San Luis, Argentina. — ¡Te ves tan hermosa! — exclamaba mi madre con lágrimas en sus ojos. — Había esperado tanto poderte ver así, estoy tan feliz.Ver a mi madre tan emocionada como se encontraba y además verme rodeada de todas las mujeres importantes en mi vida, me sentía dichosa y tan afortunada de la vida.— Amiga te ves preciosa, solo con pensar que tú estás ahí ahora vestida de blanco, me hace emocionarme aún más y estar tan orgullosa de ti.— Gracias Xime, ¿Recuerdas? Eras tú la que se encontraba parada aquí mientras nosotras brindábamos por tu felicidad.— Y ahora es tu turno. — me dice Julia levantando no solo la copa de champán sino la botella mientras todas la imitaban y brindaban por mí.Habían transcurrido desde aquella noche en que Jesse me pidió ser su esposa, un poco más de 9 meses. Esa noche había sido esplendida para mí y llena de sorpresas que no las esperaba. Lo había organizado todo muy bien junto con los chicos que hasta incluso habían logrado mantenerlo en secr
Los preparativos habían sido extenuantes hasta el momento, pero las chicas habían sido de mucha ayuda y Amelia es la persona que ha salvado por completo mi vida. Gracias a eso pudimos hacer de esta semana de preparativos algo divertido para pasarlo con amigos y familia. Ciertamente todo lo que estaba viviendo era algo que jamás me había detenido a pensar con claridad porque jamás me imaginé casándome, siempre había imaginado que viviría para el trabajo y que sería muy difícil encontrar a alguien que comprendiera eso y siguiera mis pasos, tal y como sucedió con Ximena y Mason. Ambos hacen un gran equipo, él la apoya en cada aventura y respeta sus momentos como también acepta cuando ella debe viajar por muchos días sin él. ¿Quién lo hubiera imaginado? Yo con el hermano de Mason Alexander. Después del gran fiasco que había sido la primera vez que lo intentamos había creído que no sería apta para el amor porque no podía volver a entregarme por completo a alguien, finalmente nos habíamos
La boda de Daniela y Jesse había resultado un éxito, fue una de las bodas que más me emocionó organizar. Conocerlos había sido una verdadera alegría pero sin esperarlo, el haber organizado el evento de inauguración de la cadena de hoteles que ellos tenían, había logrado que se convirtieran en amigos. Todo el grupo de amigos que ellos tenían eran verdaderamente grandiosos, todos se apoyaban y de alguna forma formaban parte del proyecto y era maravilloso ver lo unidos que eran. Me divertí tanto el tiempo que pasé con ellos, luego en la boda lograron que me sintiera parte de su grupo que jamás había disfrutado tanto un trabajo como ese. Aunque debo admitir algo, en ese grupo de amigos conocí a un hombre que logró cautivarme por completo. Sabía que era un gran empresario, con solo verlo te podías dar cuenta de ello porque ese porte que tenía era bastante intimidante, pero luego lo investigué y en definitiva era un hombre muy poderoso y con muchos recursos. Hombres como él conocen a model
Amelia. Estoy tan exhausta que no he parado de trabajar hace semanas, esta boda ha sido el reto más grande de mi carrera. Mis clientes son personas muy importantes que podrían impulsar mi negocio a grandes escalas, pero para lograrlo debo concretar un trabajo maravilloso y de ensueño. Este evento más allá de ser la boda de unas personas muy importantes también se llevará a cabo fuera del país donde vivo y no solo país sino también continente, por lo que el trabajo fue el triple con mucho más esfuerzo y conseguir proveedores que sean de confianza y que no me falten llegado el momento. Ahora nos encontramos a seis días del maravilloso momento y puedo decir que me encuentro satisfecha con todo lo que he podido lograr. Los novios están felices por ende yo también lo estoy, por supuesto que aún falta ver pequeños detalles pero todo lo significante ya se ha hecho por lo que un pequeño respiro no me vendría nada mal. El lugar donde la boda se realizará es un pequeño pueblito sacado de
