Dionisio se levantó con un gran dolor de cabeza se levanto de su cama mientras buscaba algo de agua para calmar su sed, regreso de nuevo a su habitación y vio como un cuerpo se daba vuelta, sonrio al ver una cabellera castaño claro en eso un par de ojos lo vio asustada mientras gritaba más alto que podia sus cuerdas vocales.
- ¿Que haces en mi cama Dionisio?. - Preguntó asustada Paula.
- Eso te pregunto yo a ti.
Dos personas completamente distinta comenzaria su propia historia de amor.
(..........)
Doce horas atras.
Paula y Dionisio eran como el agua y el aceite.
Eran como el dia con la noche, eran como todas las cosas que podian ser opuesta; alfa y omega se conocian desde que era adolescente y ahora el trabajaba como asistente de el papá de la persona que no le agradaba, asi que todos los dias tenia que verle la cara mientras hacia sus pasantilla. Cuando podian ambos se hacian malas cara pero delante del pobre de Antonio eran los mejores amigos del mundo. Dionisio era una persona organizada y puntual, el orden era una de sus mejores caracteristica. mientras que Paula era el desastre andante. Antonio dejo sus papeles a un lado y vio serio a Paula quien sonreia como si nada al ver la molestia de su padre, Dionisio trato de disimular al ver como Paula chillaba en voz baja para apelar al enojo del alfa mayor.
- Irene ya hizo una familia, ya tiene un hijo, ¿Y tú que me has dado?.
- Papá. - Susurro. - Tengo que esperar que venga mi marca, sino jamás me cásate con la persona que los dioses eligieron para mi.
Antonio bufó al escuchar sus palabras.
- Paula ya casi vas para los treinta y no quiero que digan que eres una solterona por eso arregle una cita a ciega con el hijo de los Florys, su hijo acaba de regresar de Polonia y tampoco esta casado y se muere en conocerte.
Paula se cruzó de brazos y apretó las manos.
- ¡Yo no me voy a casar con ese hombre!, tú no eres quien mande en mi vida y menos en mis sentimientos, tu mismo dijiste que te habias enamorado de mamá a primera vista.
- Paula los tiempos han cambiado, quiero que vayas a esa cena y no me hagas pasar vergüenza.
Paula se dio la vuelta y salio de la oficina de su papá molesta, habia esperado tanto tiempo por conocer a su "Destinado", pero no habia encontrado a la persona correcta, aunque fuera algo raro de decir estaba celosa de su hermana mayor quién ya se habia casado no precisamente con su destinado pero si con un hombre que habia quedado viudo muy joven, tenian una hermosa familia y un precioso cachorro, cosa que ella no tenia. Observó sus brazos y dedos y vio que no tenia pero ni una tinta con el nombre de la persona que estaria a su lado para siempre. Paula suspiro triste y sintio el olor a madera fresca de Dionisio, este la miraba con la burla en los ojos, inmediatamente le saco la lengua y el dedo de en medio de paso, Dioniosio sonrio y beso la punta de su dedo haciendo sonrojar a la omega por el atrevimiento.
- ¡Que asco!. - Chilló con náuseas al ver su dedo mojado. - No se porque te ries, si tu tampoco has encontrado a tu pareja ideal. - Se burlo de el.
- ¿Y quien dice que no la he encontrado? - Dionisio sonrió con malicia al ver los ojos abiertos de Paula. - Hoy cenare con mi pareja, pero descuida no todos los dias se da la oportunidad de ver a nuestro destinado en la palma de nuestra mano. - Se rio con un toque de sarcasmo. - ¡Eres demasiado ingenua!, no sabia que creias en los cuentos de hadas.
Paula se cruzo de brazos y camino hacia la salida.
- Tú nunca lo entenderias.
.........
Juliana observó a Paula tirar casi su ropa al suelo al ver que no se decidia por cual vestido ponerse para su cita, se acercó a la pequeña que habia crecido en una mujer hermosa, acaricia su cabello con cariño y beso su mejilla.
- Hija no te estreses, después de todo eres muy bonita cualquier cosas que te pongas, te quedara bello solo confia un poco más.
- Papá espera que por fin me case, y la verdad estoy un poco ansiosa, tengo mucho miedo de no gustarle a la persona que me van a presentar ademas, es momento que deje de soñar es cosas de destino y eso y viva mi realidad.
Juliana la abrazó y tomó sus manos.
