Asimilar lo que estaba pasando era lo único que quería, pero su mente se encontraba en shock, Karen se quedó sentada observando al hombre que se encontraba dormido, parpadea e intenta decir algo, echarlo de su habitación o algo por el estilo pero sus labios solo tiemblan mientras lo observa
“¡Que… rayos… todo lo de anoche… fue.. con él!”
Vladimir sintió la Luz de la mañana por lo que frunciendo el ceño comienza a despertar y al abrir sus ojos lo primero que vio fue el rostro pálido de Karen, recordó lo que pasó anoche y aun así no sabe como es que la castaña que creyó que lo odiaba terminó dándole la mejor noche de sexo que nunca antes había tenido.
Ambos se ven las caras por unos segundos y Karen entrando en pánico comenzó a gritar haciendo que Vladimir se levantara de la cama asustado, ella salió de la cama y corrió despavorida hacia el baño encerrándose.
—¿¡Pero que demonios pasa contigo!? —gritó molesto Vladimir
—¡Tú... me violaste! —grita nerviosa Karen —¡Te voy a denunciar!
Vladimir se ríe desconcertado pues no le parecía lógico lo que estaba diciendo ella pensaba “¿Acaso está demente?”
—¡De que diablos estas hablando, tú fuiste la que entró en mi habitación a mitad de la noche y me hizo…
—¡¡Cállate!! —gritó avergonzada de que dijera lo que hizo —Entre nosotros ¡No pasó nada… yo.. soy una mujer casada!
—Claro… aunque yo no recuerdo que hayas dicho eso anoche, al contrario, gemías que querías más de mí.
La cara de Karen era como la de un tomate, cae sentada sobre el suelo sin creer que ella haya sido capaz de haberse acostado con otro hombre que no fuera su esposa y encima que haya dicho eso a ese hombre que creía que era un troglodita
—Oye, ya vas a salir o quieres que entre por la fuerza, es mi habitación y mi baño.
—No es cierto —dijo desesperada y nerviosa al mismo tiempo —Es del hotel.
“¿enserio dije eso?”
Golpea con sutileza su cabeza contra la puerta del baño al sentirse como una idiota por la respuesta que le dio a Vladimir. Pasando su mano por el rostro busca la forma de convencerla de salir de su baño, en eso escucha que algo esta vibrando, la vibración provenia del suelo, al buscar el sonido, encontró el celular de Karen debajo de su ropa.
“Amor”
Ladea una sonrisa al leer el nombre de la llamada entrante. Se acerca nuevamente a la puerta del baño y le dice a Karen que su amor la estaba llamando, como un resorte se pone de pie y abre la puerta, le arrebata el celular con ambas manos dejando caer las sabanas que cubrían su cuerpo, responde la llamada y antes de hablar suspira para tranquilizarse y que no notara su extraño comportamiento. Mientras ella hablaba por teléfono, no se percata que estaba completamente desnuda frente a Vladimir y que este la veía con lascivia.
—No, como crees, yo no soy de tomar hasta perder la cordura y lo sabes.
Vladimir no pudo resistirse ante su cuerpo y mas cuando le dio la espalda, observa su espalda, sus ojos bajan lentamente hasta su trasero donde nota el lunar en una de sus posaderas, se acerca a ella quien aun seguía hablando con su esposo, con una sonrisa maliciosa, estrella su mano fuertemente contra su trasero haciéndola soltar un grito que le pareció más a un gemido.
Cortando la llamada abruptamente voltea de inmediato y le da una cachetada por lo que hizo, pasando de lado recoge su ropa y comienza a vestirse lo más rápido que pudo, pero Vladimir la toma de la mano antes de que tomara sus tacones.
—No te iras y me dejaras así ¿verdad?
—¿De qué habla?
—Ahora me hablas de tú, ¿no crees que las formalidades a estas alturas… dan igual? Y mas después de la noche…
—Quiere dejar de recordarme a cada rato el error que cometí.
—Asi que ahora es un error. —dijo Vladimir sin creerle una palabra
—Si, lo fue, lo que pasó anoche, jamás pasó, usted y yo no nos conocemos.
Vladimir mantiene su sonrisa burlona y eso le molesta a Karen, él la toma por sorpresa con un efusivo beso dejándola confundida, la suelta de su mano y ella sale enseguida de la habitación mientras siente que su corazón, está enloquecido por un simple beso.
Corre a su habitación y cuando estaba apunto de entrar ve a su esposo salir de la habitación de su asistente, se queda de pie sintiendo una punzada en su pecho, Joseph se percata de su presencia y se acerca a ella con tranquilidad.
—Buenos días señora Lodwood —dijo la asistente —Señor, Lodwood, haré la llamada para cancelar la reunión forzada para ahora con el dueño de la compañía.
—Bien. Porque esta vez, estaré muy ocupado con mi esposa y no tendré tiempo para atenderlo.
Al marcharse la asistente, Karen observa con inquietud a su esposo.
—¿Por qué estabas saliendo de la habitación de tu asistente?
