FELIZ FELIZ INICIO DE SEMANA MIS AMORES
—Yo no lo hice… —susurra—. ¿Me crees? —Lo mira mientras sus lágrimas se deslizan por sus mejillas. Archie no lo pudo soportar; sus ojos se tornaron llorosos. Está dolido; su hijo murió de una manera muy trágica junto a su madre, y ahora la mujer que quiere, que desea, está en una complicada situación y se quiere ir de su lado para siempre. —Todo va a estar bien —dice. —¡Dime si me crees!— suelta ella un grito desgarrador. —Te creo, Kiara Watson… —responde sin aliento y baja su mirada; se le salen las lágrimas. Un hombre fuerte, un Adonis, un dios griego, así lo pintan, y ahora está derrotado ante la mujer que seguramente, al salir de prisión, se irá lejos para que él no le haga más daño. —Lo lamento, lamento mucho lo de tu hijo. Susana está loca, Archie; ella hizo todo esto —le comenta—. Ella me llamó y le iba a hacer daño a Lia; por eso tuve que irme… Cloe me dijo que te dijera que ella no iba a abortar y que lo lamentaba. Eso hizo que Archie empuñara su mano y golpeara la p
—Entonces, ya sabes que no soy tu madre. —¡Habla de una buena vez, Samantha! —ordena—. Porque ahora puedo comprender tu desprecio, puedo entender muchas cosas. —Ay, no empieces, Kiara, y vamos al grano. Dame dinero para irme y te lo diré todo. Ya que la última vez me jugaste sucio, así que dinero en mano. —¿Acaso no ves que estoy tras las rejas? —Ay, cierto —se ríe a carcajadas—. Por cierto… ¿Sabías que mi declaración es de suma importancia para hundirte más? Pero no lo haré después de todo, no soy una mala madre. Por cierto, qué lindo anillo tienes puesto. —No, el anillo no —se niega porque Archie se lo regaló. —¿No? Bueno, entonces me voy —se da la vuelta y Kiara siente impotencia. —Espera… —susurra y mira una vez más el anillo que el hombre que ella ama le regaló como promesa de amor—. Tú ganas, Samantha —se lo quita—. Te lo daré, pero primero dime la verdad. —Más te vale que lo hagas, Kiara, porque si no, diré muchas cosas en tu contra —la señala. —Solo di
—¿Entonces seré su sumisa? —¿No quieres? —se empieza a quitar la camisa para traerla más cerca y sí que lo hizo; esa mujer babea por él. —Ssssi... —pasa saliva y siente su cuerpo calentarse. —¡De rodillas ahora mismo! —le ordena y ella se arrodilla ante él. Kiara no puede dormir, está haciendo mucho frío y siente su cuerpo helado. Tiene sueño, pero no se atreve a dormir, teme que algo le pase o no despertar nunca. Desde que Susana ha hecho tanta maldad, siente temor y siente que sus días están contados. —Tengo hambre... —intenta pasar saliva, pero ni puede debido a la sed que tiene—. Dios, que mi hermanita realmente esté bien. Quiero, deseo tanto comerme un platillo de la señora Mercedes. —Suelta un largo suspiro—. Es inútil, siempre tuve espíritu de valentía, pero creo que ya no puedo más. Ni lágrimas me salen. A veces ser tan buena trae consecuencias. —¿Kiara...? —Al escuchar esa voz, se coloca de pie de inmediato. —¡Señora! —Ella se coloca de pie. —Ay, linda, com
CASA DE LA PLAYA. Archie está bebiendo whisky, sentado en la orilla del mar mientras lo observa. El sonido del mar es algo que le da tranquilidad, pero no puede dejar de pensar en Kiara Watson, la chiquilla rebelde que se robó su corazón. Recuerda mucho el día que, por una equivocación, llegó a su vida, y aunque no lo aceptaba, había algo en ella tan especial que lo atrajo desde el primer momento. Por eso quería hacer lo imposible para no dejarla ir, pero su egoísmo y arrogancia hicieron que la perdiera para siempre. —Jamás te voy a olvidar, mi pequeña rebelde, mi dulce tormento, mi fierecilla... jamás —bebe de la botella, haciendo arder su garganta, y luego se desploma sobre la arena—. ¡Qué m****a, joder! Por eso no quería enamorarme. Eso del amor duele —se le salen las lágrimas—. Jamás volveré a confiar en nadie. Susana, espero que estés quemándote en el infierno. Qué asco fue besarte. Si no fuera porque tu estúpida venganza, mi hijo estaría vivo —cierra los ojos—. Lo lamento, Cl
