Vasil siguió acercándose, acortando la distancia entre los dos con la mirada fija en los labios de Helena, mientras la chica temblaba como una hoja entre sus brazos y el corazón latía con una fuerza superior a cualquier cosa.
Ella se dejó llevar, cerró los ojos y se abandonó contra su pecho esperando a que él diera el primer paso. Pero solo sintió los labios de Vasil en su frente y luego se alejó de ella tan rápido que apenas si se dio cuenta de que ya estaba sola.
Cuando abrió los ojos, el auto de Vasil ya daba la vuelta y regresaba a la carretera.
Se recostó a la puerta pensando en qué era lo que había hecho mal para que él se arrepintiera de besarla y saliera huyendo. Lo único que pensó es que tal vez no era suficiente para él, se sintió tan poca cosa, tan disminuida que las lágrimas se represaron en sus hermosos o
— ¡Aaachi!!!!! Demetrio seguía estornudando justo cuando Vasil cruzó por el portón y aparcó el vehículo en el garaje. — ¡Maldición! Seguramente pesqué un resfriado, ¡Pero esto es tan extraño! — ¿Sigues estornudando? — Preguntó el otro bajando del vehículo. — Sí, ya ni siquiera recuerdo cuando fue la última vez que me enfermé… Limpiándose la nariz con un pañuelo. — Creo que eras humano todavía — Vasil trató de recordar poniéndose una mano en el mentón — Si, casi estoy seguro de eso. — Entonces no sé qué coños es lo que tengo — Soltó el Beta con enorme fastidio. — Puede ser algo en el ambiente… y hablando de eso… — Vasil se acercó al muro en donde estaba la nueva valla electrificada — Huele raro aquí… Pero antes de que pudiera seguir revisando de dónde provenía el mal olor, se acercó corriendo uno de sus hombres. — ¡Señor! ¡Señor! ¡Tiene que venir a ver esto! — Gritó uno de los chicos de la manada agitando
— ¡Hey!, Demetrio, hay algo que necesito que hablemos…Demetrio caminó detrás de su amigo con rumbo al despacho del Alfa.— Tú dirás…Le dijo tras cerrar la puerta a sus espaldas y sentarse en el cómodo sofá de piel.La habitación era elegante y gritaba dinero por todas partes, de la pared colgaban un Pollock y un Krasner genuinos.— ¿Recuerdas que mañana es el evento de caridad en la universidad?— ¡Ah… sí! Lo había olvidado por completo con todo ese asunto de los lobos, el tónico y la seguridad.— Sin sumarle lo de tu cola rebelde... — Dijo Vasil con una sorrisita sarcástica.— No me lo recuerdes, me dañó un buen par de pantalones... y a todas estas, ¿Dónde se llevará a cabo?—
Abby había estado llamado con insistencia al teléfono de Helena, pero ella en realidad no quiso contestar, no tenía nada emocionante que contarle a la rubia. ¿Qué le iba a decir? ¿Qué Vasil había estado a punto de besarla y que a último minuto se arrepintió? ¡No!, no iba a pasar por esa vergüenza ni porque ella fuera su mejor amiga. Se acomodó con el rostro enterrado en la almohada y después de casi deshidratarse de tanto llorar, se había quedado dormida. Comenzó por tener una vista aérea impresionante, un bosque fresco y frondoso con un aroma exquisito a pino silvestre. El aire cálido golpeaba contra ella de forma agradable. Dio un vistazo hacia abajo, y fue cuando lo vio. El fuego. Se había apoderado de una construcción hermosa, hecha de piedra pulida, elegante, pero no ostentosa, de líneas rectas como la arquitectura romana, el jardín y los campos de trigo ardían como paja y la casa crepitaba por dentro. La sintió extrañamente famil
Cuando se levantó, estaba entumida de frío, se dio una ducha caliente y se abrigó lo mejor que pudo, se asomó por la ventana, el paisaje estaba más blanco que nunca, y fue cuando lo vio. Él estaba ahí, justo en el lugar en donde se terminaba el claro y comenzaba la hilera de pinos centenarios del bosque.El lobo, su lobo, su salvador, esos grandes y expresivos ojos ambarinos con destellos dorados. Su pelaje plateado tenía rastros de nieve y estaba de pie junto a un árbol, bajo las ramas, en la sombra, esperando…Helena se pegó al vidrio de la ventana y los recuerdos de aquella noche golpearon con fuerza su mente. Vasil inclinó la cabeza como haciendo una pequeña caravana y trató de mirar con los ojos de Helena, buscó la conexión entre ellos, como la que tuvieron él y Freya, que era tan natural como respirar, aún más fácil y natural
