Esas palabras para Valentina, fueron como un dardo mortal, el Dr. le había deseado suerte en su matrimonio y disfrute de su luna de miel, ya sabía que ella se había casado, ¿Qué estaría pensando de ella?La familia de Alberto, eran muy amables con Valentina y la trataban muy bien, sobre todo su madre, una mujer que le gustaba platicar y cocinar. En este poco tiempo de estar casados, Alberto solo había colmado de atenciones a Valentina, la trataba como a una reina y no le había siquiera insinuado que cumpliera sus deberes como esposa. En casa de su madre, dormían en la misma habitación, pero ella en la cama y él en un sofá, se habían convertido en muy buenos amigos y ya era hora de que Valentina supiera la verdad del porqué de este matrimonio.Augusto deseaba volver a caminar cuanto antes y recobrar su vida normal, asistía a sus terapias sin descanso, para olvidarse un poco de la mujer que tanto amaba, pero que ya no podían estar juntos, Valentina se había convertido en una obsesión qu
Augusto estaba más tranquilo ahora al escuchar estas palabras, aunque en el fondo sabía que ella jamás se acostaría con Alberto.Valentina se le acercó y le rodeó el cuello con su brazo libre del cabestrillo y, él bajó hasta su boca para besarla, también le rodeó la cintura con su también brazo sin ese molesto cabestrillo.- ¡Cuando esté en mi cama y sea completamente mi mujer, estas ropitas no se las quiero ver puestas, la quiero ver como Dios la trajo al mundo!- ¡Eso no será posible, Dr.! - dijo Valentina alejándose un poco.- ¿Por qué? Mi querida Dra.- ¡Puede ocurrir un incendio, un accidente, una inundación, truenos y relámpagos y nosotros ahí con todo al aire! ¿Cuándo ocurren estos casos las personas salen de sus casas, así como se encontraban durmiendo? ¡Esa es una mala idea!- ¡Dios, usted le mata la pasión a cualquiera!- ¡Solo digo que puede pasar algo! ¡Estando muy chica, me encontraba en mi habitación y había un bicho en el piso, corrí hasta la habitación de mis padres y
- ¡Usted y su hermano me utilizaron para demostrarle a su madre que él era todo un varón al casarse conmigo, todos en la casa sospechaban que él era gay, pero lo callaban hasta que usted me obligó a casarme con él!¡Al fin Alberto pudo descansar en paz, demostrándole a su madre que no era lo que todos pensaban!¡La tonta es usted al pensar que, si su hermano se casaba conmigo, Augusto me vería diferente, pero le recuerdo que tooodos, sabían lo que ocultaba su hermano a la familia,¿Quién es la tonta ahora?.- Dayan corrió a golpear a Valentina, pero Augusto salió de la nada y le tomó la mano.- ¿Eso es cierto? ¿Obligaste a Valentina a que se casara con Alberto y tú le entregabas a su padre?- ¡Esa mujer miente! - Gritó Dayan histérica.- ¡Estaba escuchando todo! ¿Cómo puedes ser tan mala! Lo de Alberto, todos lo sabíamos, era evidente, y al enterarme de que Valentina se había casado con él, supuse que había algo más de fondo, pero ¿no imaginaba que detrás de todo estabas tú? ¡Bueno, al
Augusto y Valentina prepararon la cena, estar el uno al lado del otro en la cocina, era como un juego de niños, risas, harina en la cara, y comentarios de ella que hacían carcajear a Augusto. Ya sus brazos se encontraban mucho mejor y pudieron, con cierta ayuda de una de las empleadas, preparar de comerPastas, pollo, ensalada y un buen vino y, sobre todo, la excelente compañía,- ¿Qué más le puedo pedir a la vida? - dijo Augusto sonriente.Ya era tarde y Valentina tenía que marcharse a su casa, el Dr. Augusto se ofreció a llevarla, conducirá el auto el mismo, puesto que ya se sentía mucho mejor.Hablaron de todo, menos de aquello tan importante que tenía Valentina para decirle al Dr.La ayudó a bajar del auto y antes de que ella se marchara la rodeo por la cintura, la atrajo hacia él suavemente y la besó, ella correspondió a sus caricias y apasionados besos.Se despidió de él, con una amplia sonrisa, se sentía feliz nuevamente al lado del Dr., rato después él la llamó a su móvil para
