De regreso en la mansión Enma y la Nena recibieron a Rous preocupadas, y le hablaron en tono compasivo.
—¿Qué sucedió? —Le dijo la Nena—. Debiste decirnos lo que fuera que esté pasando.Rous estaba cabizbaja y no quiso decirles la verdad, Alan seguía con una dura expresión en su rostro.—Dinos qué sucede hija.—No quiero hablar, perdónenme. —Alan de mala manera le dijo:—Dile ya a mi familia lo que sucede.Se quedó mirándola fijo. Rous volteó su rostro a otro lado evadiendo al enfurecido primo de su esposo. Como no dijo nada él expuso lo que ya todos se imaginaban que sucedía.—¿Estas preñada de Jeremith? —Ella los evadió a todos por completo escondiendo su rostro.—Hija dinos la verdad, ¿estas esperando un hijo? —Dijo Enma compasiva.Rous sinti&Llegó el día de la fiesta del solsticio en la fundación de los niños. Rous colaboró en el evento y pasó un día lleno de alegría. Las asperezas que había entre ella y Alan habían desparecido, aunque Alan mantenía la distancia con ella y aun sentía culpa por ocultarle a Jeremith que iba a ser papá. Pero Enma se encargó de hacerle entender que por nada del mundo en Chicago debían enterarse del embarazo de Rous.Aparte de guardar silencio, Alan y su familia debían hallar algún modo de evitar que alguno le viera la panza y se lo contara a Jeremith.Entonces planearon dejarla viviendo con la Nena cuando pasaran los meses de invierno. Mientras tanto se marcharían a la casa de campo donde ella estaría alejada de las miradas de todos.Todo estaba preparado y en una semana se marcharían al pueblo, donde la familia tenía una lin
EL DÍA DEL BAILEPier llegó a la mansión un poco antes de las ocho de la noche. La mayoría de la familia ya estaba en la sala ya listos para salir, a excepción de Marian, la Nena y Rous.Alan y Pier se fueron al estudio de Harry y se sirvieron un coñac para animar un poco la noche.—¿Entonces irás con Paola al baile? —Dijo Pier en son de complicidad.—Sí, la invité antes de regresar de Chicago y aceptó encantada.—En verdad creí que llevarías a Ninna.—Con Ninna nah, no volveré a salir con esa loca ni a la esquina.—Espero que con esta tengas mejor surte. Y a ver qué tal me va a mí con Rous.—Oye no deberías pensar en jugar con ella, recuerda…—Que es la esposa de Jeremith, lo sé; pero recuerda que él la mandó a la mierda y ella
Alan regresó aún más mareado al salón y fue directo a la mesa donde se encontraban los demás. —¿Por qué demoraste tanto? —Dijo Paola. —Por qué dices que me demoré, solo fui al baño y regresé. —Te tardaste mucho y estoy muy aburrida. ¿Por qué no nos vamos a otra parte? —¿A dónde? —A una discoteca a divertirnos de verdad —Ella se acercó y le dijo al oído—. O a donde tú quieras. —Alan puso cara de póker, la verdad era que esa noche no pensaba meterse en la cama con nadie. —No puedo marcharme de la fiesta y dejar a la Marquesa. —¿Ay entonces estaremos aquí aburridos el resto de la noche? Envidio a Franco y a Pier. —Alan espabiló. —¿Cómo? ¿Por qué los envidias? —Se marcharon advertirse a otra parte mientras estabas adentro. —Alan volteó a mirar a la mesa donde debía estar Rous con la Marquesa y ciertamente ella no se encontraba allí, tampoco Pier. Alan le preguntó a su madre. —¿Dónde está Rous?<
