Capítulo 112: Ser fuerte

Entro a la casa y lloro con enojo acostándome en la cama, sin prestarle atención a mi ropa. Ahora lo que menos me interesa es no mojar la cama que hice con sabanas en el suelo del último piso de la casa. 

Por lo que, lloro sintiéndome patética. Pero, cuando Danell aparece, le sonrío. Le sonrío de tal forma que duele fingir estar bien. le sonrío porque frente a mí hay un hombre que amo y quiero verlo, crecer, pero, eso me está costando la construcción que había hecho en mí.

— Dove…

— Vete, Danell. Hazlo en silencio, como debe ser.

— ¿Por qué estas tan molesta?

— Porque siempre cedo, Danell. Cuando me dijiste que nos casáramos, lo hice, cuando me pediste huir del ataque lo hice, las veces que has pedido algo… no, las veces que has ordenado algo, lo he hecho, pero, no obtengo lo mismo de ti y eso agota.

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP