52 EL VENENO CAMIL DE LA FUENTE —Dave…—advertí con voz queda y él solo negó con la cabeza. –¡Tranquila Doctora De La Fuente!—musitó poniendose de pie quitándose la bata blanca y acomodándola en el perchero, para luego tomar una chamarra marrón y comenzar a ponérsela. —No pienso presionarte Camil, o no al menos, si no se te ocurre volver a ponerte difícil en el interior un quirófano. —¿Estas seguro que quieres hacer esto por mi?— inqueri algo nerviosa, pensando en todos los pros y los contras de la llegada de Mara y de enviar precisamente a Dave a recogerla. Bueno si lo analizó un poco, solo en este caso es mucho mejor Dave que Farid. —¿Por ti? — refuta— Por ti quiero hacer cualquier cosa Camil… pero esto realmente esto lo estoy haciendo por mi; para ganar puntos con mi futura suegra. Pobre… si supiera que con Mara no hay forma humana de quedar bien…o si. «Mucho billete y obedecer sus órdenes al dedillo» Él se marcha, y rápidamente llamó a la señora Madelein para que sepa d
53 EL NOVIO PERFECTO CAMIL DE LA FUENTENunca había añorado y temido tanto un amanecer. Estaba cansada,¡si!, demasiado, al punto de solo querer irme a casa a invernar como un m@ldito oso. Lo peor de todo es que sabía que no descansaría nada todo el día.Para empezar no podía ir directo a la mansión de Farid, sino que tenía que ir a mi propio departamento a enfrentar a la dragona de Shrek.No iba a ser fácil encontrarme con Mara… lo tenía claro. Habían pasado seis largos años desde la última vez que nos vimos, y no terminamos en buenos términos. Yo estaba embarazada de cuatro meses cuando ella decidió echarme de casa sin contemplaciones.No le guardaba rencor, o al menos eso quería creer. Creo que había dejado ir el pasado la noche que Emira nació. No valía la pena guardar antiguos resentimientos que solo me restarían energía.Estuve en el cambio de guardia y recogí mis cosas para regresar a casa. En el parqueo estaba mi nueva camioneta. Había olvidado por completo que había llegado e
54 TUVE UNA HIJA CON FARID ARAY CAMIL DE LA FUENTEQuedé sumamente impactada, con la pregunta que mi madre acababa de hacerme. Podía responder con la verdad y sencillamente decirle que Farid Aray era parte irremplazable en mi vida, y ganarme su diatriba interminable de lo decepcionada que estaba de mi… —Mamá no te lo tomes a mal, pero mi vida privada dejo de ser asunto tuyo hace mucho tiempo— me limité a responder. —¿Tú vida privada?— inquirió enarcando una ceja—¿ Con eso estas queriendo decir que si te acuestas con ese endemoniado e ignorante emigrante? —¡Mara , Por Dios! No tienes que ser tan despectiva con las personas. ¿De dónde sacas que Farid es ignorante? —Te olvidas que vivió bajo mi techo, y ni siquiera sabía hablar inglés— se harta como si ella fuese una eminencia en alguna materia. Me cuesta creer que esta hablando en serio. A veces es tan inhumana que no sé cómo logró traer al mundo a tres hijos tan diferente a ella. —Mamá, Farid cuando vivió en tu casa no tení
55 A PUNTO DE PERDER LOS ESTRIBOS CAMIL DE LA FUENTE «¡Tuve una hija con Farid Aray» La frase queda flotando en el aire, y ella se queda mirándome con los ojos demasiado abiertos. La tensión en el ambiente se podía cortar con un cuchillo, y preparándome para recibir todo el potente veneno de Mara cerré los ojos. «¡Yo y mi gran bocata!» Después que solté aquello me di cuenta que había acabado de cometer un terrible error. Para probar que yo era mejor que Mara, o más humana; yo lo tenía que poner a mi familia bajo su escrutinio, o bajo todas esas malas vibras que ella producía. Mi relación con Farid era tan nueva después del inesperado reencuentro, que no tenía idea cómo resistiría un ataque con bombas de destruccion masiva, como los que era capaz de lanzar mi invitada. —¿Estas bromeando verdad?— inquirió ella con esa cara de asco que hacía cuando algo le parecía demasiado desagradable, no estaba fingiendo, su desconcierto era real, al igual que su desprecio. La conocía lo su
