Capítulo cincuenta y tres

— ¿Dónde está Milo? — Pregunta ignorando a Vico.

— En los aseos — Le digo.

— Vale, ¿podrían dejarnos solos un momento de nada, por favor? — Vico toma de la mano a su mamá, dispuesto a salir del consultorio.

— No voy a ir a ninguna parte, me has mencionado y además has dicho que tengo un embarazo múltiple, dijiste mi nombre y eso quiere decir que voy a tener dos hijos y que deberías haberte dado cuenta antes ¡Me dijiste que no eran necesarias tantas ecografías! — Vico le pide a su madre dejarnos solos. Por fin.

— ¿Qué diablos está pasando aquí, Julián? Primero la fertilización y ahora la ecografía ¿Qué putas pasa contigo? — Escucho la voz de Milo.

El pobre está bastante alterado y muy pálido.

— Deberíamos estar tratando esto hace tiempo. Awa trabaja ¡Por Dios! Deberías estar en reposo y no cogiendo como conejos — De acuerdo, vale.

Pienso que lo mejor es irme de este lugar, esto se está volviendo muy intenso. Vico levanta una ceja

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo