“No se puede ocultar el sol con un dedo, eso dice mi mamá todo el tiempo. Antes pensaba que podría hacerlo con la mano, pero me he dado cuenta de que ni utilizando los cinco dedos puedo… Y que mucho menos podré ocultar al verdadero padre de un embarazo de trillizas”
Awa
El último mes ha sido muy agitado, la madre de Vico lloró casi toda la noche porque no íbamos a tener un niño e intenté convencer a Vico de dejar las cosas como estaban y contar la verdad. Pero no quiso escucharme y hace quince días, cuando su madre se fue de casa, Milo intentó convencerme de irme a vivir con él.
Al principio no acepté, porque con la novedad de las trillizas, toda mi familia me visitaba casi a diario. A excepción de Litia, a la que todavía no l
Lo que me resulta algo incómodo, teniendo en cuenta que tres intrusas se interponen todo el tiempo y siguen creciendo como la mala hierba.Milo me besa y siento que mis hormonas se activan, empiezo a quitarle su camisa, mis manos descienden juguetonas y siento que todo mi cuerpo responde acelerado y caliente, responde al cien por ciento ante sus caricias.— Awa, espera. No podemos ¡Detente! — Me quedo quieta y luego grito con todas mis fuerzas, llevo varios días con estas ganas y viene el otro y no me deja hacer nada.— Podría ser solo la puntita, Milo. En serio — Se muerde los labios. Observo a su amiguito que contrario a Milo se encuentra más que dispuesto para la acción.—Lo siento, hermosa de verdad. No podemos — Se aleja de mí y sale del apartamento.Me quedo de pie mirando hacia el lugar por donde él desapareció, la frustración me est&aacu
— Estábamos cerca y quise pasar a saludarte, nunca vendría sin avisarte, querido. Por eso te envié un mensaje hace diez minutos — Tomo el teléfono de Milo que está en la mesa de la entrada a la habitación y por supuesto, ahí está el mensaje, pero también tiene un mensaje de una chica.LARA: Estoy en la ciudad, podríamos vernos y tal vez eso me ayudaría a reconsiderar mi decisión.Me quedo mirando el mensaje, impresionada, ¿quién es esa chica?Observo su foto de perfil y se encuentra en una playa en traje de baño con un pareo que nuestra con sutilidad su escultural cuerpo.¡Y yo aquí como una ballena!Lara, creo que he escuchado ese nombre, pero con lo que está pasando en la sala, no logro concentrarme.Es que siempre las mamás y las suegras llegan en el momento menos indicado. Aunque la señora
“Dicen que Dios aprieta, pero no ahorca, pero al parecer, es un dicho mal formulado. Cómo el horóscopo, o simplemente a Dios se le olvidó que no soporto la presión, ni la falta de oxígeno”MiloLara se ha ido por fin y Awa no me habla, como si yo fuera el culpable de que la señora Ann fuera la abuela de Lara y que fuera diabética y no tuviera azúcar en su casa.— Awa, princesa ¿Podrías dejar de comportarte como una niña paranoica? — Antes de negarse a volver a hablarme, me dijo que le había escondido lo hermosa que era la enfermera maldita.¡Palabras textuales de Awa!Dijo que todavía me gustaba, que seguramente ya estaba buscando la forma de deshacerme de ella para poder copular libremente con la enfermera, puesto que la tenía al l
El calor me recibe de golpe, estamos en primavera y aunque, se siente como si el verano estuviera a la vuelta de la esquina.— ¿Awa? — Llego a casa y me encuentro con un escenario de un romance increíble. Parece sacado de una comedia rosa, de esas que tanto le gustan a ella.Awa sale de la habitación y trago con fuerza, está increíble; tiene el cabello recogido, su cara maquillada a la perfección y lleva puesta una bata dorada y semitransparente.Puedo ver la silueta increíble de su cuerpo embarazado, acoge amorosamente a nuestras niñas ¡Se ve fabulosa!— Princesa — Se muerde un labio y camina con suavidad hasta llegar frente a mí, se inclina, pasa sus manos por mi cuello y me besa.— Lo siento, he exagerado un poquito mi reacción — Extrañaba sus besos, sonrío. Ella es t
