Despierto con el cuerpo adolorido, mis extremidades duelen, dormi en una silla de hospital esperando noticias de la chica desconocida, no llevaba identificación de ningun tipo, solo un teléfono que por el golpe quedo deshecho, mande a Kirk a conseguir otro para poder ingresar su tarjeta SIM y contactar a alguien.

Empiezo a recordar lo que paso anoche, esa chica iba corriendo viendo hacia atrás, algo asustada, quizá la habian asaltado eso explicaria porqué no llevaba consigo alguna cartera o bolso ni nada de dinero. No se percató del auto, se detuvo al ver las luces pero el maldito no reparo en detenerse, prefirió atropellarla para escapar, pero de mi parte corre que pagué la traición hacia mi y lo que le hizo a ella. 

Me levanto molesto de la silla, que pasa? El doctor no ha salido, solo me dijo que debian someterla a una operación. 

Kirk viene a mi.

-Señor aquí esta el teléfono y su café- le agradezco, necesitaba ese café, aunque en este momento no lo disfruto como deberia.

-Gracias Kirk, quiero que te ocupes de todo lo que tenga que ver con las investigaciones-el asiente, sé que esta preocupado como yo, la escena fue bastante violenta - yo estaré aqui, solo envia a un chofer, avise a mi nana la situación, necesito un cambio de ropa tambien.

-Señor deberia ir a casa a descansar- le observo pensativo, deberia hacerlo, pero no, no. Incluso no siento dolor en mis propias heridas.

-No Kirk, no puedo irme de aqui, hasta que no sepa que al menos esa chica esta fuera de peligro, o que pueda comunicarme con algún familiar, no la dejaré sola- digo negando algo desesperado.

-Ahora has lo que te pido- Kirk se retira y me dispongo a colocar la SIM al nuevo telefono, espero poder comunicarme con algun familiar pronto.

Esto si es extraño en los contactos de su SIM solo hay un nombre, ALEX, marco el número y me dirige directo a su buzón -intentaré más tarde- pienso. Me siento y recuesto la cabeza en la pared, estoy muy cansado y preocupado.

"En donde estoy? es como una pradera y a lo lejos una cabaña, me acerco, un olor a café recién hecho llama mi atención, entro y me encuentro a una chica, esta de espaldas con vestido blanco, su melena es oscura y larga, quiero hablar pero mi vos no sale, no logro articular una palabra, que pasa? Ella voltea y me ofrece una taza de café, en una de esas tazas de porcelana con relieves de animales, bastante ridícula, tomo la taza y nuestros dedos rozan, y una sensación bastante placentera recorre mi cuerpo, levanto mi vista, necesito ver su cara pero ya no esta... aparezco en la pradera y la veo a lo lejos, un hombre esta a su lado y toma su mano, me detengo al ver la escena, el jala su brazo y ella se niega empujandolo, me animo a acercarme pero el hombre vuelve a tirar de su brazo y ella empieza a gritar, corro pero no logro acercarme. Escucho mi nombre-Sebastián, Sebastián- y una sacudida me despierta, es el doctor Miller.

-Disculpa estabas dormido- me dice, niego haciendo muecas con mis manos.

-Esta bien, tiene noticias? Como esta la chica? - le pregunto algo alterado.

El suspira y ve hacia otro lugar.

-Tuvimos que inducirle el coma, tiene varios organos dañados, un trauma en la cabeza, leve, y varias fracturas en el cuerpo, incluso tiene algunas fracturas que no habian terminado de sanar- escucho con atención, asustado, y a punto de golpear algo- pusimos sondas para alimentarla y se encuentra en cuidado intensivos, debemos esperar-termina diciendo.

-Puede verla? Aunque sea un momento.