Amelia.Hace algunos meses atrás… ¡Esto parecía completamente irreal! Me encontraba pasando el rato con Aaron Sterling, el multimillonario y magnate hotelero escocés más conocido por todos en el mundo de los negocios, apenas respiro de la emoción. No pude evitar enviar un mensaje a Daniela para contarle que Aaron me había invitado a dar un paseo por los alrededores porque ella se había dado cuenta del interés que yo tenía por él y viceversa ya que al parecer él también tenía curiosidad. Daniela me ha dicho haberlo visto observarme en algunas oportunidades. — ¿Tú de dónde eres? Sé que estamos lejos de la capital del país y tenía entendido que Daniela había encontrado tu negocio allí cuando veía quien podía ayudarnos con el evento de inauguración. Pero también sé que muchas personas van allí porque hay más oportunidades pero algunos nacen en otras provincias. — Bueno eso que dices es verdad, muchos crecen en provincias como esta que son una verdadera maravilla pero deciden marcharse
Aaron. Sé que arruiné las cosas con ella, sé que había cometido quizás el peor de todos los errores y era muy consciente de eso, pero también estaba consciente que no sabía cómo arreglar las cosas. Había hablado con Daniela y Julia, ambas se enfurecieron tanto conmigo que tuve que pedir un tiempo fuera porque de verdad temía que me lastimaran entre las dos. Había roto el corazón de Amelia en pequeños pedazos con mis palabras tan hirientes y estúpidas, pero en ese momento no me había percatado de cuán importante ya era para mí. Esa mujer de alguna forma logró meterse tan dentro de mi piel que parece tonto decir que la necesito incluso para vivir, estos meses sin verla había sido una verdadera tortura todo lo que sabía de ella lo hacía gracias a las redes sociales y las chicas que, a pesar de todo, me tenían al día. Pero hoy el poder verla nuevamente fue… mágico. En el momento en que vi un pequeño bulto en el suelo, en mi lugar favorito, me asusté porque pensé cosas verdaderamente e
Aaron. La noche anterior no había podido cerrar el ojo ya que en mis pensamientos solo estaba ella. Amelia invadía mi mente a cada segundo y no podía evitar sentir que me faltaba pedazos de mi alma. Además no podía evitar pensar en lo que me había dicho Daniela, particularmente en algo que mencionó que debía de hacer y hasta ahora no lo había hecho y no sé muy bien porqué. Disculparme. Hasta ahora no había tenido porqué hacerlo, mucho menos con una mujer. Había estado esperando una disculpa de parte de mi mejor amigo y quien había sido la mujer de mi vida por el enorme engaño y el profundo dolor que me habían causado pero eso nunca pasó. Fue entonces que prometí jamás disculparme porque de igual forma las personas conmigo no habían sido tan amables. Sin embargo ahora me doy cuenta que una disculpa es lo que tengo que hacer, debo buscar la forma de demostrarle a Amelia que lamento tanto las palabras tan hirientes que le había dicho y lo patán que me comporté aquella vez. Que dif
Amelia. Anoche prácticamente no había dormido nada, en lo único que pude pensar fue en los ojos de Aaron y en lo realmente sexy que se veía. Había creído ingenuamente que tendría un poco más de tiempo hasta verlo pero claramente la vida tenía sus planes. Verlo nuevamente fue… intenso. Había creído que verlo luego de la última vez me provocaría una rabia por todas las cosas tan feas que me había dicho, pero al contrario, verlo solo me hizo sentir débil. En mi interior seguía sintiendo ese poder atrayente y la rabia simplemente se disipó. Claramente eso no significaba que todo lo que dijo no haya afectado algo en mí y que eran cosas del pasado, por supuesto que esperaba una disculpa en algún momento pero nunca llegó. Aún estoy desilusionada por cómo me trató, no arrepentida por lo que ocurrió pero si dolida por cómo acabó. Sin embargo en este momento no importan mis emociones, mis sentimientos y todas las cosas cursi que tengo dentro de mi corazón, lo importante aquí es el trabajo y