—Mis ojos están aquí —dijo llamando su atención, Karen sentía sus orejas calientas, nota la perversión en su rostro —Será mejor que se vaya a su habitación, o pueden creer que en verdad es una oportunista, señora Torres. —¿Disculpa? —dijo ofendida. Vladimir se ríe y comienza a cerrar la puerta, molesta empuja la puerta entra de golpe —Discúlpate conmigo ahora mismo. Karen lo sigue dentro de su habitación y se cabrea mas al escuchar la risa de Vladimir. —¿Por qué habría de disculparme? —¿¡Como que por qué!? —dijo eufórica y el se mueve sus labios en un gesto de confusión —Acabas de llamarme oportunista y eso no es cierto —dijo molesta. —Si lo hice. —se encoge de hombros Vladimir—Pero… —detiene sus pasos y observa a un costado de ella. Nota que Karen ha cerrado la puerta —Me siento confundido porque… estoy en mi habitación, solo con una erección esperando que llegue mi secretaria y me la quite, pero estas aquí exigiéndole algo aun hombre que quiere sexo. Karen comienza a retroceder
—Shh…—¡No me chites carajo!...Vladimir cubre su boca al no guardar silencio, sonríe con maldad al verla tan asustada y nerviosa, hace un gesto con sus ojos y Karen comprende, ambos se quedan inmóviles y esperan a que Joseph diga algo más.—Cariño… vamos, ¿Dónde estás?Escuchan como comienza a alejarse, al no escucharlo más ella suspira aliviada, al volver en si nuevamente corre por su celular tirado en el suelo y abre la puerta, Vladimir la toma de la muñeca y ella bufa preguntando que quería ahora, pero él la sorprende con beso pasional que al final termina con un mordiscoConfundida y abrumada corre hasta su habitación, cierra la puerta y apoya su espalda contra la puerta, en posición fetal se deja caer al suelo mientras apoya su frente contra sus rodillas y piensa en lo que acaba de hacer nuevamente—Que hice, que hice, que hice… ¡soy una idiota!Maldice porque aun sabiendo que no era correcto lo que hizo, aun así lo disfruto y se entregó por completo al deseo y el placer que sin
Joseph acepta su propuesta, pero Karen la rechaza al mismo tiempo, ambos se ven las caras y Joseph se ríe, y le susurra que es una buena oportunidad porque es mejor ser cercanos a él pero Karen se negó y dijo en voz alta que se iría en un vuelo de primera clase.—Señora Torres… dígame una cosa ¿Por qué me odia tanto?—¡Qué! —dijeron Joseph y Karen al mismo tiempo atónitos por su pregunta.—Si. Es lo único que puedo pensar ya que desde que nos conocimos en la reunión, me ha tratado de una forma fría y distante, soy una persona sociable que le desagrada las enemistades por eso…—No, no… como cree que mi esposa lo odia —Joseph no quería perder su oportunidad y tampoco quería que su mayor rival creyera que le guarda rencor por la cena —Anda amor, acepta su ofrecimiento, hazlo para que esté tranquilo al saber que estas con alguien de confianza.Acorralada no tuvo más opción que acceder, no quería viajar con él, no quería estar en el mismo espacio que Vladimir, pero no podía decirle que no
Vladimir creía tenerla bajo su control, pero Karen logró liberar una de sus piernas aprisionadas y darle una patada en sus partes, al caer de rodillas, se pone de pie y toma sus cosas para escapar de él, pero no se percata de que él se había recuperado de su golpeLa derriba y se posiciona sobre ella, Karen lucha, pero esta vez Vladimir no le permite jugar sucio.—Eso fue muy bajo —eleva ambas cejas al mismo tiempo —¿Por qué huyes de mi? Si fueras mas amable…—Tu secretaria vendrá en cualquier momento… —evade el tema —Déjame ir.—Ella no vendrá, seguramente esta maldiciendo porque le dije a los de seguridad que no la dejaran entrar, y según ella se vengará de mi acostándose con el copiloto.—Vaya que la conoces demasiado —dijo sarcástica —Demasiado para solo ser una simple secretaria.—Eso es porque soy alguien observador —Vladimir observa el mechón de cabello que se encontraba cerca de sus labios, lo toma y lo acomoda detrás de su cuerpo—Y las personas observadoras, sabemos de muchas
Karen no podía creer que la persona de confianza de su mejor cliente sea Vladimir, como es posible era la único que le decía su mente.—Entonces… vamos a empezar con los detalles que me pediste.Debía fingir, así como él lo hace para que su cliente no pensara que se conocían, no quería que creyera que había pasado algo entre ellos ya que su cliente es muy perceptivo y podría darse cuenta si su comportamiento no es el mismo de siempreAl terminar de agendar todas las demandas de su cliente, este se pone de pie y como loca comienza a gritar diciendo que no podía quedarse mas tiempo porque el tráfico lo haría perder su vuelo, salió despavorido mientras le gritaba a Vladimir encargarse del resto—¡Oustin no espera!...Pero cuando Karen quiso alcanzarlo ya había tomado el ascensor. “porque esto me pasa a mi” no podía quedarse a solas con él, eso le dictaba su mente, siempre que pasa terminan en la cama y no puede pasar—Bueno… supongo que tendrás el tiempo ocupado así que podemos dejarlo p
Vladimir da dos pasos al frente, pero se detiene al pensar en su reacción, no quería que creyera que era un pervertido por lo que tuvo que retroceder y salir de la habitación, al entrar al ascensor apoya su brazo contra la fría pared de metal, entrecierra sus ojos mientras la imagen de Karen lo atormenta, no podía soportarlo, su erección era demasiado evidente por lo que debía de asegurarse de que no hubiera nadie en recepción que lo viera.Se asegura de que no hubiera nadie, sale del ascensor y actúa como siempre, al estar por salir una voz masculina lo detiene, se queda inmóvil y responde para que hablara, escucha como se aproxima a él.—Olvidó su identificación señor.—Muchas gracias. —ladea una sonrisa momentáneaSe sube al auto y con ambas manos sujeta el volante con fuerza, las venas de sus brazos resaltan mientras siente la rabia consumirlo.—¡Joder, joder, carajo!...Sale a toda velocidad llegando en menos de una hora a su departamento, al entrar se ve en el reflejo de los cri
Karen no sabia que hacer o que decir, se levanta como resorte y le da la espalda diciéndole que se marche antes de que llamara a seguridad, Vladimir molesto la toma de la cintura y la besa forzosamente, ella intenta liberarse antes de ceder por lo que le da un pisotón fuerte haciéndolo quejarse de dolor, cuando la ve a la cara y antes de que pudiera decir algo le da una bofetada que la hizo quejarse por la fuerza que usó en el golpe—¡Vete!... ¡¡Demonios dije que te largaras!!. —gritó molesta.Vladimir sonríe agriamente, pasa su lengua por su labio y siente el sabor metálico que le provocó sus uñas al arañar su labio. Se marcha y azota la puerta al cerrarla, Karen cae sentada sobre el suelo sin salir de su shock, quería entender lo que acaba de pasar entre ella y Vladimir, pero no logra procesarlo“¿Q–Qué fue lo que pasó”Toma su celular y busca a Óustin entre sus contactos y le marca.—Querida ¿Cómo estás?—Oustin, necesito hablarte de algo.Aun no podía creer que Oustin rechazara su
Vladimir no podía articular ni una sola palabra, solo se inmuta a ladear una sonrisa. La sirena de una patrulla hizo al joven cuñado de Karen frenar en seco y girar en sentido contrario, aceleró su auto y salió despavorido, Vladimir exhala de alivio, de inmediato se quita de encima a Karen y acomoda su cinturón de su pantalón antes de detenerse.Al estacionarse a un costado de la carretera, un oficial se acercó a ellos, los enfoca con una linterna a ambos, le pide la licencia y se la da.—¿Hacia a dónde van?—A la ciudad, la esposa de uno de mis socios esta de turista y la llevo a casa.La oficial alumbra el rostro de Karen, la observa dormir. Le entrega su documentación y se marcha. Al llegar a su departamento, no tuvo más opción que llevarla en sus brazos, abre la puerta principal, camina por el pasillo corto hasta llegar a su habitación, la deja sobre la cama y le quita los zapatos al pensar que le podrían incomodarSe da cuenta de lo que estaba haciendo, frunce el ceño y se pregun