No deje de correr por ningún motivo, recordé de inmediato el lugar que Val me había indicado hacia unas noches atrás. No preste ningún tipo de atención al lado al que me dirigí, lo único que sabia era que tenia que seguir y seguir mientras que las lagrimas me recorrían las mejillas sin fin. Aunque ya no deseaba llorar, me sentía inútil e indefensa cuando lo hacía, me enojaba que desde la llegada de Val a mi vida lo único que hacía era llorar. No obstante lo peor era que todas esas veces lloraba por frustración e impotencia, no cómo ahora que sentía algo diferente que no sabía explicar, Sin embargo eso tendría que acabar ya, aunque mis ojos dolían, aunque el nudo en mi garganta la desgarrara y ahogaba. Ne aseguraría de ya no derramar ni una sola lágrima más. No sabía en que estaba pensando, desde un principio él solamente me había usado. 《¡Por dios que me estaba pasando!》 Qué podía esperar de alguien que pasaba se acostaba con cualquier mujer que deseara, que pasaba sus parejas, una tr
Noté que si estaba lejos del hotel pues tardamos más de cuarenta minutos en llegar, en la entrada vi a Val que caminaba de un lado a otro como desesperado, presionaba con fuerza su celular en el oído, gritando como loco, dando de manotazos y golpes a los botes d basura. Jeremy apago el auto y salió de él, indicándome que lo mejor era esperar un momento. Literalmente dijo "Se puso muy mal así que es mejor que primero lo calme". Relajado camino hacia Val y le dijo algunas cosas, posiblemente explicándole la situación, Val lo ignoro y en cambio le dio una seña; Jeremy miró a su jefe con miedo y se fue, Val camino a toda prisa hacia el auto y abrió la puerta, me tomó del brazo y sacó del vehículo de un sólo jalón—¡Oye que te pasa me lastimas! —reclame a lo que él ignoro y me acorraló contra el auto y su cuerpo—¿Que me pasa a mi? ¿Que te pasa a ti? ¡Aparentemente tienes mierda en el cerebro! ¿Cómo se te ocurre aventurarte sola en un lugar que no conoces? —.Estaba furioso, más de lo que
Para cuándo regresamos a la habitación ya era de noche, estaba muy cansada tanto en cuerpo como en mente. En cuánto mire la cama me dirigí hacia ella dejando caer mi cuerpo entre las sabanas, Val entro detrás mio diriginedose hacia la pequeña nevera que teníamos, tomó una botella de agua y se acerco a la cama mientras bebida me la extendió pero me negué —¿Estas cansada? —preguntó dando otro trago. Yo me limite a mirarlo, aún me sentía apenada por el malentendido y la verdad se me estaba complicando mucho el hablar con él. Val noto mi pesada mirada sobre el por lo que de inmediato giro a mirarme con la misma intención que yo lo hacia —¿Qué pasa? ¿Quieres algo?— pregunté —Si yo te pido algo ¿Me lo darás? —cuestione nerviosa mientras jugaba con mis dedos y me arrodillaba sobre la cama —Si puedo, claro que lo haré —.Sonrió malvado —Háblame de ti, de tu historia —respondí dudosa. Carraspeo al mismo instante en que enderezaba la espalda como si le hubiera aventado agua helada —M
—Oh por Dios, es el Americano sexy —dijo una chica, de casi metro y medio de estatura, con un bonito cuerpo delgado y bien formado, haciendo perfecto juego con unos grandes ojos oscuros como su cabello que contrastaban con su morena piel. cuando llegamos hacia unas puertas enormes de color azul —Hola bonita —dijo Val saludándola con un beso en la mejilla — Ay no, pero si también trajo al misterioso, es mi día de suerte —dijo la mujer animada saludando también a Jeremy —Ya ves, una vacaciones de vez en cuando no están nada mal —dijo Jeremy animado —¿Y tu preciosa de cual de los dos guapotes eres?—dijo la mujer acercándose a mi —No claro que no, yo no le pertenezco a nadie —dije algo molesta por su comentario —¡Uy no guapo esta es muy ruda aquí si no puedo ayudarte —dijo acercándose a Val quien solo se reía por toda la situación. Jeremy muy amistoso alejo con la chica mientras se decían cosas que los ponía a reírse como locos, Val se acerco a mi aun sonriente —¿Estas lista? —m
—No lo sé, seguí con este viaje y todo sin delatarte por que tenia un plan pero ahora... —susurre —¿Que plan...?— cuestióno —Una debilidad, solo eso necesitaba para regresarte todo hasta con intereses—murmure en espera de su agresiva reacción, no obstante este me respondió con una carcajada áspera y dolorosa —Buscas lo mas fácil. Eso esta aquí —dijo llevando su mano desde mi frente a mis labios. —No, yo... —¡Vamos¡ Deja de cerrarte ante mí... Hannah nunca te haré nada que te lastime, ya no puedo... —. Se acerco un poco, dejándome impresionada por lo que dijo —Espera... Que —. No llegaban a mí las palabras necesarias. —Deseas que nos vayamos, deseas que deje todo esto, que desaparezca de tu vida y que todo lo referente a la casa lo vea Ashley, puedo hacerlo y si eso deseas... —hablaba ansioso —Val, de pronto eres otra persona y no lo entiendo... —¿Qué hay que entender?— preguntó —¿Qué quieres de mi? Prometí guardar aquel secreto, te di lo que me pediste pero ya no tengo nada
Yacía sobre el pecho de Val, nuestra respiración había tardado varios minutos en volver a la normalidad, me era interesante el notar como me tranquilizaba el extraño sonido del las olas y el latir del corazón del hombre que se la pasaba acariciándome de los brazos a los hombros una y otra vez—¿Me perteneces Hannah? —preguntó Val, levante la vista y lo encontré contemplando un manto perfectamente negro con un millar de destellos como hermosos diamantesEstaba exhausta, sin embargo algo de todo esto no me molestaba como tal, extrañamente me agradaba la idea de mantenerme de esa forma por un buen raro, no me importo tener el cuerpo sudado, el culo lleno de arena o el desespero por querer lavarme al sentir nuestros cuerpos muy viscosos. Me gustó estar recostada sobre la arena, sintiendo el leve roció que de vez en ves bañaba mis piernas por el aire atrayendo un poco de agua marina. me agrado ver un firmamento tan hermoso ante mi, me agradó tener alguien mitad ruin mitad dócil conmigo, c
Al día siguiente en la noche ya habíamos dejado México y cada uno se había ido hacia su respectivo departamento, me sentía incrédula, cómo si todo aquéllo hubiera sido un sueño. Me fui teniéndole pavor y regrese ¿Convertida en la novia de mi vecino? Era como recordar cuando iba a la escuela y mis compañeros me incitaban a hacer una travesura, sabiendo perfectamente que era una muy mala idea y tendría consecuencias, lo hacía, esa adrenalina por verme descubierta era adictiva. Bueno, así era mi relación con Val, sin razón ni lógica. La manada de emociones y sensaciones que provocaba ese hombre dentro y fuera de mí no tenían una explicación que calmara mi mente. Conocía muy poco de sus problemas, muy poco de su vida y lo poco que conocía de su mente era algo macabro. Sin embargo me encantaba estar a su lado, no era su aspecto que si admito, era muy atractivo, tampoco la experiencia de semental en la cama. Nada de eso, era la añoranza de sentimientos sin comprensión por verlo casi todo
La emoción abordó todo cuánto pensamiento existía en mi, estaba decidida a cumplir mi meta y ahora tenía ayuda. Sí, era malo aceptar ese tipo de tratos pero era una oportunidad única, además no era nada malo, quería salvar vidas 《¿Qué hay de malo en eso?》Aunque tendría que concentrarme más en mis estudios y eso por lo visto fue lo único que a Val no le pareció del todo, pues en cada visita me encontraba haciendo lo mismo... Estudiando. —¿Estarás con ese libro toda la vida? —preguntó Val cómo siempre recostado en la cama. Mientras yo caminaba hacia mi bolso por unos bolígrafos —La verdadera pregunta es ¿Porque tienes tan mala suerte de venir cuando estudio? —. Sonreí para intentar calmarlo —Porqué me gusta estar aquí, contigo —explicó. Sentí muy caliente mi rostro cuando dijo eso, y mi garganta se sentía seca. Aún no me acostumbraba del todo a ese tipo de tratos. Le di la espalda de inmediato, llevándome el bolso hacía la el armario dónde lo guardaba y así este no estorbara viaj