—¿Casarnos hoy?— Ella está perpleja. —Sí… Ya han pasado muchas cosas y yo quiero aprovechar este momento, por favor—, dice arrodillado ante ella. —Cásate conmigo, preciosa, sé mi esposa, sé la esposa de este terco hombre—. Saca el anillo y extiende su mano. —Mi hermana me comentó lo que te hizo Samantha y tuviste que darle el anillo; pues aquí lo tienes, hermosa. —Dios…— Para Kiara fue imposible no llorar. —¿Cómo lo obtuviste? —Soy un Villarreal—. Le guiña el ojo y ella lo fulmina con la mirada. —Está bien… Soy un presumido. ¿Ya no te quieres casar? —¿Y qué esperas para ponerme el anillo?— Ella extiende su mano y Archie, con sus manos temblorosas y una amplia sonrisa, se lo coloca. —Jamás pensé hacer esto, pero me hace feliz que seas la mujer con la que me voy a casar—. Se coloca de pie y la abraza. —Siento como si estuviera soñando, pero… no nos podemos casar, amor. —¿Qué dijiste? —Que no nos podemos casar. —No, eso no; lo otro. —¿Amor?— Pregunta ella, sonrojada,
—Kiara…— La menciona su madre, mirándola con rareza. —Sí… soy tu hija, madre—. Quería acercarse más, pero el temor no la dejaba. —Pero estás grande, hija, y hermosa—. Sonríe ampliamente. —¿Crees, madre? Si hubiera sabido antes que estabas aquí, hubiera venido por ti—. —Mi lucero, Kiara, mi chica valiente—. Así le decía cuando estaba pequeña. —¿Y Cloe? ¿Dónde está mi otra hija?—, pregunta, y Kiara mira a Archie. Watson no la quiere lastimar. —Ella… está—. Hace silencio. —¿Modelando?—, pregunta. —Tu hermana siempre quiso ser modelo, tan hermosa niña—. Sonríe una vez más, y a Archie se le tornan los ojos llorosos. —Sí, madre—. Kiara quebranta en llanto. —Oh, mi lindo lucero, ven aquí—. Extiende sus manos, y Kiara se acerca rápidamente, tomando las manos de su madre y besándolas. —No llores, linda, tu padre te ama mucho y seguramente ya viene a verme. —Mamá, perdóname, no sabía nada de esto, no quiero separarme de ti—. La abraza. De repente, la mentalidad de la señora M
Todos los seres humanos cometemos errores, pero bueno aquellos que disponen el corazón con amor para cambiar y hacer lo correcto. Para Kiara y Archie fue un momento mágico en su boda, era algo sencillo, pero un ambiente lleno de amor y felicidad, sin falsedad. Para Watson, ver a su hermana vestida como una princesa y feliz por el amor que recibe de los Villarreal fue un momento especial. Aunque su amor con Archie sucedió de una forma cruel, ella aprendió a perdonar y darle otra oportunidad que él se ganó bajando la guardia y aceptando que se equivocó y no la quiere perder. Esa oportunidad sirvió para ambos, porque de cierta forma se necesitaban para sanar, para construirse como seres humanos. Luego de la boda y la luna de miel, tomaron la decisión de abrir su propia empresa para crecer juntos en el área de tecnología. Mientras que Lia tomaba clases y, con la ayuda de especialistas, iba mejorando. Kiara visitaba a su madre seguidamente y compartía con ella hasta que se volvía a
Kiara está en la habitación de su madre, bailando al compás de la música con el palo de la escoba. Cada vez que hay fiesta en la mansión Watson, se emociona mucho, aunque la hagan a un lado y no pueda asistir como la Watson que es, sino como una empleada más para su propia familia. A pesar de que no tiene los mismos privilegios de su hermana Cloe, su espíritu de valentía no se apaga. Ella es estudiosa y una chica amable, aunque con carácter fuerte cuando es necesario para defenderse de sus amigos de la universidad. Kiara viste como niño porque ni vestimenta le compran, así que debe ponerse lo que deja su mejor amigo.De repente, unos aplausos exagerados la sacan de sus pensamientos, donde ella imaginaba que era una princesa con un espectacular y reluciente vestido. Al abrir sus ojos café con destellos dorados, se percata de que es su hermana.—Cloe… —sus mejillas se ruborizan.—¿En qué tanto piensas, hermanita? —la mira con seriedad, dejando de aplaudir, y se acerca para apagar el equ