las piezas.Incompleta.Los doctores siguieron explicando lo prometedor de mi recuperación y que fue un milagro que estuviera viva, pero…Me falta algo.En un punto me quedé dormida y todos salieron para dejarme descansar, me dolía la pierna y traté de conciliar el sueño profundo y por un momento pude, pero t
56- Joseph Jamás esperé verme en una situación como está, Coraline estaba furiosa por no poder pasar, pero yo si logré colarme como su médico y podía echarle un ojo yo mismo. —No puedes ser ¿Cómo va a olvidarte? —pregunta Cora derrotada— él no puede ganar, ellos no van a ganar—. Dijo cuando vio a Gabrielle salir con paso decidido y Coraline prácticamente le gruñó. —Perdió seis meses de su vida, no puedo simplemente decirle, oye hola, nos conocemos y hemos follado como conejos los últimos tres meses —dije un tanto enojado, dejé salir el aliento por la boca y retomé la compostura— no me va a creer. —A mí sí— dijo desafiante la pelirroja— has que me dejen pasar— exigió. —No es mi hospital— le comente despacio— Gabrielle prohibió tu entrada, ya se nos ocurrirá algo, por ahora lo importante es que se recuperé al cien por ciento, pero ya despertó, Cora— le dije aliviado. —Despertó, Joseph— repitió y se fue en llanto, así que la abracé un momento. Escuchamos un carraspeo y nos separamo
57 SamJoseph tiene la precaución de estar siempre con ella, el desgraciado no me deja envolverla bien de nuevo en mi red, donde pertenece.A mi lado.Ya caerá, ella ya no recuerda lo vil que fui, sigo siendo el esposo perfecto, así que nada peligra, aunque a veces siento como me rechaza, pero es más que todo cuando Joseph nos observa como un halcón.—¡Paulette! —grité cuando llegué a mi casa y la vi en la sala con mi abuelo, ambos jugando ajedrez.—Aquí estoy, amore— dijo tranquila sin verme, analizando su siguiente jugada— no tienes porqué gritar.—Necesito un masaje— le dije para llamar su atención, luego de unos segundos lo hizo y me dio una brillante sonrisa.—Esta niña es inteligente, ten cuidado que son las peores— dijo el viejo Thairon.—Ella es una gatita buena y sirve para muchas cosas— le replique— que sepa ajedrez no quiere decir que es un peligro.—Me ha ganado tres veces— dijo el abuelo ceñudo.—Eres un terrible perdedor, Thai— dijo Paulette con coquetería.—Vamos— le di
58 ElizaEstoy un poco cansada del tema de Jennifer Alderwood y su accidente, tuve que callar a la prensa y pagar mucho dinero para que se perdieran algunas cosas de su caso, pero la tonta sobrevivió y eso es un problema para mí y para el idiota de mi hijo, aunque no quiera admitirlo, al menos lo era hasta que se despertó sin memoria.—¿En que piensas? —llega uno de mis primos, hijo de una hermana de mi mamá.—Leandro, que raro que se te ve por allí querido— le dije porque era cierto.Leandro vive aquí, pero tiene sus ocupaciones como todos los demás y solo mi papá y yo somos los que más estamos aquí, aunque hoy estoy sola,—Me tome el día— se encogió de hombros— ya viene tu cumpleaños, ¿harás algo?—Faltan al menos dos meses para eso, pero sí, quería una fiesta ¿Qué te parece?—Genial, necesito joder con alguien— se rio entre dientes.—Estaba pensando en algún club, pero mejor lo hago aquí, podemos mover algunos muebles— le comenté— ¿me ayudarás con eso? —Claro, por eso te pregunte,
