~~~Noah.“Matemos a este imbécil”, me dice mi lobo cargado en ira, al tiempo que tomo al chico por el cuello y lo estoy estrangulando con todas mis fuerzas, pero, justo en ese momento, llega un grupo de soldados con otro chico al frente.― ¡Vaya, Evan, sí que te gusta meterte en problemas! ―le dice con sorna, pero no se está riendo, en cambio, me mira fijamente―también noto que ya no eres el primogénito poderoso, que solía ganarme en batalla―le señala, pero Adele no pierde el tiempo con sus estupideces, así que lo toma por el cuello con su arma, al tiempo que Mariah abate a dos de sus guardas de un solo tajo.― ¡No seas un idiota, Ender! ―le espeta su hermano, quien está temblando en mis manos―él es Noah, nuestro enemigo y esa es su Luna, Adele―le señala, mientras boquea del puro miedo―y nuestra hermana está con ellos―le advierte y ella le sonríe maliciosamente.―Y todos ustedes deberían calmarse o pueden perder algo más que valioso―indica esta vez Solimán, quien está entre los hombr
~~~Adele.Las palabras de Noah son hirientes, de una manera tal, que siento como si mi corazón se partiera en dos y solo hace que ahonde en lo más profundo de mi propia culpa, porque… ¿debí haber sido más egoísta?Sí, es cierto, arriesgué mi vida y la de mi bebé que se gesta en mi vientre, algo de lo cual estaba muy consciente, pero ¿qué debía hacer?¿Dejar atrás a una persona que se ha mostrado leal e incondicional, a sabiendas de que su propia vida está en peligro?Y entonces, miro a Noah y su dolor entremezclado con su rabia y me pregunto si todo lo que he arriesgado, incluyendo mi propia felicidad, ha valido la pena.―Lo siento―alcanzo a decirle, pero él sigue molesto, más allá de lo que lo he visto en todo el tiempo que llevo de conocerlo.―No, Adele, tú no lo sientes, porque has hecho todo esto a consciencia―me espeta cabreado, pero ahora, deja de mirarme y empieza a observar bien la puerta―y no discutiré esto ahora―me dice, mientras inspecciona los goznes, unos a los cuales em
~~~Adele.Mariah me lleva arrastrada por el brazo y yo me siento como una condenada a muerte.Porque, si no me mata la angustia de saberme encerrada en la que se supone es mi propia manada, lo hará el saber que mi pareja destinada está en peligro.― ¡Mi querida Adele, qué bueno que has regresado! ―me dice la matriarca, quien me toma entre sus brazos― ¡y tú, Mariah, ya estás a salvo, gracias a la diosa! ―le señala a esta, soltándome de su abrazo, para tomarla a ella esta vez, lo cual me sorprende―no sabría qué hubiera hecho, si las dos parejas de mis hijos les hubiera pasado algo malo―nos dice con pesar.―No se preocupe, suegrita, que ambas nos encontramos bien―se burla Mariah, lo cual hace que a la matriarca le cambie la expresión de la cara.Porque ese nombre, suegrita, no le ha caído muy bien que digamos.Pero eso no la distrae por mucho tiempo, ya que se pone a buscar por todas partes.― ¿Y dónde está Noah? ―indica angustiada, así que es mi padre quien le cuenta todo lo que ha pas
~~~Punto de vista neutro.Boris está iracundo.Y quiere despedazar a Hagler, si pudiera, de no ser porque depende completamente de él en este momento.Ya no tiene la mayoría de su ejército, y su fortaleza en la montaña depende del alfa híbrido, quien tiene el control de la guardia interna, la que lo protege de cualquier enemigo.“¡Ja, y eso no sirve de nada!”, le dice su lobo, ya que ninguno de sus guardas híbridos puede tocar a ninguno de los soldados Moonlight, con quienes está en guerra.Y eso lo enfurece más, ahora que sabe que su enemigo está tan cerca.Es que, en cuanto sus hijos mayores le avisaron de la presencia de Noah y Adele en sus mazmorras, él se sintió muy feliz, puesto a que ya tenía la ventaja en sus manos.Sin embargo, no fue hasta que le informaron de que Mariah estaba en las mismas celdas, que se movilizó hasta el asqueroso lugar para comprobar su traición de su propia boca.Y cuál fue su sorpresa, cuando se dio cuenta de que la celda estaba vacía, que Noah se enc
