Para cuándo regresamos a la habitación ya era de noche, estaba muy cansada tanto en cuerpo como en mente. En cuánto mire la cama me dirigí hacia ella dejando caer mi cuerpo entre las sabanas, Val entro detrás mio diriginedose hacia la pequeña nevera que teníamos, tomó una botella de agua y se acerco a la cama mientras bebida me la extendió pero me negué —¿Estas cansada? —preguntó dando otro trago. Yo me limite a mirarlo, aún me sentía apenada por el malentendido y la verdad se me estaba complicando mucho el hablar con él. Val noto mi pesada mirada sobre el por lo que de inmediato giro a mirarme con la misma intención que yo lo hacia —¿Qué pasa? ¿Quieres algo?— pregunté —Si yo te pido algo ¿Me lo darás? —cuestione nerviosa mientras jugaba con mis dedos y me arrodillaba sobre la cama —Si puedo, claro que lo haré —.Sonrió malvado —Háblame de ti, de tu historia —respondí dudosa. Carraspeo al mismo instante en que enderezaba la espalda como si le hubiera aventado agua helada —M
—Oh por Dios, es el Americano sexy —dijo una chica, de casi metro y medio de estatura, con un bonito cuerpo delgado y bien formado, haciendo perfecto juego con unos grandes ojos oscuros como su cabello que contrastaban con su morena piel. cuando llegamos hacia unas puertas enormes de color azul —Hola bonita —dijo Val saludándola con un beso en la mejilla — Ay no, pero si también trajo al misterioso, es mi día de suerte —dijo la mujer animada saludando también a Jeremy —Ya ves, una vacaciones de vez en cuando no están nada mal —dijo Jeremy animado —¿Y tu preciosa de cual de los dos guapotes eres?—dijo la mujer acercándose a mi —No claro que no, yo no le pertenezco a nadie —dije algo molesta por su comentario —¡Uy no guapo esta es muy ruda aquí si no puedo ayudarte —dijo acercándose a Val quien solo se reía por toda la situación. Jeremy muy amistoso alejo con la chica mientras se decían cosas que los ponía a reírse como locos, Val se acerco a mi aun sonriente —¿Estas lista? —m
—No lo sé, seguí con este viaje y todo sin delatarte por que tenia un plan pero ahora... —susurre —¿Que plan...?— cuestióno —Una debilidad, solo eso necesitaba para regresarte todo hasta con intereses—murmure en espera de su agresiva reacción, no obstante este me respondió con una carcajada áspera y dolorosa —Buscas lo mas fácil. Eso esta aquí —dijo llevando su mano desde mi frente a mis labios. —No, yo... —¡Vamos¡ Deja de cerrarte ante mí... Hannah nunca te haré nada que te lastime, ya no puedo... —. Se acerco un poco, dejándome impresionada por lo que dijo —Espera... Que —. No llegaban a mí las palabras necesarias. —Deseas que nos vayamos, deseas que deje todo esto, que desaparezca de tu vida y que todo lo referente a la casa lo vea Ashley, puedo hacerlo y si eso deseas... —hablaba ansioso —Val, de pronto eres otra persona y no lo entiendo... —¿Qué hay que entender?— preguntó —¿Qué quieres de mi? Prometí guardar aquel secreto, te di lo que me pediste pero ya no tengo nada
Yacía sobre el pecho de Val, nuestra respiración había tardado varios minutos en volver a la normalidad, me era interesante el notar como me tranquilizaba el extraño sonido del las olas y el latir del corazón del hombre que se la pasaba acariciándome de los brazos a los hombros una y otra vez—¿Me perteneces Hannah? —preguntó Val, levante la vista y lo encontré contemplando un manto perfectamente negro con un millar de destellos como hermosos diamantesEstaba exhausta, sin embargo algo de todo esto no me molestaba como tal, extrañamente me agradaba la idea de mantenerme de esa forma por un buen raro, no me importo tener el cuerpo sudado, el culo lleno de arena o el desespero por querer lavarme al sentir nuestros cuerpos muy viscosos. Me gustó estar recostada sobre la arena, sintiendo el leve roció que de vez en ves bañaba mis piernas por el aire atrayendo un poco de agua marina. me agrado ver un firmamento tan hermoso ante mi, me agradó tener alguien mitad ruin mitad dócil conmigo, c
Al día siguiente en la noche ya habíamos dejado México y cada uno se había ido hacia su respectivo departamento, me sentía incrédula, cómo si todo aquéllo hubiera sido un sueño. Me fui teniéndole pavor y regrese ¿Convertida en la novia de mi vecino? Era como recordar cuando iba a la escuela y mis compañeros me incitaban a hacer una travesura, sabiendo perfectamente que era una muy mala idea y tendría consecuencias, lo hacía, esa adrenalina por verme descubierta era adictiva. Bueno, así era mi relación con Val, sin razón ni lógica. La manada de emociones y sensaciones que provocaba ese hombre dentro y fuera de mí no tenían una explicación que calmara mi mente. Conocía muy poco de sus problemas, muy poco de su vida y lo poco que conocía de su mente era algo macabro. Sin embargo me encantaba estar a su lado, no era su aspecto que si admito, era muy atractivo, tampoco la experiencia de semental en la cama. Nada de eso, era la añoranza de sentimientos sin comprensión por verlo casi todo
La emoción abordó todo cuánto pensamiento existía en mi, estaba decidida a cumplir mi meta y ahora tenía ayuda. Sí, era malo aceptar ese tipo de tratos pero era una oportunidad única, además no era nada malo, quería salvar vidas 《¿Qué hay de malo en eso?》Aunque tendría que concentrarme más en mis estudios y eso por lo visto fue lo único que a Val no le pareció del todo, pues en cada visita me encontraba haciendo lo mismo... Estudiando. —¿Estarás con ese libro toda la vida? —preguntó Val cómo siempre recostado en la cama. Mientras yo caminaba hacia mi bolso por unos bolígrafos —La verdadera pregunta es ¿Porque tienes tan mala suerte de venir cuando estudio? —. Sonreí para intentar calmarlo —Porqué me gusta estar aquí, contigo —explicó. Sentí muy caliente mi rostro cuando dijo eso, y mi garganta se sentía seca. Aún no me acostumbraba del todo a ese tipo de tratos. Le di la espalda de inmediato, llevándome el bolso hacía la el armario dónde lo guardaba y así este no estorbara viaj
—Ahh... Sí Hannah, te mueves muy rico —balbuceo—No digas nada —dije invadida por la lujuria—Pero sí te encanta que lo haga, te gusta que te diga lo buena que estas y lo bien que te mueves, lo loco que me vuelves y lo adicto que soy a ti — susurró libidinoso —N-No... —mentí—Tu cuerpo te delata preciosa, muévete más rápido —ordenó tomándome de las caderas ayudando a que mis movimientos tuvieran mucha mas fluidez.Grité y me estremecí con fuerza cuando otro choque hirviente abrazo mi sexo víctima de un nuevo orgasmo, logrando que este se quejara enloquecido y se accionara el interruptor de sementar en él.Se levantó y me recostó boca abajo contra el escritorio, elevó mi falda hasta dejar mis glúteos a su vista soltó un golpe el cual no me molesto al contrario me hizo gemir de placer; entró de nuevo en mi, de golpe y profundo. Di otro chillido que lo estimulo para seguir una rápida y salvaje embestida en mi contra, presionando mi cadera hasta encajarse en mi piel, mientras que yo segu
Las cosas cambiaron un poco, la constancia de Val en mis días fue decayendo, hubieran varios días en los que no logramos vernos o por lo menos no tanto tiempo como antes, en lugar de ser días sólo eran unas cuanta horas. La explicación que me daba sólo era que debía solucionar problemas de trabajo a lo cual obviamente no me ponía a indagar. Era la única realidad a la que me negaba, si bien dejé en el pasado lo que él me había hecho, dejándome llevar por la una nueva faceta mas amble y cariñosa, no estaba del todo preparada para aceptar de buenas a primeras que mi ahora novio, fuese un desalmado criminal, mafioso, asesino y anexas. Si había algo que aun podía admitir era que aun tenía pesadillas recordando el cuerpo sin vida de esa mujer, recordando el arrebato de enojó que lo hizo dañarme y su despreocupación por herir a la gente. No obstante, Val se convirtió en una desafortunada adicción, por cada momento que mi razón me proyectaba los momentos bárbaros que presencie por su cu