59 Greta Si digo algo de seguro me mata, no he parado de llorar desde que se fue luego de mi castigo, él nunca había sido tan violento, pero no lo conozco verdaderamente. Solo hoy tuve un atisbo del hombre que puede llegar a ser en realidad y me aterró. «Tengo que decirle a alguien» pensé. ¡No! El pánico corrió por mis venas con el miedo calándose hondo en mi cuerpo. Si eso le hizo a Jennifer solo por divorciarse de él, que me hará mí que no soy nadie para él. —Debo irme lejos, muy lejos —temblé como una hoja sin saber que hacer. ¿Si voy a la policía me creerán? No, no, no, no puedo. —Eres una inútil —una voz en mi mente me habló de manera despectiva. Curiosamente esa voz se parecía a la de mi madre. —No soy una inútil. No fue mi culpa, yo… yo… Y-yo solo quería que hablaran y cerrarán ese ciclo para nosotros comenzar una relación seria— le dije a la vacía habitación. Fue lo que él me había dicho. No soy una inútil. No fue mi culpa. Yo no hice nada, solo… solo… ¿A quién qu
60 Joseph Odiaba cada minuto de cada día en que la mente de Jenni la mantenía en la ignorancia, era como un gatito inocente y esponjo en medio del bosque rodeaba de animales peligrosos, hacía semanas que no duermo bien solo por estar pendiente de ella, siento que en cualquier momento la atacaran. No puedo permitir que Sam se la lleve a la mansión y menos a otro lugar para jugar a la casita, cuando la verdad es que ya están divorciados, él no tiene nada que hacer al lado de ella, pero la situación no es fácil. Los días pasaban y Jennifer no recordaba y francamente me quedaba sin opciones. Apenas dormía solo vigilándola. Pensando que un día me la iban a quitar. Ella no me recordaba así que técnicamente no me estarían quitando nada, tampoco es un tapete, pero la sentí mía y no sé cuándo jodidamente pasó eso. —Doctor Kessler— me llamó una interna tronando los dedos en mi cara. La fulmine con la mirada y retrocedió al menos un paso, he estado de un humor irascible últimamente y la gen
61 Jennifer Soy una pervertida descarada, eso me queda cada vez más claro cuando me encuentro al lado de Joseph Kessler, es que no tengo vergüenza alguna cuando de él se trata, si Sam se da cuenta que le coqueteo a su padre de esta manera tan descarada se divorciaría de mí en el acto. Mis mejillas se calientan y mi corazón se acelera sin remedio alguno. Luego de esa platica nocturna casi hasta el amanecer todo cambió, intento despertarme todas las noches codiciosa de todas esas pláticas con Joseph, es… refrescante hablar con él. Ahora aquí en la azotea del hospital me siento bien en sus brazos, sé que todos me ocultan algo, pero me da miedo preguntar el que o sobre qué. Seguí abrazándolo y se sintió que fue por horas mientras drenaba cada lagrima que tenía en mi cuerpo esperando por desbordarse, pero luego el beso me dejo aturdida, no reaccioné tan rápido como me hubiera gustado, cuando la respiración se me nivelo y mi mente se despejo de la niebla abrumadora en donde estaba metid
62 JenniferHe pasado dos meses recluida en un hospital y de la nada Sam me saca tan rápido que no me acostumbré a la idea, era mi último día, pero aún así no me dejó despedirme de su padre.No tiene nada que ver con que no haya visto a Joseph antes de irme, para nada, eso sería… inapropiado.—No entiendo porque nos fuimos así, tu padre no estaba— me queje, ya en el carro me sentía incomoda.No quería admitir que me importaba despedirme de él, no tuve tiempo.No puedo admitir que me afecta más de lo que debería pensar que no lo volveré a ver.—No me llevo bien con él, lo sabes, ni siquiera fue a nuestra boda— me devuelve la queja.—No lo invitaste, Sam— le dije de repente molesta con él, nunca había sido tan irracional con Sam.Normalmente le seguiría la corriente, pero desde que sé que me ocultan algo no tolero muchas cosas, si hay algo que odio es la mentira y el engaño y esas son cosas que jamás perdonaría.Ahora que lo conozco no me veo no hablando por horas con él de nuevo.—Ya n