27 “Ilusionada Conmigo”CAMIL DE LA FUENTETomé a mi hija en brazos, nunca me había sentido tan asustada, ni tan aterrada, tanto era así que ni en el momento del parto de Emira, sola en aquel quirófano sin nadie que sostuviera mi mano, me había sentido de esa manera. Mi pecho era ela de un delicado pájaro que vuela kilómetros por encontrar mejores tierras, no importaba cuantas veces había huido, ni cuanto me hubiera intenagado alejar... a fin de cuántas Farid me había encontrado. Me encamine a mi propia casa llevando a Emira conmigo, que protestaba casi tan histérica como yo. Toda esta situación estába afectando a la niña, y yo no podía ni autorregularme. ¡No hoy, no después de estar segura que Farid había ido a buscar a mi hija!¿Por qué no se marchó aquella misma noche del accidente... por qué tuvo que tener ese accidente en primer lugar? Porque aunque lo vi aparecer en la sala de urgencia, tuve al corazonada de que él no se detendría hasta descubrirlo todo. Hasta que no d
28 “Tú no ganas, este juego que no tiene ganadores”CAMIL DE LA FUENTE —Está bien, hablemos— admití con cansancio—¡Hablemos, pero que no sea aquí!No donde la niña pueda escuchar nuestra airada discusión— le pedí cerrando los ojos, como profesia de lo que vendría a continuación.—Me parece bien, pero igual no pensaba discutir…— alegó y yo rodé los ojos.—Tu no discutes Farid, tú te impones… soy yo la que discuto por ti y por mi.—Así es— admitió él,— y hay cosas que no cambian mucho aunque pasen mil años. ¿Tengo razón?—¡Si la tienes! Solo espera aquí— le exigí volteándome al apartamento de la señora Madelein que por supuesto estaba mirando la situación por una hendija de la puerta entre abierta.—¿Puede quedarse con la niña por un rato? Tengo un asunto que tratar con ese señor— le expliqué a la señora Madelein que no le quedó otro remedio que abrir completamente la puerta cuando me vio acercarme.—Si Camil, pero ese señor que está frente a tu casa, es el mismo que estaba hoy fren
29 “¿Cómo iba a conseguir odiarte? ”FARID ARAY —¡Yo no te odio Farid!— musitó ella negando con la cabeza—¡Yo nunca podría odiarte!… no a ti… no después de todo lo qué pasó entre nosotros. ¿Estás loco? ¿Cómo iba a conseguir odiarte?—No me parece tan descabellado que me odies…—murmure recordando su primer tiempo bajo mi cuidado— Porque si no fue por odio… ¡Entoces, explícame Camil cómo es que me entero seis putos años después de su naciemiento, de la existencia de esa niña… de mi niña!—¡Tuve miedo! — expresó ella con lágrimas en los ojos—¡Tuve miedo Farid!— repitió sin llegar a mirarme.—¿Tuviste miedo de mi Camil? —ella me miró entonces y se puso de pie, como si lo que acababa de preguntarle le hubiera aguijoneado más que el propio sentimiento de culpa— Entonces fue eso… ¿tuviste miedo de mi? ¡Miedo de mi!—No seas rídiculo Farid… —expresó casi como pasión caminando por la enorme sala devorada con detalles minimalistas—¡tuve miedo de todo y de todos!, excepto de ti— respondió con
30 “¿Un Abrazo de papá? ”FARID ARAY Casi tan inocente como un niño me senté en el piso a su lado, obligándome a sonreír aún con grandes lágrimas en los ojos.—¡Si viste, nuevo papá… que mi mami es la más linda de todas!—musitó ella en su inocencia, y pase saliva cautivado por aquel rostro feliz tan pequeño que no tenía idea de la tormenta feroz que la rodeaba en aquel momento.—¡Tú mami es la más linda de todas!—coincidí asintiendo con la cabeza—¿Me permites darte un abrazo de papá? — le pregunté y ella se quedó impactada ante aquella propuesta. Pasó un instante para que asintiera con la cabeza, permitiendo acercarme aún más a ella.La tome en mis brazos y la acuné como si acabara de nacer, y en parte así era, para mi era tan pequeña y frágil, que en ese momento me jure a mí mismo que la defendería con mi vida entera, sin importar el rumbo que tomara mi vida yo siempre estaría allí para Emira.—¡Me haces cosquillas papi!— protestó ella resuelta y estallando en carcajadas que calde
31 “Se supo la Verdad”CAMIL DE LA FUENTE Entre por la puerta del hospital caminando pareciendo un zombie. La noche sin dormir me había sacando unas bonitas ojeras, a lo oso panda. Es que las preocupaciones maltratan más que una guardia entera entrando y saliendo de un quirófano.La mañana sería bastante complicada si no lograba despabilarme.Al menos Emira había descansado y había llegado a la escuela feliz como lombriz y habiendo mil preguntas de cuando y cómo volvería a ver a su papito.Nunca creí poder escuchar la palabra «papá» tantas veces seguidas, pero mi hija había roto todos los record posibles, y están absolutamente feliz.Yo aún tenía mis reservas, pero hasta ahora Farid había resultado ser encantador.Los años nos darían la sabiduría para llevar la fiesta en paz, y aunque fuera separados sacar adelante a nuestra hija.Marta me abordó con un café en las manos y tan pronto llegamos al cuarto de los médicos nos sentamos una frente a otra, para degustar ese café en silencio.
32 “El Cambio de Nombres” (Un mes después)CAMIL DE LA FUENTE La lluvia no deja de caer torrencialmente, empapando la avenida, y nublando la vista del tráfico. Emira no deja de asomarse por la ventana, para ver que su padre llegue de una buena vez. No es que esté atrasado, pero ella está demasiado ansionsa.El día es bastante gris desde que amaneció, y lo sé porque mi hija se despertó a las seis en punto de la mañana. Si tuviera que ir al colegio hubiera remoloneado como de costumbre… pero hoy no. ¡Hoy es diferente!Ella no entiende la verdadera connotacion de lo que ocurrirá hoy, pero le sonó sumemente importante. Eso, sumado que tiene que ver directamente con su padre… bueno eso lo hace importante sin necesidad de saber nada más.Hoy después de varias conversaciones previas y muchas tasas de café, por fin iremos los tres juntos a cambiar los apellidos de la niña e incluir el apellido Aray en el nombre de Emira, eso además de que a partir de hoy ya aparecerá el nombre de Fari
33 “No me iré sin despedirme”CAMIL DE LA FUENTE Veinte minutos más tarde de haber llegado, ya todo el papeleo estaba listo. «Emira Aray De La Fuente…» se leía por todas partes y mi mente divagaba por haber llegado finalmente a eso, mi mayor miedo se había convertido en realidad, y después de todo me lo estaba tomando muy bien. —¡Como siempre debió haber sido!— susurró Farid mirando el nombre de la niña, como si pudiera leer mi mente. Estaba tratando de sacarme de mis casillas abiertamente, lo que no sabía es que yo tenía un doctorado en paciencia al llevar seis largos años criando a un terremoto sola. Esperamos, firmamos todos los documentos y recogimos una copia, para salir de aquella oficina. Salimos a la calle y Emira no dejaba de hablar como una lora drogada, y su padre solo seguía animándola a hablar más. La lluvia siguió cayendo torrencialmente; y salimos de allí bajo las inmensas gotas. Llegar a la camioneta fue casi una odisea, a pesar de que Farid la pegó lo más q
34 “Un Hombre para no jugar”FARID ARAYSi algo había sabido siempre, es que Camil del La Fuente era una mujer realmente hermosa, la más hermosa de todas las que había conocido, o al menos eso pensaba yo. Su juventud, su carisma, su energía absolutamente arrolladora que me dejaba sin habla cuando ella entraba a la misma habitación que yo.Sabía que ella me superaría, si es que le había llegado a tocar hebras profundas de su ser, solo que cuando se fue mi primer pensamiento fue que ella había jugado conmigo, y que las noches de pasión en la que le había abierto mi corazón para ella no había significado nada.No fue difícil saber todo lo que había hecho en Arabia a mis espaldas, no fue difícil descubrir que había tratado de instaurar una demanda de acoso en mi contra, que las autoridades por su puesto desestimaron.Por desgracia para ella en mi país muy pocas personas se atreven a desafiar abiertamente a un Jeque y mucho menos si es una mujer quien pone la querella. Así que su palabra n