56 LAS PIEZAS DE UN AJEDREZNARRADOR OMNISCIENTE Las primeras gotas de lluvia habían comenzado a caer sobre el asfalto cuando Camil logró llegar a su coche.Le ardía la garganta por las lágrimas que estaba conteniendo. La furia se había metido en sus venas como una droga poderosa, o como epinefrina hacían do que su corazón latiera a prisa.Mara siempre sacaba de ella lo peor, pero también su lado más vulnerable. Su parte más débil y el recuerdo de los años que vivió siendo una marioneta por ganar un poco de atención.Entró en aquel vehículo que Farid había comprado para ella, y sin pensar lo puso en marcha. Estaba tratando de no romperse, pero entonces se dio cuenta que a penas estaba respirando. Soltó el aire en un triste suspiro y plantó ambas manos en el volante, sin tener todavía el valor de encender el motor del coche. Se inclinó hasta posar su frente sobre la parte superior del volante. Cerró los ojos y dos lagrimas amargas de frustración corrieron por sus mejillas.A fin de
57 NO ES POR ELLA ES POR MICAMIL DE LA FUENTELos brazos de Farid me reconfortan mientras que no hago otra cosa que llorar. No supero la opresión en el pecho, me arde respirar y cada que cierro los ojos puedo ver a esa m@ldita. Me permitiré llorar esta vez, y solo un rato. En muy poco tiempo estará Emira de vuelta de la escuela y no quiero que me note siquiera con los ojos rojos o hinchados.—¡Trata de calmarte cariño! No se que tan dificil sea administrarle un sedante a un doctor… ¡pero te juro que lo intentaré si sigues así! —su extraña amenazaba me saco una leve sonrisa. Lo mire a los ojos y le agradecí q la vida que él estuviera conmigo en este momento que había desenterrado a varios demonios del pasado. Trate de dejar atrás todo lo que me marco, los maltratos, las ironías y las pullas que mi madre que por desgracia siempre daban en el blanco y me habían daño. Fueron tantas las veces que Mata me llamó gorda… que yo misma odiaba a mi cuerpo y me maltrataba. Trate de olvidar tod
58 "EL PSICÓANALISTA" CAMIL DE LA FUENTE —No tengo una idea… Su cuerpo duro y sudado, acabado de salir de aquel gimnasio me apretó sobre la cama. Los músculos de su torso se sentían aún más hinchados y duros, y los tatuaje era de un negro brillante seductor. Su fragancia mezclada con el sudor era prácticamente adictiva. Se notaban las horas que había pasado haciendo ejercicios, y si, Farid era trabajaba duro y con constancia por todo lo que deseaba. —Me temo no estes de humor para esto Habiba— dijo y lo miré a los ojos, sorprendida de que dijera algo así. Le costaba contenerse pero era evidente que le preocupaba demasiado mi estabilidad emocional, y comprendía que mi primer encuentro con Mara no había sido precisamente sencillo o amable en ningún sentido. Más bien lo podría calificar como desastroso… como huracán categoría cinco devastando lo poco que quedó de la Camil del pasado… porque si me afectaba era por el dolor del recuerdo de lo que yo había sido, y hasta qué punto me
59 PISTACHOS Y MIEL FARID ARAY—¡No Farid!—repuso rápidamente Camil — ¡No me puedo ir a Paris! Aunque la oferta sea… la más tentadora que oido en años.—¡Habiba solo quería que te relajaras!— conteste con sinceridad. No era mi intención que te preocuparas más.—¡Tengo que trabajar!— anunció totalmente resignada. —Aunque no niego que me hubiera gustado ir… Quizás cuando Mara se vaya a Miami o en mi próximo descanso. —Descuida Habiba, Paris seguirá en el mismo sitio y yo también—comenté dejando el teléfono en la mesita y acercándome a ella, girándola y abrazándola por la espalda guiándola al baño. Mencionar el nombre de su madre hizo que esa sombra gris regresara, pero no con la misma fuerza.Esta vez optamos por una ducha rápida y no por la bañera.Todavía alucinaba mientras pensando en el orgasmo que le había arrancado a Camil, así que la idea de la bañera no era una buena idea.Ella tenía que descansar, necesitaba dormir algo.La guardia había sido agitadora y cuando llegara Emir