— Emile, sé que podrás conseguirme esa pieza para poder estudiarla, si en alguien confío es en ti, siempre has sido una mujer intrépida y de seguro sabrás como hacer para que la chica te lo entregue… La Dra. Frezer seguía escuchando por teléfono las instrucciones de Armin mientras movía la cabeza de lado a lado en negación, el líder máximo del culto a la diosa Freya estaba convencido de que necesitaba tener la joya entre las manos para salir de dudas. — Armin, tengo una mejor idea, ¿Qué harás esta noche? — Preguntó la Dra. Frazer. — Nada, supongo que me quedaré frente a la computadora investigando, ¿Por qué? — Porque habrá una gala de caridad esta noche en la universidad, y estoy bastante segura de que la joven vendrá. — ¿Cómo lo sabes? — Los chicos hablan Armin, solo ponte algo elegante, no te dejarán entrar sin saco. —Mmm… suena interesante. — Más que eso, será una excelente oportunidad para que veas la joya, si te co
Las chicas se arreglaron el cabello en el salón y luego cada cual fue a casa a terminar con el atuendo. Helena se duchó y luego se puso ese vestido de seda pura azul profundo que habían conseguido hacía unos días atrás. El color le sentaba perfectamente y realzaba el tono de sus ojos. La hacía ver más blanca y el fuego de su cabello se veía salvajemente sexi.Trabajó un poco en el maquillaje, en verdad no era buena con las brochas y los pinceles, la buena para eso era su madre, incluyendo al maquillaje, pero hizo lo mejor que pudo.Se aplicó un sombreado ahumado con tonos tierra y un lápiz labial brillo, color muy suave y natural. Estaba hermosa, incluso ella misma se sorprendió de lo bien que lucía, y que ella pensara eso de sí misma era apoteósico.Pronto su madre entró para verla convertida en toda una reina del baile.— ¡Q
— Entonces, ¿Vendrás? — Le dijo por teléfono.— Claro que sí, estoy muy cerca, guárdame un lugar en tu mesa — Armin respondió mientras aparcaba el coche relativamente cerca de la entrada del Campus.— Recuerda que la gala es para donar dinero… — Le recordó la Dra. Frazer.— Oh, no es problema, tampoco es como si tuviera mucho dinero, pero puedo darme ciertos lujos… además, la ocasión lo amerita, y si esa chica tiene lo que creo que tiene, no importa el precio, así sea un donativo jugoso para la universidad.— ¿Tardarás mucho?— Búscame una bebida, acabo de dejar el carro en el estacionamiento.La Dra. Frazer consultó la hora en su móvil y le pareció que Armin bromeaba, pero no, toda duda se disipó en cuanto lo vio entrar.El hombre caminó direc
—La chica es esa que está allá — Dijo Emile Frezer a su jefe señalando Helena. — ¿La pelirroja? ¡Pero si parece una modelo!, ¿Estás segura de que es ella? —Totalmente segura, no suele verse así, por lo general es siempre muy recatada y viste de forma sencilla, pero es ella. — ¡Wao! ¡Creo que acabas de descubrir algo más valiosos que el collar! La Dra. Frezer ladeó la cabeza en señal de interrogación. —La chica Emile, la chica parece una diosa, ¿Es que acaso no lo ves? ¿No logras ver el parecido con los antiguos grabados? Vasil estaba sentado a buena distancia de los catedráticos, prácticamente en el centro del salón, y en el otro extremo, en la mesa de los organizadores, estaban el padre de Ashley, y uno de los hombres más importantes de la Fraternidad, y el Dr. Garret, fundador de los Leukós Alfa kai Omega, hombre ilustrado y adinerado que manejaba la Fraternidad con tal organización como si de una Empresa trasnacional se tratara. La música estaba por encima de los niveles huma