-Vámonos, hija, tu mami debe estar buscándonos! - le dijo Linda a su nieta, quien se encontraba triste.Al igual que Dayan, Linda también tomó a la niña de la mano y casi arrastras se la llevó, no le prestó mucha atención, ya que iba mirando la bolsa de medicamentos que llevaba, para sus complicaciones de salud.Al llegar a casa, abuela y nieta discutían, puesto que la niña estaba llorando. Valentina estaba preparando la comida muy entretenida en la cocina cuando escuchó a las dos.- Mamá, ¿qué sucede?- ¡Linda, está que lloriquea por todo, no sé qué tiene!. Al ver a la niña de inmediato, Valentina supo de quién se trataba.- ¡Susan! ¿Porque estás aquí? Mamá ¿dónde está, Linda? La madre de Valentina miraba a su hija de forma extraña, le preguntaba sobre la pequeña y la niña se encontraba ahí, justo al frente de ella. Al darse cuenta de que su madre no sabía nada de las dos niñas, intentó tranquilizarse. - Susan, ¿viste a Linda, la dueña de este unicornio?, la niña asintió con la cabez
El Dr. Augusto se estaba sintiendo terrible, no le gustaba ver sufrir a Valentina, menos que llorará por su culpa. Tenía que saber toda la verdad, lo que no entendía era porque el examen de ADN, hecho por Dayan, demostraba parentesco con las niñas. Había dejado a Valentina muy mal, por las palabras que le dijo, ahora ella estaba pensando que él no le creía y que le quitaría las niñas. La culpa que sentía en este momento, lo estaba torturando, si ella supiera que mientras lloraba, él deseaba abrazarla y limpiar sus lágrimas, la amaba por sobre todas las cosas y ella parecía no darse cuenta. Además, las palabras que dijo de - ¡Lo odio, Dr., lo odio! ¡Qué fuerte sonaron!No perdería tiempo, tenía que saber toda la verdad acerca de las niñas y para esto fue hasta la clínica, ahí tenían que decirle la verdad acerca de la inseminación y con el permiso de quien se había hecho ese tratamiento a Valentina. Lo que, si le enojaba, era que ella no confiaba lo suficiente en él, ya que desde un pr
La llegada de Valentina al apartamento, estar con su madre y sus dos hijas, la llenaron de mucha felicidad. Llevaba años queriendo estar así, pero la felicidad no estaba del todo completa, faltaba su padre, ya le habían dado información de dónde podía estar, y tenía que, después de buscar una casa, para poder instalarse, dedicarle tiempo a la búsqueda de su padre. Necesitaba que su felicidad porfía fuera completa.Martha conocía este apartamento donde se estaba quedando Valentina y su familia, y le preguntó la razón por la cual vivía aquí. Ella, aunque no del todo sincera, le dijo que había una persona que no la quería del todo, y le estaba causando mucho daño a ella y a su familia.La llegada de Valentina al apartamento, estar con su madre y sus dos hijas, la llenaron de mucha felicidad. Llevaba años queriendo estar así, pero la felicidad no estaba del todo completa, faltaba su padre, ya le habían dado información de dónde podía estar y, tenía que, después de buscar una casa, para po
La tristeza de Esmeralda también afectaba a Augusto, verla tan sola, tan desvalida, se mantenía ocupada cuidando del jardín, a sus mascotas, en ayudar a limpiar la casa, le decía a su hijo que quería estar al lado de su pequeña nieta, pero Augusto no sabía cómo reaccionaría al saber que no era solo una, sino dos. Ya no le daría más vueltas a este asunto y decidió llevar a su madre hasta la casa de Valentina, allí le diría la verdad.Linda, fue a abrir la puerta al escuchar el timbre, se encontró al Dr. Augusto acompañado de una mujer muy elegante, ella los invitó a seguir. En ese momento, una de las niñas corrió a acompañar a su abuela, pero al ver a los recién llegados, se detuvo. Esmeralda, al ver a su nieta, corrió a abrazarla, pero la niña se escondió detrás de Linda.- ¿Qué sucede contigo, mi amor? ¡Soy tu abuela, Esmeralda! - Augusto se dio cuenta de que la niña, no era Susan, y decidió atraerla para que abrazara a la que también era su abuela.- ¡Mi amor, ven, ella es tu abuela