-Por supuesto en un momento te llamara una de las enfermeras, aunque sera atreves de un vidrio, no puedes ingresar al cuarto- me dice poniendo su mano en mi hombro- necesitamos sus datos, para abrir un historial-

-Estoy en eso, todavía no logro comunicarme con algun familiar- termino diciendo, el asiente. Y me deja en la sala, pensativo en todo lo que me ha dicho, pobre chica, pero tiene que sobrevivir, estoy seguro que asi sera.

Vuelvo a hacer el intento de comunicarme, esta vez el telefono repica dos veces.

-Donde diablos estás?- responde un hombre- espero que tengas una buena explicación sino...- aclaro mi garganta.

-Señor soy Sebastián Friedman-respondo.

-Quien diablos eres y porque tienes el celular de mi novia?- hace énfasis en la palabra- si me esta engañando contigo te juro que....- me dice gritando, suficiente este tipo me harto.

-Escucheme bien, no soy el amante de nadie, su novia sufrió un accidente y se encuentra muy mal- le digo, él no responde nada- esta en el hospital de St, Louis, le daré detalles de todo en cuanto venga- y cuelgo furioso, se nota que es un imbécil.

Estoy sumido en mis pensamientos, cuando una enfermera me llama, me dirige al cuarto, ella entra y me deja afuera, corre la cortina y logro verla. Esta conectada a varios cables, tiene un tubo en su boca, su rostro esta totalmente morado y su brazo derecho enyesado, pongo la mano en el vidrio, como si eso pudiera reparar algo, y empiezo por primera vez a rogar a Dios que se salve.

Regreso a la sala y el teléfono suena, es el tipo ese, le doy indicaciones de cual es el piso y le espero. Cuando le veo acercarse rápidamente, me toma del cuello, y me encara.

-Dime quién eres y porque estás con mi novia?- otra vez recalca la palabra.

Lo empujo y lo hago golpear en la pared.

-Soy quien la trajo acá y si se tranquiliza, explicaré todo- aunque no deberia, pienso.

Empiezo a contarle lo sucedido, exceptuando algunos detalles y me hace ver mi culpabilidad, solo lo escucho, me amenaza con demandarme. Como si fui yo quien la atropelló.

-El culpable ya esta en la cárcel y te aseguro que pagara por lo que hizo- le digo, y cuando va decirme algo, le interrumpo.

-Pero obviamente yo me haré cargo de todo lo que tenga que ver con su recuperación- el me observa, se que sacara algun provecho de todo esto y no me equivoco.

-Creo que deberías de indemnizarnos- indemnizarnos dijo el imbécil!- si, tienes culpa de esto- termina diciendo.

-Mi abogado hablará contigo y te dará lo justo- el asiente, algo sonriente, hasta el momento no ha preguntado por como se encuentra su novia, ni ha pedido verla.

-Bueno, tengo que retirarme ya que tú estas aqui, el doctor Miller es quien ve su caso-digo cuando lo veo acercarse- él te pondrá al tanto de todo, y mi abogado pronto se comunicara- me despido de Miller dandole la mano y a Alex solo le hago una señal con la cabeza y salgo de ahi, lo más rápido que puedo, tengo muchos sentimientos encontrados, no quiero irme pero al mismo tiempo siento que ya nada debo hacer ahi.

Me encuentro a mi nana esperandome, ansiosa porque quiere saber todo, me tomo mi tiempo para contarle incluso mi sentir, es la unica en la que confio, luego llamo a mi abogado para que llegue a un acuerdo con ese tal Alex, no quiero volver a hablar con él, me parece una basura, un parásito, espero que su novia no sea igual.

Me tomo el resto del día para descansar, o eso intento, hablo con Damian y le explico sin entrar en detalles de la situación, me recuerda el viaje que debo hacer mañana y se ofrece a ir él.

-No es necesario Damian, me tome el día para descansar, mañana estaré como nuevo- miento, me siento cansado mentalmente, esto a sido peor que un dia ajetreado de trabajo- quiero que me mantengas al tanto de todo lo que se hable en la junta luego de lo ocurrido con Xavier- es el socio que atento contra mi vida, lamentablemente no sobrevivio al disparo de Kirk.