—Toqué un par de veces para saber si sabia donde estabas anoche, pero no respondía así que entré por la fuerza, al parecer ella y tú fueron las únicas que se divirtió anoche. En cambio yo… tuve que pasar la noche solo en la habitación.
—¿Solo?—dijo con un nudo en su garganta
—Si, yo… me sentí culpable por dejarte solo en nuestra segunda noche de luna miel asi que regresé temprano con unas rosas para pedirte disculpas y pasar una velada inolvidable, pero no te encontré. Te esperé toda la noche y como no regresaste me preocupé, fue por eso que fui con mi asistente, crei que estaría contigo o que sabría algo de ti.
Oírlo hablar hacía que Karen sintiera culpa por lo que hizo, el remordimiento en su conciencia era tan grande que tomó la decisión de decirle la verdad de lo que pasó anoche, no quería ocultarle nada a Joseph.
—Joseph… la verdad es que yo… —guarda silencio mientras por su mente pasa imágenes de algún futuro alterno de lo que podía pasar si le decía la verdad —Anoche, quería sorprenderte y te busqué en el casino y en todas partes del hotel pero al no encontrarte me sentí mal porque creí que te habías decepcionado de mi, por eso tomé un par de copas en la piscina, sin darme cuenta me quedé dormida.
—Cariño —Joseph la abraza —Si te elegí a ti fue porque te amo, no hay nadie mas perfecto que tú para estar a mi lado como mi esposa.
“No pude… no puedo decirle algo así, lo conozco y me odiaría para siempre”
—Buenos días.Karen se tensa al escuchar la voz de Bladimir, voltea lentamente su cabeza y nota que ya se encontraba muy bien vestido, intenta ignorarlo y convence a su esposo de entrar a la habitación para descansar ya que le dice que durmió incomoda en la piscina.—No debería dormir en lugares así, cualquier enfermo podría aprovecharse de usted mientras duerme, porque caras vemos, mentes no sabemos.Ella no podía creer que él estuviera diciendo eso después de lo que pasó la anoche anterior, su roja cara de vergüenza la obligó a entrar con su pareja a la fuerza a la habitación para así no verle mas la cara a Vladimir, pero antes de que cerrara la puerta vio la sonrisa maliciosa que adornaba el rostro de Vladimir.Para Vladimir era simple diversión el provocar a Karen ya que era entretenido para él verla tan nerviosa cuando esta frente a él y que su esposo estuviera a su lado y pensaba que mientras tuviera la oportunidad seguiría disfrutando del juego.Cerrando los ojos y disfrutando
—Buenos días. Karen se tensa al escuchar la voz de Bladimir, voltea lentamente su cabeza y nota que ya se encontraba muy bien vestido, intenta ignorarlo y convence a su esposo de entrar a la habitación para descansar ya que le dice que durmió incomoda en la piscina. —No debería dormir en lugares así, cualquier enfermo podría aprovecharse de usted mientras duerme, porque caras vemos, mentes no sabemos. Ella no podía creer que él estuviera diciendo eso después de lo que pasó la anoche anterior, su roja cara de vergüenza la obligó a entrar con su pareja a la fuerza a la habitación para así no verle mas la cara a Vladimir, pero antes de que cerrara la puerta vio la sonrisa maliciosa que adornaba el rostro de Vladimir. Para Vladimir era simple diversión el provocar a Karen ya que era entretenido para él verla tan nerviosa cuando esta frente a él y que su esposo estuviera a su lado y pensaba que mientras tuviera la oportunidad seguiría disfrutando del juego. Cerrando los ojos y disfrut
—Asi que me estas siguiendo —Karen estaba paralizada, sus ojos se centraban en un solo objetivo y Vladimir se da cuenta de que no deja de ver su falo —Podrías al menos ser no tan obvia cuando me ves mi miembro.—Y–Yo… no estaba viéndote nada —dijo de inmediato —gira sobre sus talones e intenta controlar sus hormonas alteradas pero lo que vio la dejo congelada sin darse cuenta —Soy yo la que debería decir eso, no tú… —todo su cuerpo se tensa cuando siente algo restregándose contra su trasero —Que haces…Vladimir la tomó del cuello suavemente mientras sus manos la sujetan de la cintura, su respiración eriza la piel de su cuello, su aliento roba el suyo cuando siente el cálido beso como si fuera un suspiro, siente sus manos colarse por debajo de su top, muerde sus labios para no gemir cuando tira de su pezón, “porque diablos me vine sin sostén”—No digas idioteces —murmura en un intento de controlar su respiración —Suéltame, mi marido llegara en cualquier momento.—¿Enserio? —sonríe incr
