Estoy en mi cumpleaños número 25 en la mejor discoteca de la ciudad, Carlota nos pagó todo a Mónica y a mí para que yo me animará a salir, Mónica y yo estudiamos juntas publicidad hace un par de años y nos hicimos buenas amigas, CC es otro cuento, amigas desde siempre, pero yo estaba becada en su escuela y era la que me defendía de abusivas como Clara Lynnwood y sus amigas, así que siempre fuimos CC y yo en todo, hasta que llegó Monica y la incluimos en la ecuación.
—No sólo celebramos su cumpleaños, sino también que le conseguíser la asistenta de Genoveva "bicth" White— grita Mónica para hacerse escuchar por encima de la música.
Celebramos con un grito de júbilo.
—Vamos a ver si le sacan la telarañas a esa cueva tuya — me señaló mientras caminamos a la barra del lugar y no pude evitar sonrojarme.
La discoteca Winx se encontraba en la azotea del hotel El Dorado, el mejor hotel de Nueva York.
—Amo esta nueva discotecas que conseguiste CC— le dice Mónica a Carlota.
De cariño la llamábamos CC; llegamos a la barra y pedimos tragos para todas al bartender, como yo era la cumpleañera no pagaba nada.
Luego de mucha fiesta, mucho baile, mucho alcohol. Aunque en mi caso poco alcohol porque no me gustaba beber en exceso, me sentí algo achispada por la bebida y decidí ir a sentarme en una de nuestras mesas de la zona VIP.
Carlota nos dijo que un amigo les había dado las entradas a la discoteca, porque no iba usarlas, decidí mejor sentarme en la barra y pedí un vaso de agua y el chicos sentado a mi lado me saludó:
—Hola, guapa ¿Cómo estás? —pregunta tratando de entablar una conversación —te ves increíble en ese vestido sexy.
En vez de voltear a ver al chico, bajé la mirada para ver mi vestido era un vestido blanco hasta la mitad del muslo lo veía tan sencillo que no lo vi tan espectacular como el chico pintaba, destape mi agua y le di un largo trago sin responder al hombre.
—No estás escuchando que te estoy saludando o es que no puedes devolver un simple saludo— espetó el hombre molesto por no haberle contestado su saludo inicial.
Me gire para verlo y decirle cuatro cositas estar borracha me soltaba la lengua, cuando en ese momento un hombre aún más alto de lo que jamás había visto a un hombre, se atraviesa en el medio de los dos.
—Disculpate con la señorita. Eso fue muy grosero de tu parte— habló el hombre en un gruñido enojado.
—L-lo siento ¿está bien? —el otro hombre comenzó a balbucear en un intento de disculparse, me reí entre dientes.
—Está bien, estás disculpado ahora retírate — dije a modo de sarcasmo.
El latoso hombre se retiro más rápido que inmediatamente y el recién llegado se giró y lo primero que vi fue unos penetrantes ojos oscuros mirarme, sus cejas pobladas y su cabello largo agarrado en una coleta en lo alto de su cabeza, se veía intenso, intrigante y misterioso, jamás me habían gustado los hombres así como él, pero este tenía algo que me llamaba poderosamente la atención
—¿Estás bien? — preguntó con una nota de preocupación en su voz.
A lo que le contesté— Sí, estoy bien gracias a ti.
Normalmente era una persona muy reservada, tímida de pocas palabras y algunas personas lo tomaban de forma grosera cuando no contestaba, pero después de todo el chico me salvó de un idiota.
—Mucho gusto, mi nombre es... —estaba diciendo.
En ese momento en que el chico soltó su nombre Mónica llega con una algarabía enorme, gritando en mi oído emocionada porque venía nuestra canción, Rita Ora nos hacía siempre menear las caderas. Así que no logré escuchar el nombre del chico, sin embargo tomé su mano de manera atrevida cuando la extendió para presentarse y lo jale a la pista de baile.
Bailamos y bebimos durante muchas horas y el chico nunca se volvió a despegar de mí, platicamos muy poco sentía que esa noche las palabras sobraban, mi amiga Mónica me hacía señas diciendo que era un buen partido a CC la perdimos en algún momento de la noche cuando se ligó a un hombre rubio, el hombre de ojos oscuros mide alrededor de 1.90, cabello lacio largo, de piel blanca, vestía una chaqueta de cuero una camisa roja debajo y unos jeans con unas botas negras, se veía tan sexy con esa aura de chico malo que me encantó.
Decidimos dar la fiesta por terminada a eso de las 4am y él dijo tener una habitación en el hotel. Así que decidí quedarme con él, dando un salto de fe, algo que jamás había hecho con un extraño.
—Eres muy hermosa— me dijo cuando llegamos a su habitación.
Cerró la puerta y acarició el óvalo de mi cara, cerré los ojos y sentí electricidad pasar por mi cuerpo, sus manos se sentían grandes, mi cabello rizado y oscuro lo levantó para acariciar mi cuello, con una de sus manos, mientras con la otra acariciaba mi cara y mis labios abrí la boca y jadee sin poder evitarlo y me sentí enrojecer por segundos, menos mal era de piel oscura y casi no se me notaba tanto.
Encendió las luces iluminando la estancia y lo modificó para que diera un aire sexy.
—Quiero verte mejor—hablo bajo en mi oído.
Yo solo podía asentir, sentía que las palabras se las había comido el gato, tal vez sobraban, no sé quién es este este extraño y misterioso hombre, pero me siento en confianza para que vea mi cuerpo con las luces encendidas. Mi cuerpo no es como el de las mujeres delgadas, tengo descendencia brasileña, por lo que tengo curvas pronunciadas.
Solo he tenido dos parejas en toda mi vida, suena algo tonto para tener 23 años, pero siempre he sido muy tímida, Carlota siempre ha sido la más alocada de las 3, Mónica la más hermosa y yo siempre he sido la más calladita y por una vez, por una noche quiero saber lo que se siente soltarse la melena y alocarse, compartir con una extraño más que copas y risas
Entregué mi cuerpo y me sentí llegar al cielo, acarició mi cuerpo de una manera que no sabía que podía acariciar se y luego de culminar en un maravilloso orgasmo compartido nos quedamos dormidos.
Estire mi cuerpo de una manera tan dolorosamente satisfactoria qué me sentí viva son esas clases de dolores correctos como cuando lo trotas y sientes tus piernas doler por el poco uso así me sentía esa mañana estire mis brazos para tocar a la persona que tenía al lado pero la cama estaba fría abrí mis ojos y me dé a los lados la luz entraba por las ventanas abiertas dándole un brillo hermoso al hotel las cortinas revoloteaban al compás de la brisa fría de mediados de febrero vi el reloj en la mesa qué había junto a la cama y eran las 10 de la mañana alguien tocaba la puerta insistentemente Así que tome una bata de baño y rápidamente fui abrió era un chico del hotel con un carrito de comida Lo siento pero no he pedido nada o no hace falta el señor el señor Collins pidió un desayuno completo a las 10:30 de la mañana Disculpa dónde se encuentra el señor Collins el señor Collins dejó el hotel a las 7:00 de la mañana Okay Gracias Dejé al chico servir la mesa y me fui a vestir cuando salí el chico ya no estaba no me dio tiempo de darle la propina me puse mis zapatos y tomé mi cartera pero el rico olor a café llego a mi esposa una sales y decidí sentarme a comer si él había tenido el lindo gesto de dejarme el desayuno desayunar y a la noche nunca hablamos de tener una relación a largo plazo nunca hablamos de que nos diéramos el número ni siquiera le dije a mi nombre simplemente me sé su apellido el señor Collins y que se quedó aquí una noche no sé más nada más de él.
Poco sabía yo que esa noche me pasaría facturas tiempo después.
Hoy no es mi día, voy muy apurada porque tuve una emergencia. Mi jefa es un dolor en el trasero y no me va a pasar por alto que llegue tarde, paso por el Starbucks por el latte con caramelo sin espuma y con Splenda como le gusta a ella, es una perra esbelta y yo debo de cuidar su dieta y su figura o si no de patitas en la calle.A parte de su pedido de todos los días me dan un muffin de arándanos porque muero por ellos, nisiquiera debo hacer fila para pedidos, ya conozco a los empleados y siempre tienen listo mi pedido, les doy una buena propina y salgo corriendo dos cuadras más abajo, normalmente me voy en mi bici, es más rápido, ecológico y es el único ejercicio que me puedo permitir, pero se me daño una llanta así que toco el bus hoy.Estoy por llegar a la puerta para entrar al edificio y tropiezo con alguien que ni había visto que venía en dirección contraria, todo el latte cae en mi camisa, está muy caliente y grito de dolor.—Merda você não pode ver— hablé en portugués realmente
KRISTENA la mañana siguiente cuando Lola llegó a la casa, ya Luciano estaba listo, ya estaba bañado y vestido. Ahora mientras tanto comía en la sala viendo sus caricaturas favoritas de la mañana, cantaba y repetía sus diálogos al pie de la letra, yo terminaba de alistarme.Al principio intentaba que él siguiera durmiendo, pero era imposible una vez yo me despertaba, él también lo hacía y me acompañaba cada mañana en mi rutina.—Gracias a Dios que ya llegaste, Lola ¿Cómo está tu hijo? —Lola es una mujer trigueña de cabello color caramelo y corto por la barbilla es la mejor con Luciano.—Mi hijo está mucho mejor, gracias a Dios ¿Y mi lucianito cómo está?—Lucianito está bien, viendo caricaturas.—Ah bueno. Tú sabes que esa es la única debilidad que tiene Luciano, aunque ya va hacer ahora —me recuerda viendo su reloj —de que comience en Animal Planet su programa favorito.Luciano es un fanático de los animales, amá ver documentales en el día mientras colorea en sus libros para colorear.
ROMINA Valió la pena el desvelo que nos mandamos Mónica y yo, redbull, galletas y café nos mantuvieron despiertas mientras que mi niño hermoso se quedó dormido en el sofá luego de tratar de esperarnos y lo lleve a su cama dejando la luz del pasillo encendida y su puerta entreabierta por si se le ofrece algo, odia dormir con luces apagadas. — Cayó super rápido — me murmura mi amiga, cuando vengo de regreso. — Sí, cuando la adrenalina baja, sólo queda el cansancio — sonreí viendo la puerta medio abierta de mi niño. Luego de mucho tiempo ideando un plan para ejecutar nuestra publicidad Mónica y yo no paramos bostezar. — Ya son las tres de la mañana, hermana ¿qué tal si dormimos algo y mañana le seguimos? — me pregunta mi amiga. —Si amiga, pongamos ambas la alarma. Sino despertamos a tiempo nos van a crucificar. Le presté una pijamas de la mías, lavamos nuestros dientes y nos fuimos a dormir, nos acostamos y abrazamos en posición de cucharita. — Esté es el cambio— suspiró mi amig
ROMINA Todos nos quedamos viendo sentados dentro de la sala A, cuchicheando y especulando por que nos querrían ver, hace menos de 48 horas que nos dieron la campaña, no esperarán que tengamos ya algunas ideas, que las tenemos, pero tampoco quiero compartirlas con todos aquí, son mis compañeros desde hace tres años, a la mayoría trato, sin embargo esta es una oportunidad de oro, sé que mi idea es buena. Más que buena, es tremendamente buena y no quiero arriesgar a que alguien haga algo mejor o se la copie. La jefa entra con su elegancia innata arreglando su traje de chaqueta y pantalón blanco, era una mujer hermosa y conservada para su edad. — Lamento hacerles perder el tiempo en su hora de salida — carraspea un poco alegando algo que sabemos que no es cierto. Pero como tiene al recién llegado a su espalda con su séquito, suponemos que ella quiere parecer más humana. Si supieran. — El señor Collins es el dueño de BeauFanta y a creado él mismo la nueva línea de Fantaline, el nuevo p
Romina Lola saliendo por la puerta y mi compañera y amiga Mónica haciendo gala de su buena onda entro con bolsas de super diciendo “Taraaaaa” —Traje para hacer la cena, la comida chatarra esta bien, pero mi salud no lleva bien ese tipo de dietas— agrega mientras deja las bolsas encima del mesón de la cocina. —Podíamos ir juntas a comprar — arrugue la nariz disgustada por ese hecho. Puede parecer algo muy inocente, pero sabía lo que hacía, querían hacerme la vida más fácil y así era CC y mi mamá con sus muchos tappers en la nevera. Le gustaban ayudarme en exceso y sé que apenas llego a fin de mes con los gastos de Luciano sin embargo no me gusta crear lastima con las personas a mi alrededor no es mi tipo y honestamente lo evitaba. —Me dejaste sola ¿recuerdas? — chasqueo la lengua la lengua, rebatiendo mi argumento. Pero sabía bien que se había agarrado de eso para hacer las compras de una semana. —Me rindo, ustedes son incorregibles. —Cocinas tú, te queda de maravilla cocinar co
RominaDesde antes de entrar a trabajar en la agencia mi sueño era ser una gran publicista, el sueño tuve que guardarlo por las responsabilidades que conlleva ser madre y no por que no pudiera sino porque no podía darme el lujo de dejar mi trabajo, Genoveva es una pésima jefa, pero verla trabajando con sus ideas innovadoras era un lujo que me encantaba ver cada vez que podía, sin embargo sabía que ella en un futuro cercano no me iba a dejar tocar una publicidad, siempre he querido pensar en el porque, luego llegue a pensar que era racista, después me costo entender que así es ella… Genoveva no tiene corazón y lamentandolo mucho yo necesito el empleo.Aún tengo frente a mí al chico que no me deja irme de aquí, necesito llegara la tintoreri en menos de nada por que asi son las cosas con Genoveva.Rapidas y si no no estas haciendo nada y eres una floja.—Buenos días, estoy buscando una agencia de publicidad — el hombre frente a mí me ve de manera amable, pero detallando mi cuerpo.—Allí
Romina Hoy es el gran dia. hoy se veran todas las ideas para hacer la publicidad de FantaLine y estamos mas que nerviosas.Me puse un pantalón de traje con una camisa de seda y una chaqueta que combinara bien con todo, unos zapatos que fueran comodos porque de igual manera me toca trabajar con Genoveva y necesito ser mas rapida que nunca hoy. Nos arreglamos en silencio, la tension era pantente en nuestros rostros esta era una oportunidad de oro que no se repetiría mas. Quería ganar. Lo necesitaba.—Todo va a salir bien me dice Mon con su cara serena, pero la tensión en sus ojos seguía allí.—Eso espero, nos caería bien el dinero extra sonreí un poco apenada por admitirlo.—Lo se nena, yo igual reimos entre dientes.Monica es una mujer fuerte y decidida que dejo los prejuicios de su vida de millonaria por buscarse la vida, dejo de ser esa niña mimada para luchar por su futuro y todo lo que tiene se lo a comprado con el sudor de su frente. —Vamos a por ello ¿no? — mi cometido era inf
Romina(UN DÍA ANTES DEL GRAN DÍA)Salir temprano del trabajo es algo extraño, pasa cada tres mil años, con ese pensamiento Mon y yo nos encaminamos al metro platicando sobre Nilo, no por primera vez.—No entiendo porque no le das una oportunidad, tiene su empresa y todo y te puede dejar bella las veces que quieras.—No quiero salir con él, no me veo saliendo con un hombre que me dice como combinarse mejor. Ya lo hizo ¿recuerdas?— Es un poco extraño, pero... Es un buen hombre— saco mi amiga su artillería pesada.Nilo se hacía pasar por gay frente a sus clientes por que es bien extraño (dicho por él) que un heterosexual tenga una peluquería, pero ya que él era amanerado y le gustaba la moda aprovechó eso y abrió su propio salón.— Lo es, pero no me atrae y no quiero complicar mi vida aún más y menos ahora que debemos enfocarnos en obtener esa cuenta.—Eso si nena, obtendremos eso… puedo sentirlo en mis venas— mi amiga afirmaba tener poder psíquicos.La gente que pasaba por nuestro lad