Cuando llego a casa, logro escuchar a Jack hablar con Laura muy silenciosamente. Puedo jurar que, al entrar, he visto como de repente le tocaba la mejilla pero prefiero obviarlo. Se apartan mucho más cuando me ven entrar y me saluda descaradamente. Le respondo de la misma forma y distingo que se sorprende al verme acomodarme con tanta confianza en casa de Jack.
—No sabía que ustedes...ya vivían juntos. —lo mira extrañamente.
—Sí, me propuso mudarme aquí para pasar más tiempo juntos sin que locos descerebrados intenten matarnos. — contesto antes de que él lo haga.
— ¡Ah, vaya! Esto sí que me sorprende, pero me da mucho gusto. — ¡qué hipócrita es esta mujer! Ni pensar que al inicio me caía bien porque me brindó toda su ayuda para salir de las garras de Frank, pero s
— ¿No tienes nada que decirle? —le pregunta Richard. No puedo ni verlos. Tengo mi vista perdida mientras no paro de llorar. Me cuesta respirar. Todo me quema por dentro. —Solo quiero a mi madre de vuelta, ¿dónde está? — ¿su madre? ¿Está pasando lo que creo que está pasando? Quiero desaparecer en este momento. — ¿De verdad no tienes nada que decirle a mi hija después de follártela todas las noches, aunque no fuera parte del trato? —no puedo seguir escuchando esta conversación, pero ni siquiera tengo fuerzas para moverme de esta silla. — ¡Cierra la boca! — ¡Por lo menos ten la decencia de explicarle las cosas!, ¿no? —No tengo nada que decir. Solo quiero a mi madre devuelta. — Rich
Jack Connor. Arrojo todo lo que se atraviesa en mi camino después de llegar a casa con mi madre. La he llevado al hospital para que la revisen y afortunadamente, está bien. Excepto por algunos rasguños que se hizo al intentar escapar de las manos de esos dementes. Todo empeoró cuando Richard empezó a sospechar que estaba enamorado de ella. No le agradó la idea y su actitud pasiva cambió.Esto pasará, solo es algo temporal.Trato de convencerme a mí mismo. Sabía que esto tarde o temprano pasaría, no es algo nuevo para mí. Sigo con la idea de que será como todas las demás. La olvidaré. —¿Esa jovencita...era su hija? — mi madre entra en conversación mientras prepara algo rico de cenar. —Sí. —intent
Después de ver a mi hermano en el hospital, es otro motivo para llorar. Pero esta vez, de alegría. Me ha pedido disculpas por las horribles cosas que me dijo bajo presión de gente pagada por Laura. Hago lo mismo, porque entiendo que fui muy estúpida al creer que él sería capaz de pensar tantas cosas horribles sobre mí. Además, si realmente quiero vivir en paz, será mejor dejar todo en el pasado. Debí imaginarme que si su padre (el dichoso político) le pagaba a Martha para no sacar su existencia a luz, no lo haría de repente. Pero al menos, está sano y salvo, así que nos prometemos salir adelante juntos sin importar qué. Al día siguiente, es el entierro de Richard. Peter fue encarcelado, Bilson también falleció junto a otros de los hombres armados y los pocos que sobrevivieron, fueron encerrados de la misma manera, in
Despierto con un tremendo dolor de cabeza sin poder recordar muchos detalles de la noche anterior. Solo tengo celajes importantes. Como que James me trajo a su casa, imaginé que era Jack y me acosté con él. ¡Dios! ¿Qué he hecho?No volveré a beber jamás. Antes de salir, me doy una intensa ducha en el baño de la habitación y llamo a Lisa para que venga a buscarme. Aparentemente James no está en casa, así que mejor saldré de aquí antes de verle la cara otra vez. Minutos después, Lisa llega y nos vamos a casa. — ¿Dónde demonios te metiste anoche? —le reclamo. La cabeza me va a estallar. —Eric hizo que olvidara que tenía tus llaves, lo siento mucho. No volverá a pasar, pero por lo visto tuviste buena compañía, ¿eh? ¡Hueles a sexo! —se ve muy relajada.
Jack Connor. Después de varios días ahogándome en la bañera con mis propias lágrimas, decido buscar una manera de desahogarme y sacarlo todo, o bueno, una parte de ello. Justo cuando tengo estas intenciones, veo papeles en blanco y sobres de cartas en nuevos paquetes que le han llegado a mi madre. Es entonces, donde me nace la idea de hacer una carta que posiblemente, le entregue a Melanie algún día.¿Funcionará?He mandado a preparar un álbum con todas las fotos que nos hemos tomado juntos en diferentes ocasiones. Agrego una caja con un hermoso collar de plata, rosas blancas, más lujos y una carta. Nunca esperaría una carta mía y honestamente nunca he hecho una, hasta hoy. Quiero sorprenderla, quiero que vea el arrepentimiento en mis letras y que pueda sentirme a través de ellas después de todo est
Me ha obligado a venir hasta su casa, otra vez.Estoy en la habitación de huéspedes de nuevo. — Quiero que te pongas eso y dame tu celular. —me ordena.Me niego de inmediato, pero lo saca del bolso de todos modos.—No soy imbécil. Ahora haz lo que te digo o te irá muy mal. —me amenaza. Cuando sale, las lágrimas de desesperación escapan de mis ojos. Busco algún celular o algo que me ayude a librarme de esta, pero no hay nada. Ni siquiera ventanas en esta m*****a habitación por la que pueda escapar. No me queda de otra. Tengo que buscar alguna manera de salir, pero esta noche no creo que sea. Me coloco la lencería que ha dejado sobre la cama y salgo de la habitación. Todas las puert
Al día siguiente, después de muchas horas de estrés diseñando mi nueva marca y arreglando muchas cosas relacionadas a ello, voy al departamento federal con mucha cautela para escuchar lo que los agentes de Jack tienen en mente para salvarme de esta situación. Cuando llego, Eric me lleva directamente a la sala de investigaciones. —¿Y Jack? —no lo veo por ningún lado. —Creo que está en la azotea. Está muy furioso con todo esto y no es para menos. Iré a hablar con él. Tú quédate con Jimmy, él te explicará el resto. —y antes de que le pregunte algo más, sube corriendo las escaleras. Cruzo las puertas de la sala de investigación.Es enorme y tiene pantallas gigantes por todas partes. Es como estar en la nasa.
— ¿Entonces aceptas esto por las buenas? —pregunta James mientras tomamos whisky en su comedor. —Supongo que no hay otra manera. —Me alegra que aceptes, porque por las malas, ya viste de lo que soy capaz. — ¿Por qué haces esto? Eres muy apuesto y puedes enamorar a cualquier mujer. — trato de sacarle el tema para que confiese y quede todo grabado. —Ese es mi problema, no me gustan las mujeres que se enamoran de mí, me gustan a las que se acuestan conmigo en contra de su voluntad. Eso me excita, pero tú puedes ser la excepción. Después de nuestra primera noche de sexo no puedo sacarte de mi cabeza. Ahora entiendo por qué el policía estaba tan obsesionado contigo. — se acerca y acaricia mis mejillas.Que Jack esté escuchando