Capítulo 49: Remordimiento

Miguel estaba apoyado contra la pared del pasillo cuando escuchó la conversación entre su madre y Alanna. No podía creer lo que estaba oyendo. Su hermana, la niña dulce y sumisa que solía seguirlos con devoción, ahora se expresaba con una frialdad que lo indignaba.

Cuando Alanna salió de la habitación con esa actitud indiferente, Miguel no pudo contenerse más.

—¿Así que ahora te crees mejor que nosotros? —soltó con dureza, cruzándose de brazos frente a ella.

Alanna lo miró sin inmutarse.

—No es cuestión de creerme mejor. Es cuestión de saber cuánto valgo.

Miguel sintió cómo su rabia aumentaba.

—¡Nos estás dando la espalda en el peor momento! La familia te dio todo, y cuando más te necesitamos, decides actuar como una extraña.

Alanna soltó una risa amarga.

—¿La familia me dio todo? No me hagas reír, Miguel. Ustedes me usaron, me despreciaron y luego me arrojaron como si fuera basura. No les debo nada.

La mirada de Miguel se endureció.

—Eres una ingrata, Alanna. A pesar de todo, mamá si
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP