Amelia. Sabía que ese lugar era importante para él porque me lo había dicho la noche anterior, sin embargo sin querer había resultado importante también para mí porque allí fue donde lo volví a ver luego de aquel día. Aunque no lo había querido admitir, mi corazón había saltado de la felicidad de verlo nuevamente a pesar de recordar sus palabras. El que estuviéramos volviendo juntos a ese lugar tomados de la mano lo volvía aún más significativo. — ¿Qué es todo esto? — pregunto sorprendida de ver que había colocado algunas mantas, almohadones e incluso copas con algunas botellas de vino. — Decidí que te traería a una primera cita aquí esta noche. No habíamos tenido una hasta ahora y no quería que fuera la noche romántica con mis amigos la primera cita que tuviéramos así que pensé en esto. Estaba realmente conmovida porque se había esmerado en preparar algo realmente hermoso para los dos. Eso solo quería decir que de verdad lo estaba intentando, quería redimirse de todo lo que había
Amelia. La cita fue un éxito, había disfrutado tanto pasar ese tiempo a su lado, conocer más de su historia y conocerlo a él. Sabía que Julia había tenido mucho que ver con esto porque me había insistido en que la noche romántica dejara todo en manos de Marina y me enfocara solo en pasar un buen momento con todos ellos y Aaron. Aunque básicamente me encuentro trabajando, gracias a la ayuda de todos los amigos de Aaron y la gran ayuda de Marina, hemos podido encontrar momentos para pasarlo juntos. Ha pasado estos días casi volando y no me he dado cuenta, con todos los preparativos y las citas con este hombre maravilloso ha logrado que las horas del día casi ni se sintieran y eso me sorprendía tanto. Generalmente solía estresarme bastante cuando estaba al frente de un evento con esta magnitud y este en particular me tenía bastante nerviosa, pero estos días han sido de los más hermosos que nunca he vivido. ¿Realmente una persona sería capaz de cambiarme tanto? No lo quería creer pero
Amelia. Los festejos habían durado toda la noche y parte de la madrugada, en el momento en que el sol comenzó a asomarse fue cuando los invitados en tandas pequeñas fueron cada uno a sus habitaciones. A pesar de todo mi trabajo aún no acaba ya que ahora era el momento de supervisar que todo estuviera nuevamente en orden como si nada hubiera ocurrido. Estaba más que claro que no dormiría hasta bien pasada la mañana.— Todos ya se fueron a dormir y son entrada las cinco de la mañana, ¿Tú cuándo piensas dormir?— Señor Sterling ¿No le han dicho? Cuando las fiestas se acaban las cosas no vuelven a su lugar por arte de magia. — digo mientras lo tomo de las solapas de su saco, él se acerca más a mí y aprovecho para darle un pequeño beso — Mi sexy escocés, debo quedarme hasta que todo esté en su lugar luego podré descansar. Vete a dormir.— No podría dormir ni aunque lo quisiera si no estás a mi lado. Me quedaré y te esperaré.Lo miré con una sonrisa porque no podía decirle que no, pero el
Aaron. Estábamos profundamente dormidos cuando escuché mi celular sonar, cuando despierto me encuentro que ya era pasado el mediodía y que tenía una llamada perdida. Cuando miro el número me encuentro con que se trataba otra vez de un número desconocido. Ya me encontraba cansado de que siempre estén insistiendo, pero tampoco deseaba cambiar de número cuando ya llevo años con este mismo.Decidí llamar a mi asistente para poder consultar con el área de ciberseguridad de las empresas si podían encontrar una solución para esto, aunque fuera bloquear las llamadas entrantes de números desconocidos.— Buenas tardes señor Sterling ¿En qué puedo ayudarle?— ¿Cómo están las cosas por ahí, Sophie?— Muy bien, todo sobre ruedas. ¿Ha sucedido algo señor? Porq
Aaron. Estaba muy consciente de lo curiosa que se encontraba pero agradezco que se estuviera conteniendo dándome el tiempo para poder pensar cómo contarle mi historia. Una historia muy difícil para mí, una historia que me ha costado tanto superar y una traición que logró romper cada pedazo de mi interior.Ambos nos encontrábamos sentados en el sillón, uno frente al otro, mis manos sudaban de los nervios que sentía mientras podía ver como ella tan solo movía el pie en una clara señal de impaciencia. Tomé aire profundamente y la miré a los ojos.— Amelia te he contado muchas cosas de mi vida hasta hoy, pero hay una parte en especial que no he podido porque significó mucho dolor y hablar de ello me resulta muy difícil.— Entonces ¿Por qué quieres hablar de esto ahora? Créeme no es necesari
Amelia. Ambos estábamos muertos de los nervios, Aaron más que yo porque vería a su ex luego de cinco años. Le había costado mucho superarla y cuando finalmente lo había hecho ella nuevamente aparecía en su vida revolviendo el pasado. ¿Me encontraba un poco preocupada? La verdad es que sí, no iba a negarlo. Esa mujer fue muy importante para él, incluso en algún momento él había querido casarse con ella, no podía evitar preguntarme si al verla él no podría volver a sentir cosas por esa mujer a pesar de todo el mal que le había hecho en el pasado.— El timbre. — fue lo único que pudo decir cuando el muy ansiado sonido finalmente se escuchó por toda la casa.— Yo abriré, tú respira. — digo viendo que a pesar de haber escuchado el sonido no hizo ningún movimiento ha
Aaron. ¿Qué diablos significaba todo esto?No podía creer que en un momento mi vida diera un giro tan inesperado, no sólo había descubierto después de 5 años que tenía un hijo, también tengo que aceptar que mi novia me haya abandonado el mismo día. ¿Alguna otra cosa más?Clementine me había asegurado que en una hora vendría nuevamente con todas sus cosas porque se estaba hospedando en un hotel ya que quería que el niño estuviera el mayor tiempo posible conmigo, en ese lapso de tiempo y sin comprender muy bien las razones, Amelia tomó todas sus cosas y simplemente terminó nuestra relación y se marchó.Había intentado todo para detenerla pero ella simplemente me dejó, ni siquiera pudo mirarme a los ojos en el momento en que le exigía una explicación. Pensé qu
Aaron. — ¡Esto no puede ser! Esto es… increíble. — Daniela estaba anonadada y muy sorprendida por la noticia.— ¿Tú quién eres? — pregunta Archie un poco confundido, Daniela lo estaba volviendo un poco loco porque lo estaba estudiando como si fuera un ratoncito de laboratorio.— ¿Quién soy? — ella no sabía cómo responder a su pregunta por lo que se giró mirándome para que lo haga por ella.— Ella es la tía Daniela y la tía Ximena, ellos son el tío Jesse y Mason. Faltan mis hermanos pero no se encuentran cerca han salido de viaje esta misma tarde al igual que otros amigos pero ya los conocerás.Archie estaba sentado en el sillón mirando a todos quienes también lo observaban como si tuviera tres cabezas, y es que para todos ha sido una sorpresa cuando llam&eac