Aaron.
Estaba muy consciente de lo curiosa que se encontraba pero agradezco que se estuviera conteniendo dándome el tiempo para poder pensar cómo contarle mi historia. Una historia muy difícil para mí, una historia que me ha costado tanto superar y una traición que logró romper cada pedazo de mi interior.
Ambos nos encontrábamos sentados en el sillón, uno frente al otro, mis manos sudaban de los nervios que sentía mientras podía ver como ella tan solo movía el pie en una clara señal de impaciencia. Tomé aire profundamente y la miré a los ojos.
— Amelia te he contado muchas cosas de mi vida hasta hoy, pero hay una parte en especial que no he podido porque significó mucho dolor y hablar de ello me resulta muy difícil.
— Entonces ¿Por qué quieres hablar de esto ahora? Créeme no es necesari
Amelia. Ambos estábamos muertos de los nervios, Aaron más que yo porque vería a su ex luego de cinco años. Le había costado mucho superarla y cuando finalmente lo había hecho ella nuevamente aparecía en su vida revolviendo el pasado. ¿Me encontraba un poco preocupada? La verdad es que sí, no iba a negarlo. Esa mujer fue muy importante para él, incluso en algún momento él había querido casarse con ella, no podía evitar preguntarme si al verla él no podría volver a sentir cosas por esa mujer a pesar de todo el mal que le había hecho en el pasado.— El timbre. — fue lo único que pudo decir cuando el muy ansiado sonido finalmente se escuchó por toda la casa.— Yo abriré, tú respira. — digo viendo que a pesar de haber escuchado el sonido no hizo ningún movimiento ha
Aaron. ¿Qué diablos significaba todo esto?No podía creer que en un momento mi vida diera un giro tan inesperado, no sólo había descubierto después de 5 años que tenía un hijo, también tengo que aceptar que mi novia me haya abandonado el mismo día. ¿Alguna otra cosa más?Clementine me había asegurado que en una hora vendría nuevamente con todas sus cosas porque se estaba hospedando en un hotel ya que quería que el niño estuviera el mayor tiempo posible conmigo, en ese lapso de tiempo y sin comprender muy bien las razones, Amelia tomó todas sus cosas y simplemente terminó nuestra relación y se marchó.Había intentado todo para detenerla pero ella simplemente me dejó, ni siquiera pudo mirarme a los ojos en el momento en que le exigía una explicación. Pensé qu
Aaron. — ¡Esto no puede ser! Esto es… increíble. — Daniela estaba anonadada y muy sorprendida por la noticia.— ¿Tú quién eres? — pregunta Archie un poco confundido, Daniela lo estaba volviendo un poco loco porque lo estaba estudiando como si fuera un ratoncito de laboratorio.— ¿Quién soy? — ella no sabía cómo responder a su pregunta por lo que se giró mirándome para que lo haga por ella.— Ella es la tía Daniela y la tía Ximena, ellos son el tío Jesse y Mason. Faltan mis hermanos pero no se encuentran cerca han salido de viaje esta misma tarde al igual que otros amigos pero ya los conocerás.Archie estaba sentado en el sillón mirando a todos quienes también lo observaban como si tuviera tres cabezas, y es que para todos ha sido una sorpresa cuando llam&eac
Amelia. Me encontraba destruida con el corazón roto en miles de fragmentos pequeños incapaces de volver a pegar. Jamás había sentido un desasosiego parecido a este y era porque jamás había encontrado el amor, jamás antes me había enamorado de esta forma y cuando por fin lo había hecho lo tuve que dejar ir porque simplemente no era para mí.Tomar la decisión de agarrar todas mis cosas y volver a Argentina, fue la cosa más dolorosa que jamás antes había hecho. Incluso no le había podido dar una verdadera razón por la cual me iba y era porque estaba segura que no me dejaría marchar si le decía mis verdaderas razones.No iba permitir que un niño creciera sin el cariño de sus dos padres si había la posibilidad, jamás podría interferir en algo como eso, por eso había tomado la
Aaron. La mañana había comenzado desde muy temprano con un café en la mano y el bolso del pequeño Archie en el otro. No estoy muy seguro de poder acostumbrarme pronto a todo esto de ser padre, pero debía hacerlo el pequeño me observaba como si fuera un superhéroe para él y quizás así lo fuera ya que todos los que él conocía le habían dado la espalda.Quería ser ese superhéroe que él necesitaba, quería ser aquel que remediara todo el mal que lo rodeaba. Estaba tan preocupado y ansioso de conocer cuál es su verdadera condición que ese día estaba eufórico. De camino al hospital no pude dejar de repetir una y otra vez que todo estaría bien, pero lo cierto es que no sabía exactamente a quién se lo decía si a él o si a mi mismo.Cuando llegamos un médico p
Amelia. Volver a casa ha sido realmente difícil, pero tener a Marina a mi lado apoyándome ha sido realmente gratificante porque estaba segura que sola no iba poder lograrlo, me hubiera derrumbado.Lo extrañaba tanto, me hacía tanta falta que no estaba muy segura cómo lograría olvidarlo, es que ¿Cómo superar a una persona a la que amas como si fuera tu vida entera? No, no había forma de hacerlo.Marina había hecho mucho para que pudiera distraerme con cosas que veíamos durante el viaje, me ha llevado a conocer muchos lugares increíbles mientras esperábamos al horario de nuestro vuelo de vuelta casa y gracias a ella pude lograr que el retorno no fuera una verdadera tortura.Al llegar a mi departamento y encontrarme sola fue cuando me permití llorar, fue cuando permití sacar todo ese dolor que había contenido en mi interi
Amelia.Luego de 10 semanas. — ¡Ya está todo listo! Muchas gracias a todos, han realizado un excelente trabajo y estoy muy orgullosa de esto. Este brindis va dedicado a todos ustedes. ¡Salud!Habíamos concretado finalmente un gran evento, una entrega de premios en nuestra querida ciudad, fue una oportunidad única la cual habíamos luchado tanto poder conseguirla y sin entender muy bien cómo pero ganamos esta importante batalla teniendo como adversarios a muchas otras empresas que incluso tienen más años de experiencias y que han realizado cosas como estas anteriormente, sin embargo nos han elegido a nosotros porque les ha gustado nuestras propuestas más novedosas y han confiado en un equipo joven y con ganas de salir adelante.— Amiga estoy tan feliz por lo que hemos logrado, no me imaginé que pudiéramos lograrlo y sin emba
Aaron. Esa mañana había sido devastadora, la sesión de quimioterapia había sido brutal y Archie estaba con muy pocas fuerzas pero con una gran sonrisa en su rostro. Mi hijo era mucho más fuerte que yo y no podía comprender aquello, era solo un niño pequeño de 5 años. Sin embargo yo en cada oportunidad que me encontraba solo sin que él me viera lloraba desconsoladamente porque me sentía tan impotente por no poder hacer más por él.No me encontraba solo, teníamos un gran equipo de contención que era nuestra familia y amigos, pero sentía que esta batalla la estamos librando solos los dos. Había intentado comunicarme con Clementine no para pedirle que se hiciera cargo de mi hijo sino para que tan solo viniera a verlo, una visita suya sabía que podría alegrar aún más el día a mi pequeño, p