Pequeñas punzadas en su pecho acompañadas de un sudor frío hicieron que sus piernas flaquearan por un momento, Vladimir fue veloz ya que la sostuvo antes de que Karen se desvaneciera, ella se reincorpora asustada y lo aleja de él, se da cuenta que su comportamiento no fue el adecuado ya que su esposo la observaba preocupado de que hiciera algo mal.—Yo… lo siento, señor… Vermilion—¿Por qué se disculpa? No sería mejor que me agradeciera por sujetarla antes de que se lastimara“No puedo creer lo arrogante que es”Karen hace un gesto de disgusto, pero rápidamente lo oculta.—Tiene razón, muchas gracias. —dijo sarcásticamente KarenAl sentirse en problemas, Karen intenta escapar de esa reunión, pero su esposo se lo impide y le susurra en el oído que fuera amable con él por esta noche algo que le disgustó porque no podría hacerlo, no, sabiendo que ya se acostó con él y que sin que lo admitiera en voz alta fue una de las noches más excitantes que puede recordar, en su mayoríaSe da cuenta
Respira profundo para mantener la calma, sonríe con naturalidad para luego mentir diciendo que se tropezó cuando venía buscando su celular en su bolsa, Vladimir la observa cuestionante, no nota ningún nerviosismo en ella por lo que le cree, se aleja de ella y besa su mano, pero Karen la aleja de la suya bruscamente y lo ignora—Por favor, no quiero que te lleves una mala impresión de mí, —la detiene al interponerse en su camino —Que tal si salimos y hablamos.—Yo no tengo nada de qué hablar con alguien tan agresivo y salvaje, troglodita. —espetó fingiendo estar molesta —Está claro que se encuentra molesto por lo que pasó entre nosotros, pero ya le dije, nada ha pasado así que será mejor que se aleje de mí. —Vladimir la acorrala nuevamente —¿Qué es lo que quiere?...—Ambos sabemos que me grabó —ella estaba atónita y paralizada —Asi que, por el bien de ambos, será mejor que me entregue ese celular.—Eso no es cierto —comienza a sentirse nervio por la sonrisa siniestra que adorna su rost
—Mis ojos están aquí —dijo llamando su atención, Karen sentía sus orejas calientas, nota la perversión en su rostro —Será mejor que se vaya a su habitación, o pueden creer que en verdad es una oportunista, señora Torres. —¿Disculpa? —dijo ofendida. Vladimir se ríe y comienza a cerrar la puerta, molesta empuja la puerta entra de golpe —Discúlpate conmigo ahora mismo. Karen lo sigue dentro de su habitación y se cabrea mas al escuchar la risa de Vladimir. —¿Por qué habría de disculparme? —¿¡Como que por qué!? —dijo eufórica y el se mueve sus labios en un gesto de confusión —Acabas de llamarme oportunista y eso no es cierto —dijo molesta. —Si lo hice. —se encoge de hombros Vladimir—Pero… —detiene sus pasos y observa a un costado de ella. Nota que Karen ha cerrado la puerta —Me siento confundido porque… estoy en mi habitación, solo con una erección esperando que llegue mi secretaria y me la quite, pero estas aquí exigiéndole algo aun hombre que quiere sexo. Karen comienza a retroceder
—Shh…—¡No me chites carajo!...Vladimir cubre su boca al no guardar silencio, sonríe con maldad al verla tan asustada y nerviosa, hace un gesto con sus ojos y Karen comprende, ambos se quedan inmóviles y esperan a que Joseph diga algo más.—Cariño… vamos, ¿Dónde estás?Escuchan como comienza a alejarse, al no escucharlo más ella suspira aliviada, al volver en si nuevamente corre por su celular tirado en el suelo y abre la puerta, Vladimir la toma de la muñeca y ella bufa preguntando que quería ahora, pero él la sorprende con beso pasional que al final termina con un mordiscoConfundida y abrumada corre hasta su habitación, cierra la puerta y apoya su espalda contra la puerta, en posición fetal se deja caer al suelo mientras apoya su frente contra sus rodillas y piensa en lo que acaba de hacer nuevamente—Que hice, que hice, que hice… ¡soy una idiota!Maldice porque aun sabiendo que no era correcto lo que hizo, aun así lo disfruto y se entregó por completo al deseo y el placer que sin
Joseph acepta su propuesta, pero Karen la rechaza al mismo tiempo, ambos se ven las caras y Joseph se ríe, y le susurra que es una buena oportunidad porque es mejor ser cercanos a él pero Karen se negó y dijo en voz alta que se iría en un vuelo de primera clase.—Señora Torres… dígame una cosa ¿Por qué me odia tanto?—¡Qué! —dijeron Joseph y Karen al mismo tiempo atónitos por su pregunta.—Si. Es lo único que puedo pensar ya que desde que nos conocimos en la reunión, me ha tratado de una forma fría y distante, soy una persona sociable que le desagrada las enemistades por eso…—No, no… como cree que mi esposa lo odia —Joseph no quería perder su oportunidad y tampoco quería que su mayor rival creyera que le guarda rencor por la cena —Anda amor, acepta su ofrecimiento, hazlo para que esté tranquilo al saber que estas con alguien de confianza.Acorralada no tuvo más opción que acceder, no quería viajar con él, no quería estar en el mismo espacio que Vladimir, pero no podía decirle que no