“Los mexicanos le llaman desmadre, en Colombia dicen que se armó la gorda, y aquí decimos <Le bazar>… Y yo, solo digo que el día que te levantas con el pie izquierdo, más vale rogar al ser supremo en el que creas para que las cosas se enderecen… El problema es que yo soy zurda”Awa— ¡Levántate! — Empujo a Aisha que se ha declarado la protectora de mis hijas y se la pasa metida en casa de Vico desde que me dieron la salida de la clínica. Pero la prefiero a ella que a mi suegra, así se la pase comiendo todo el día y escribiendo en su teléfono.— ¿Puedes dejar de asustarme de esa manera? Que aunque yo no estoy embarazada, me vas a sacar a tus futuros sobrinos antes de tiempo — Dice.— ¿Estás segura de que fuiste a las clases de biología? — Porque no puede haber otra excusa para lo que acaba de decir.Se escapó de todas las clases y si continúa así, pronto la tendremos aquí, embarazada o peor a
Vuelvo a tocar mi vientre y me inclino buscando alivio, esto duele demasiado.— ¿Estás bien? ¿Quieres que te lleve al hospital? — De repente, todo ha vuelto a la normalidad.Seguimos caminando y mi hermana sigue con su teléfono, no sé qué tanto hace.— ¿Has logrado convencer a Milo de que no hable? — No tengo la menor idea de lo que habrá respondido o si no lo ha hecho.Reviso mi bolso y mi ropa y me doy cuenta de que no tengo el teléfono ¡Lo que me faltaba!— Escríbele tú, por favor. He dejado mi teléfono en casa — Sigo buscando, pero no lo encuentro.— No tengo su número — Me quedo mirándola como si fuera culpable de toda la corrupción del mundo — ¿Qué pasa? Es solo el amante, tengo los números de los novios oficiales y esposos — La vuelvo a golpear en la cabeza y observo el camino.Viene un coche a una velocidad un poco lenta, debe conducirlo un abuelito.Levanto las manos, como si estuviera haciendo autostop, esto es ridícu
Cuando Milo abre la puerta de la terraza, observamos a un hombre alto y de cabello negro, acercándose hacia nosotros con una expresión de furia.— ¿Dónde está? ¿Dónde diablos tienes a mi mujer? — ¿Qué está pasando? Un fuerte dolor me embarga y me tomo el brazo de Milo con fuerza.— Madre, padre, ¿podrían resolver este problema? — Dice Milo girándose a mirar a sus padres — Tío, no tengo la menor idea de lo que hace tu mujer aquí y no me interesa saberlo — Su tío lo toma del cuello de su camiseta, Milo no hace nada para defenderse y su padre se acerca deprisa a nuestro lado.— Iker, tienes que calmarte — Le dice el padre de Milo con calma, intentando alejarlo de él.Me hago hacia un lado, porque al parecer el señor no se ha enterado de mi presencia y eso que soy una ballena embarazada de tres ballenitas.Siento un fuerte dolor en mi vientre y espalda ¡Lo siento preciosas, no volveré a llamarlas de esa manera!La discusión entre los tres hombre
“Dicen que tener un hijo es una de las experiencias más maravillosas del mundo y que solo puedes comprenderlo cuando lo vives… Y hacerlo por partida triple, es indescriptible, sobre todo, cuando no sabes que va a pasar en las próximas horas… ¡Aunque seas médico!” Milo— ¿Qué acaba de decir? — El padre de Awa se acerca a nosotros, ella vuelve a tener otra contracción y olvido por completo lo que debo hacer.El parto se le ha adelantado y saber que las niñas van a nacer tantas semanas antes del tiempo previsto me ha bloqueado y he olvidado todo lo que aprendí y practico todos los días en mi trabajo.— Señor, discúlpeme, pero en este momento no tengo tiempo para explicaciones — Observo cómo mis padres se han activado y mi tío, al que detesto un poco y que me odia con todas las fuerzas de sus entrañas, llega corriendo a nuestro lado con las manos recién lavadas.