~~~Adele.Estoy confundida.Sí, lo sé, Noah tiene todas las razones del mundo para quererme a salvo, luego de que me secuestraran y llevaran hasta la misma boca del peligro, una en la que hemos escapado por los pelos y, para colmo, tuvimos que arriesgarnos mucho más, al tener que ir a rescatar a Mariah, quien traicionó a su padre para poner la balanza de nuestro lado.Y está lo más importante por aquí, que estoy embarazada y que a lo mejor no debí haber estado en esa cruzada para salvarla.Pero, a pesar de todo, nada le da derecho a Noah de encerrarme, tal y como se le ocurrió hacer tiempo atrás, antes de que creyera que encarcelarme era la única opción para mantenerme a salvo.No puedo permitir que esto pase, a pesar de que entiendo las razones de mi pareja destinada.Mi pareja y su solución tan radicalVoy a tener que escapar de una manera o de otra.Y voy a enfrentarlo cara a cara, porque es un miserable cobarde, que no se atreve a mirarme directamente a los ojos, cuando toma una
~~~Noah.Pero, en lugar de estallar en ira por lo que me acaba de decir, empiezo a reírme a carcajada suelta, después de todo, soy yo quien tengo el control de la situación.―Pues, como no te has dado cuenta, te lo diré, porque no necesito una razón para recluirte en tu habitación, mi querida Mariah―le digo con sorna y ella parece que no le agrada para nada mi respuesta, pero no pierde el tiempo para ponerme su cara más risueña.―Eso es cierto, mi alfa, pero yo no soy como Adele―me indica, levantando una ceja en mi dirección―porque estoy muy segura de que a Noel no le caerá esto muy en gracia―me hace notar, sin embargo, no se ha dado cuenta de algo.―No trates de usar esa carta en mi contra― me mofo de ella―porque si sé de alguien leal a mí, ese es mi hermano y puede que tú seas su pareja destinada, pero él era mi hermano antes de conocerte y lo seguirá siendo, a pesar de todo―le aseguro y ella me mira fijamente.―Tiene razón en eso, mi alfa, sin embargo, usted también me conoce―me r
~~~Adele.―Vayamos por esta ruta―me dice Mariah, en cuanto llegamos al bosque, en una sección en donde los hierbajos son tan altos como nosotras, algo que nos puede ayudar en nuestra huida.Así que la sigo a paso apresurado, porque de seguro pronto alguien dará la alarma, al darse cuenta de que no estoy en mi habitación.Una que se volvió mi cárcel, gracias a mi pareja destinada y alfa.No, ya no será mi alfa, una vez que vaya a Darkmoon y tome mi puesto.Algo que nos hará iguales de una buena vez y me ganará el respeto que siempre he merecido.Es cuando los escucho.― ¡Agáchate! ―le pido a Mariah y ella me mira extrañada, así que le coloco la mano en la coronilla para que se detenga y se esconda.Entonces, me doy cuenta de lo que se trata.“Es una patrulla”, le digo a Mariah mentalmente y ambas los observamos.“Tal parece que están haciendo su ronda de rutina y que nadie se ha percatado de nuestra ausencia en la casa de la manada”, me responde ella con un bufido.“Y esperemos que si
~~~Adele.Los soldados Darkmoon que están en frente de nosotras se notan más que alertas, y cómo no estarlo, considerando que su bando ha perdido y que el ser capturados significaría para ellos la muerte.“Todavía no se han dado cuenta de nuestra presencia”, me dice Mariah y tiene razón, porque pareciera que estuvieran más preocupados por vigilar el camino y supongo que pretenden asaltar a cualquiera que lo cruce.“Somos sangre alfa y es más difícil que nos noten”, le recuerdo, “pero no debemos movernos hasta que se vayan, si es que no queremos un conflicto por aquí”, le pido y ella pone los ojos en blanco.“¿Qué, Adele, le tienes miedo a que nos hagan daño?”, me dice con sorna y yo por instinto me toco el vientre, solamente de pensar que ellos me hagan algún daño y a mi bebé, de paso.“No, por el contrario, porque puede que seamos nosotras las que los acabemos, después de todo, somos superiores a ellos”, le respondo con pesar, “y tampoco es que nos favorezca en algo, si saben que he