Karen estaba emocionada por su nuevo comienzo al lado de su pareja, Joseph, un arquitecto multimillonario que conoció accidentalmente, en un su trabajo cuando iba de salida, fue como una chispa cuando se vieron a los ojos. Después de un año de relación, al fin estaban casados y pronto, partirían de luna de miel.
Aun pese que su familia se oponía a su relación, de igual forma, el exitoso arquitecto decidió continuar su relación con la hermosa castaña que conoció en el centro comercial. Era la mujer perfecta que quería como esposa, ni siquiera las hijas de otros importantes empresarios tenían las cualidades que Karen poseía como la esposa perfecta, su único defecto es no ser de alta posición.― ¿Lista para nuestra Luna de miel?―Mas que lista. ―chilló emocionada KarenDisponían a subirse al auto cuando Karen notó cierta presencia que le disgustó, ella observa con disgusto a la asistente personal de su ahora esposo.―Dijiste que solo seriamos nosotros dos.―Cariño ―Joseph besa su frente con cariño ―Solo ira por si hay algo que sea de suma importancia, será como si no existiera, ya veras que ni siquiera recordaras que esta cerca.Karen no estaba muy convencida de lo que estaba diciendo, pero no quería discutir con su esposo justo antes de viajar. Al llegar al hotel y registrarse, subieron a su habitación, Karen se encontraba mas molesta porque su esposo le dio una suite a su asistente, justamente la continua a la de ellos.Pero ella no quería discutir con el por pequeñas cosas sin sentido así que bajó junto a su esposo y disfrutaron de una tarde en la playa juntos y esta vez, su asistente no estuvo con ellos y eso la tranquilizó por un rato.Después de un día exhaustivo decidió que pasaría el resto de la noche con su esposo para ver una película juntos, tal y como lo hacían cuando eran novios, pero sus planes se vienen abajo cuando lo ve muy arreglado con un traje.― ¿Vas a salir?―Amor, olvidas que habíamos acordado en ir al casino un rato después de estar en la playa toda la tarde.― ¿Qué? Pero si yo no recuerdo haber acordado eso. Es más, creí que veríamos una película juntos como lo hacíamos antes.―Karen ¿enserio quieres hacer lo mismo cuando nos encontramos de luna de miel? ¿no se te apetece hacer algo diferente?―No. ―dijo cortanteJhosep se da cuenta de que su esposa no querrá cambiar de opinión, pero él ya había hecho planes y no quería perder su oportunidad de apostar un rato y pasarla bien así que le prometió volver temprano para ver lo que ella quisiera juntos, Karen por supuesto acepto ya que le prometió volver en una hora.Al pasar el tiempo, Karen se dio cuenta que su esposo no llegaría como lo prometió así que después de pedir algo de comer, Karen busco algo para entretenerse mientras su esposo venia de regreso. Tocaron la puerta de su habitación al mismo tiempo que avisaban que eran los de servicio. Se levantó y abrió la puerta, cuando estaba por servirse, se dio cuenta de que no era lo que había pedido así que intentó alcanzar al empleado antes de que se fuera, pero, cuando llegó al ascensor, las puertas se habían cerrado.Mueve sus labios en un movimiento circular mientras piensa en lo tedioso que seria bajar con la comida hasta abajo por lo que decide mejor llamar para reportar la confusión, trotando se dirige hacia su habitación, pero por un momento quitó los ojos del frente cuando creyó a ver visto a su esposo y sin darse cuenta que alguien mas salía de su habitación por que le llevaron la comida erróneaKaren tropezó y justo antes de caer, ella sintió como un brazo la sujetó con firmeza de la cintura, cuando ella vio al hombre se quedó abrumada e hipnotizada.―Y−Yo…―Debería ver por dónde va.Su voz profunda y gruesa erizó su piel, sus ojos no podían dejar de ver los del hombre que seguía sujetándola, el azul de sus ojos con verde cerca del iris de sus ojos la tenían atrapada por completo.―¡¡Vladimir, cariño!!“Se llama Vladimir”Karen se da cuenta que debería hacer algo.―Lo siento, es que la comida equivocada me llevaron….Vladimir suelta una risa burlona ante la respuesta tardía de la chica que no reaccionaba, Karen se sintió avergonzada y salió corriendo por lo que acaba de pasar, tiró la puerta y luego a recostó su espalda sobre ella dejándose caer al suelo.― ¡Que fue eso! ¡Karen eres una idiota!Nuevamente tocaron su puerta y se levanto enseguida al creer que era los de servicio, pero palidece cuando se da cuenta que era el mismo hombre de un rato. Inmóvil y sin saber que decir se queda observándolo.―Dijiste algo sobre comida por lo que deduje que eres tú la que pidió esto.Karen se sorprendió al ver que erróneamente le habían dado su comida a Vladimir, ella reacciona enseguida y trae la comida que le llevaron por error.―Lo siento, su esposa seguramente debe estar molesta por esto.