Bridget se puso feliz cuando supo que Jeremith no había viajado a Italia y que tampoco tenía intensión de hacerlo. Buscando reconciliarse con él le marcó a su celular.—Mi vida me hace muy feliz que no te hayas marchado a Italia.—¿En verdad estas satisfecha? —Preguntó con reproche en su tono de voz.—¿Por qué no estarlo? en verdad creí que pasarías las fiestas con la omega.—No mi reina, solo dije eso para fastidiar a Gabriel.—Debiste aclarármelo.—Me molestó mucho que fueras a reclamarme por un chisme del envidioso de mi primo.—Perdóname mi amor, eso no volverá a suceder.—Está bien. Te perdono, y no quiero que esto vuelva a repetirse, ya hice bastante para demostrarte que Rous está fuera de mi vida, tú eres mi hembra alfa, es
Gabriel que ya lo tenía todo planeado para provocarle a Rous un aborto, decidió llevar a cabo el plan dos días después de haber llegado a Italia. Pidió a uno de los empleados de la familia que le llevara una cubeta, el champú y todo lo que requería para lavar y pulir su auto.Llevó consigo una navaja escondida en el bolsillo, lavó el auto y lo pulió simulando mucha dedicación. En cuanto tuvo oportunidad cortó el sistema de los frenos casi en su totalidad, con la intención de que estos funcionaran bien por un tiempo.Su plan había tenido otro avance, y era peligroso para todos, incluso para él mismo que pensaba conducir el auto en ese estado, pero en un lugar que no llevará el incidente a mayores.Después fue a la la cocina donde se encontraba Rous con Marian, la Nena y Annie horneando pastelillos. Él se acercó a la Nena y puso su b
Al comienzo de la carretera debía ir cuesta arriba, el auto no presentó ninguna dificultad.Como cinco minutos más tarde llegaron a una zona donde ya debían comenzar a bajar hacia el pueblo y luego tomar el camino hacia la ciudad. Desde la carretera se podía apreciar la costa del mar que se encontraba abajo, ellas estaban en la zona alta todavía.Todo parecía normal, ellas iban conversando cuando de pronto la Nena notó que los frenos del auto no respondían.—¡¡Qué demonios!! —Dijo la Nena mientras intentaba hacer funcionar el freno.—Qué sucede tía. —Dijo Annie nerviosa.—Los frenos no responden y estamos aumentando la velocidad. ¡Nos vamos a estrellar! —El auto comenzó a aumentar muy rápido la velocidad—¡¡Tía nos vamos a matar!! —Dijo Annie con des
Alan salió de prisa y subió a su coche. Prefirió no decirle nada a si madre para no ponerla nerviosa. Mientras conducía el sudor le salía y le bañaba la cara. Su cuerpo estaba temblando. Tenía pensamientos cargados de pavor, sabía en sus adentros que se dirigía a un escenario de horror. Nada bueno se podía esperar de un accidente en esa carretera.Estaba preocupado por todas ellas, pero como padre pensaba en su pequeña. Se rehusaba a creer que Chiara pudiera estar grave o tal vez muerta.Cuando llegó al lugar del accidente habían y ambulancias y un camión de los bomberos. Las labores de rescate ya habían comenzado.Harry en ese momento estaba en shock, actuaba como si aquello no le afectaba en lo absoluto. Alan se dirigió a donde él estaba con Luciano.—¿Saben algo de ellas?—El Auto cayó en la playa
Harry volvió a la clínica y fue con Alan.—¿Y mamá?—Fue a dejar a Marian en la mansión con una enfermera. ¿Cómo están ellas?—Chiara salió bien, no tiene nada grave en la cabeza, salvo por las costillas y el fémur roto, pero se pondrá bien. Rous sigue inconsciente, la está atendiendo el doctor Guido, más tarde vendrá aponernos al tanto.—¿Y su bebé, lo perdió?—Aun no lo sé. —Hubo silencio, Alan observó a si padre que se veía triste a pesar que se mantenía firme para no tirarse a llorar. Alan lo abrazó.—Papá siento tanto lo de mi tía… y Annie. —Los dos lloraron abrazados.—Annie tan niña, y la Nena... tan alegre que era, extrañaré mucho a mi hermana.—No merec&ia