Revisando algunos correos logro quedarme dormido, hasta que mi alarma suena, son las 4am y debo tomar mi vuelo fuera de la ciudad. Al llegar a mi destino, voy directo a un almuerzo de negocios, es una oportunidad de expandir la compañía, nuevos socios, otras sedes, eso espero lograr pronto.

La reunión en bastante amena, llegamos a algunos acuerdos positivos para todos, y seguiremos negociando, y proponiendo algunos planes. La mujer que los acompaña, y anota todo lo que se dice, empieza a tocar mi pierna con sus pies, y me sonrie, en mi no causa nada, pero igual la observo con una sonrisa. Todos se levantan, la reunión a terminado, ella me da la mano con un papel, que resulta ser si número, rio para mi- cosas de adolescentes- pienso.

Me dirijo al hotel y ella esta ahi con sus piernas cruzadas, se levanta y mientras pido mi tarjeta, la observo, esta muy bien, alta, peliroja, busto generoso, cuando al fin me dan la tarjeta, me acerco a ella.

-Espero que no esté esperandome a mi señorita....

-Soy Amanda- asiento relajado- y si lo estaba esperando-mi dice.

-En que le puedo ayudar- ella suspira.

-Creo que yo le puedo ayudar a usted-sonrio.

-Me gustan las mujeres asi de seguras- no quiero decir "descarada"- si me acompaña?- Le digo apuntando las puertas del ascensor.

Empieza a caminar, le sigo mientras voy mirando su trasero.

Subimos al piso y llegando se quita los tacones, empieza a quitar su ropa, solo la observo con una mano en los bolsillos y otra en mi barbilla, me sirvo algo de licor del minibar y le ofrezco una copa.

-Vamos Sebastián, hazme lo que me hiciste aquella vez- espera que?? La miro confundido- que? No recuerdas-me pregunta- en realidad no recuerdo haber tenido sexo con ella- no importa mi amor, te lo recordare- y me planta un beso, succiona mi lengua queriendola arrancar parece. 

Se tira a la cama ya totalmente desnuda, abre sus piernas, yo sigo queriendo recordarla -al diablo- me digo, me quito la ropa, y me acerco a ella me pide placer, yo se lo doy.

Varias horas después, me encuentro sentado en la terraza con una taza de café, me encuentro indeciso si llamo o no al doctor Miller, me decido hacerlo, necesito buenas noticias.

-Doctor soy Sebastián, llamo para saber el estado de la chica- le digo, no se su nombre todavía.

-No ha tenido mejoría, debimos hacer varios estudios hoy, pero...- pero??

-Pero que? Le dije que hiciera todo lo que tiene que hacer- contesto molesto.

-Sebastián escucha-suspiro- se necesitan una firmas para hacer los estudios y la persona encargada de ella no se presento hoy- mmm, imbécil- no pudimos ni contactarlo, y no sabemos de otro familiar- bufo molesto.

-Bien, creo que en ese caso alguien mas debe hacerse responsable- me despido pensando seriamente que hacer.

Mi teléfono empieza a sonar y veo que es mi abogado, me comunica que hablo con el estúpido de Alex que le ha pedido cierta cantidad de dinero, algo exuberante, le digo que haga lo que le parezca mas conveniente, y termino la llamada. Ese Alex es una fichita. A parte de eso pido la información que pedi de la chica, pero no ha podido saber nada, solo que Alex comento que hace semanas perdio a su madre y luego su trabajo, que solo lo tiene a él y que hará lo imposible para que yo sea justo con ella. Me sonrio, ya que ese beneficio sospecho solo sera para él, desgraciado.

Siento un masaje en mis hombros, es Alana- Alana me dijo que era su nombre?, pienso- me muestran un condón y ya sé lo que sigue, se sienta a horcadas sobre mi y hace un excelente trabajo. Si la calificó por estrellas, le daria cinco.