― ¿Esposa? ―dijo Vladimir confundido, se da cuenta que ella poseía un anillo de matrimonio“Es una pena que esté casada”―Lamento los problemas ―Vladimir se ríe ya que no entendía por que ella se disculpaba por algo que ocasionó los de servicio. ―Yo...―Buenas noches.La forma cortante en la que le respondió la dejo confundida ya que hace un momento parecía ser amable.Al regresar a su habitación con su secretaria, Vladimir la vio con desinterés, se acostó mientras en su mente estaba la castaña pelo ondulado de hace un rato.―Vladimir, vamos que quiero ir a bucear.―Tengo algo que hacer, después te alcanzo ―murmura mientras termina de contabilizar algunos pendientes, pero su secretaria insiste ―Dije que iré luego.―Bien. ―dijo molestaAl terminar sus pendientes, se viste de forma casual y toma el ascensor, cuando estaba por cerrarse alguien le grita que espere por lo que intercede antes de que las puertas se cierren.―Muchas gracias…Ladea una sonrisa al ver que era la misma chica de anoche, se da cuenta que su presencia la altera, ella se aleja de él manteniendo su distancia.― ¿Sola nuevamente?―Mi esposo me está esperando ―sonríe tímidamente ―Por lo que veo también esta solo.Vladimir no responde e ignora sus palabras, de pronto el ascensor se detuvo de golpe causando movimientos bruscos que hicieron tambalear a Karen quien sin darse cuenta terminó encima de Vladimir, perpleja lo observa e intenta levantarse, pero su corazón se congela cuando él la cambia de posición.―Buen truco para acercarse a mí.“¡Que! ¡Pero si yo no hice nada!”Ella intenta decir algo pero su voz se pierde cuando siente su mano bajar hasta su escote, quiere gritar que se detenga pero no puede articular una sola palabra.―Dicen que los labios carnosos y rojos son los mas sabrosos y exquisitos.―No….―Bueno... que tal si lo averiguamos.Karen se congela cuando sintió sus labios sobre los suyos, sus manos golpearon su pecho, pero Vladimir las toma ambas y las coloca encima de su cabeza.Siente la fricción de sus cuerpos y ella quiere patearlo pero sus piernas no le permiten hacerlo, cuando sus labios ya no son prisioneros le grita que se quite de encima, Vladimir lo hace y con una sonrisa saborea sus labios pasando su lengua mientras delinea sus labios. Disfruta del rostro rojo de la castaña ya que pudo sentir por un breve momento como ella le correspondió el beso.― ¡Qué demonios cree que hace! ―grita molesta ― ¡Soy una mujer casada!―Lo sé.Las puertas del ascensor se abrieron y Joseph estaba afuera, Karen salió enseguida, tomó la mano de su esposo y se alejó lo mas que pudo de Vladimir mientras este solo podía verla alejarse de él como si fuera una plaga“¿Acaso no le gustó? Ja, no importa porque yo si lo disfruté”Al llegar con su acompañante, esta le reclama porque se tardó demasiado y ya había terminado. Pero el
Asimilar lo que estaba pasando era lo único que quería, pero su mente se encontraba en shock, Karen se quedó sentada observando al hombre que se encontraba dormido, parpadea e intenta decir algo, echarlo de su habitación o algo por el estilo pero sus labios solo tiemblan mientras lo observa“¡Que… rayos… todo lo de anoche… fue.. con él!”Vladimir sintió la Luz de la mañana por lo que frunciendo el ceño comienza a despertar y al abrir sus ojos lo primero que vio fue el rostro pálido de Karen, recordó lo que pasó anoche y aun así no sabe como es que la castaña que creyó que lo odiaba terminó dándole la mejor noche de sexo que nunca antes había tenido.Ambos se ven las caras por unos segundos y Karen entrando en pánico comenzó a gritar haciendo que Vladimir se levantara de la cama asustado, ella salió de la cama y corrió despavorida hacia el baño encerrándose.—¿¡Pero que demonios pasa contigo!? —gritó molesto Vladimir—¡Tú... me violaste! —grita nerviosa Karen —¡Te voy a denunciar!Vlad
—Buenos días.Karen se tensa al escuchar la voz de Bladimir, voltea lentamente su cabeza y nota que ya se encontraba muy bien vestido, intenta ignorarlo y convence a su esposo de entrar a la habitación para descansar ya que le dice que durmió incomoda en la piscina.—No debería dormir en lugares así, cualquier enfermo podría aprovecharse de usted mientras duerme, porque caras vemos, mentes no sabemos.Ella no podía creer que él estuviera diciendo eso después de lo que pasó la anoche anterior, su roja cara de vergüenza la obligó a entrar con su pareja a la fuerza a la habitación para así no verle mas la cara a Vladimir, pero antes de que cerrara la puerta vio la sonrisa maliciosa que adornaba el rostro de Vladimir.Para Vladimir era simple diversión el provocar a Karen ya que era entretenido para él verla tan nerviosa cuando esta frente a él y que su esposo estuviera a su lado y pensaba que mientras tuviera la oportunidad seguiría disfrutando del juego.Cerrando los ojos y disfrutando
—Buenos días. Karen se tensa al escuchar la voz de Bladimir, voltea lentamente su cabeza y nota que ya se encontraba muy bien vestido, intenta ignorarlo y convence a su esposo de entrar a la habitación para descansar ya que le dice que durmió incomoda en la piscina. —No debería dormir en lugares así, cualquier enfermo podría aprovecharse de usted mientras duerme, porque caras vemos, mentes no sabemos. Ella no podía creer que él estuviera diciendo eso después de lo que pasó la anoche anterior, su roja cara de vergüenza la obligó a entrar con su pareja a la fuerza a la habitación para así no verle mas la cara a Vladimir, pero antes de que cerrara la puerta vio la sonrisa maliciosa que adornaba el rostro de Vladimir. Para Vladimir era simple diversión el provocar a Karen ya que era entretenido para él verla tan nerviosa cuando esta frente a él y que su esposo estuviera a su lado y pensaba que mientras tuviera la oportunidad seguiría disfrutando del juego. Cerrando los ojos y disfrut
—Asi que me estas siguiendo —Karen estaba paralizada, sus ojos se centraban en un solo objetivo y Vladimir se da cuenta de que no deja de ver su falo —Podrías al menos ser no tan obvia cuando me ves mi miembro.—Y–Yo… no estaba viéndote nada —dijo de inmediato —gira sobre sus talones e intenta controlar sus hormonas alteradas pero lo que vio la dejo congelada sin darse cuenta —Soy yo la que debería decir eso, no tú… —todo su cuerpo se tensa cuando siente algo restregándose contra su trasero —Que haces…Vladimir la tomó del cuello suavemente mientras sus manos la sujetan de la cintura, su respiración eriza la piel de su cuello, su aliento roba el suyo cuando siente el cálido beso como si fuera un suspiro, siente sus manos colarse por debajo de su top, muerde sus labios para no gemir cuando tira de su pezón, “porque diablos me vine sin sostén”—No digas idioteces —murmura en un intento de controlar su respiración —Suéltame, mi marido llegara en cualquier momento.—¿Enserio? —sonríe incr
Pequeñas punzadas en su pecho acompañadas de un sudor frío hicieron que sus piernas flaquearan por un momento, Vladimir fue veloz ya que la sostuvo antes de que Karen se desvaneciera, ella se reincorpora asustada y lo aleja de él, se da cuenta que su comportamiento no fue el adecuado ya que su esposo la observaba preocupado de que hiciera algo mal.—Yo… lo siento, señor… Vermilion—¿Por qué se disculpa? No sería mejor que me agradeciera por sujetarla antes de que se lastimara“No puedo creer lo arrogante que es”Karen hace un gesto de disgusto, pero rápidamente lo oculta.—Tiene razón, muchas gracias. —dijo sarcásticamente KarenAl sentirse en problemas, Karen intenta escapar de esa reunión, pero su esposo se lo impide y le susurra en el oído que fuera amable con él por esta noche algo que le disgustó porque no podría hacerlo, no, sabiendo que ya se acostó con él y que sin que lo admitiera en voz alta fue una de las noches más excitantes que puede recordar, en su mayoríaSe da cuenta
Respira profundo para mantener la calma, sonríe con naturalidad para luego mentir diciendo que se tropezó cuando venía buscando su celular en su bolsa, Vladimir la observa cuestionante, no nota ningún nerviosismo en ella por lo que le cree, se aleja de ella y besa su mano, pero Karen la aleja de la suya bruscamente y lo ignora—Por favor, no quiero que te lleves una mala impresión de mí, —la detiene al interponerse en su camino —Que tal si salimos y hablamos.—Yo no tengo nada de qué hablar con alguien tan agresivo y salvaje, troglodita. —espetó fingiendo estar molesta —Está claro que se encuentra molesto por lo que pasó entre nosotros, pero ya le dije, nada ha pasado así que será mejor que se aleje de mí. —Vladimir la acorrala nuevamente —¿Qué es lo que quiere?...—Ambos sabemos que me grabó —ella estaba atónita y paralizada —Asi que, por el bien de ambos, será mejor que me entregue ese celular.—Eso no es cierto —comienza a sentirse nervio por la sonrisa siniestra que adorna su rost
—Mis ojos están aquí —dijo llamando su atención, Karen sentía sus orejas calientas, nota la perversión en su rostro —Será mejor que se vaya a su habitación, o pueden creer que en verdad es una oportunista, señora Torres. —¿Disculpa? —dijo ofendida. Vladimir se ríe y comienza a cerrar la puerta, molesta empuja la puerta entra de golpe —Discúlpate conmigo ahora mismo. Karen lo sigue dentro de su habitación y se cabrea mas al escuchar la risa de Vladimir. —¿Por qué habría de disculparme? —¿¡Como que por qué!? —dijo eufórica y el se mueve sus labios en un gesto de confusión —Acabas de llamarme oportunista y eso no es cierto —dijo molesta. —Si lo hice. —se encoge de hombros Vladimir—Pero… —detiene sus pasos y observa a un costado de ella. Nota que Karen ha cerrado la puerta —Me siento confundido porque… estoy en mi habitación, solo con una erección esperando que llegue mi secretaria y me la quite, pero estas aquí exigiéndole algo aun hombre que quiere sexo. Karen comienza a retroceder