- El amor es algo muy hermoso pero a la vez complicado, algunas veces no sabemos el tiempo, y como sera la persona que estara a nuestro lado, solo llega y cuando lo hace te marca para toda la vida. - Sonrio. - Espero que esa persona que conozca sea tu destinado y sino lo es, hay muchas estrellas en el firmamento.
......
Paula observó con cierto nerviosismo el lugar en donde iba tener su cita, camino insegura mientras sonria a la recepcionista del lugar, después de unos minutos el mesero la habia llevado a la mesa donde estaria la persona que conoceria, apreto sus manos y vio que unas de las mesas estaba Dionisio y una mujer muy guapa, ambos se hicieron cara de asco y se sento en la mesa en eso una mano fría tocó su hombro, se sobresalto ante el toque y vio la sonrisa de un hombre muy apuesto.
- Hola, ¿Eres Paula Mars?. - Preguntó de manera galante haciendo que el corazón de Paula brincara de la emoción. - Disculpa por el retraso el waze me hizo dar vueltas en circulo prácticamente. - Sonrio apenado. - Soy Bran Florys ibamos a pasarla super bien.
Paula ya la estaba pasando bien con su presencia.
Jamás pensó que la iba estar pasando bien su cita, era una persona divertida y muy inteligente tenia los mismos gusto en todo, todo iba bien cuando vio algo en su muñeca, Paula achico los ojos para ver lo que decia y tenia el nombre de alguien más, y todo su buen humor se fue abajo, Bran lo notó y acarició su mano.
- ¿A ti tambien te obligaron a estar en una cita conmigo?. - Preguntó sin tapujo.
Bran se quedo en shock y luego sonrio con pena.
- ¡Lo siento mucho!. - Se disculpo. - Hace unos años me aparecio el nombre de mi destinado. - Habia oido bien era un hombre su destino. - El nombre de mi destinado se llama: Jael pero mi papá no quiere que este con alguien del mismo sexo que yo, dice que soy un extraño y enfermo pero realmente lo quiero mucho, la verdad no te mereces que te engañe de esta manera, no te lo mereces eres muy linda y agradable pero yo estoy enamorado de el, y aunque nos casemos ambos seriamos infelices.
Paula tomó su mano y sonrio.
- Lo mejor es que vayas con tu destino, no importa lo que digan los demas ellos no pueden controlar tus sentimientos, dile a tus padres la verdad y yo le dire a mi papa que en la cena te hice pasarla bien, solo te deseo lo mejor, te envidio porque tienes alguien a quien amar y yo... - Sonrio triste. - Mejor ve y tomó tu primer vuelo y lucha por tu amor.
Bran se levantó de su asiento y sonrio agradecido, Paula lo observo irse y sintio un vacio en su pecho al verlo irse, en eso alguien se sento en la silla donde estaba Bran ateriormente levanto la vista y vio a Dionisio este sonrio y tomó su copa de vino.
- ¿Y tu que haces sentado en mi mesa?. - Sonrió con molestia. - ¿Donde dejaste a miss tetanic?.
- ¿Acaso estas celosa Paula?. - Sonrio con sarcasmo. - ¿Y tu cita ideal?.
- Encontro el amor antes de la media noche como la cenicienta ahora se fue detrás de su pareja antes que el avión se convierta en una calabaza. - Respondió con tristeza.
- Lo siento no queria burlarme, osea si queria pero no si me respondes de esa manera, ¿Te gustaria ir a tomar un trago conmigo?. - Se levanto de su asiento y extendio su mano. - A mi tampoco me fue tan bien, ¿Que dices?.
- Esta bien.
(........)
Llevaba años que no visitaba un bar, ambos hablaron como lo que no eran, "amigos", empezaron a contarse sus anecdotas de amor tan fracasado como sus examenes de matematica, bailaron y sonrieron olvidandose de que habian pasado una mala noche, Paula cerro los ojos y puso su cabeza en el hombro de Dioniso.
- Sabes no eres tan feo. - Hablo con la lengua casi pegada. - Si me pongo de perfil te ves igual de guapo que Chris Evans. - Rio en voz baja.
- Tú tampoco estas feas, te pareces a lady gaga. - Se burlo de ella. - Ya enserio no eres tan fea, ahora mejor vamonos que mañana hay que ir a trabajar.
Ambos se levantaron y caminaron hasta la salida, Paula golpeó su frente tan fuerte que pensó que se habia hecho una fractura.
- No puedo llegar asi, me van a matar mejor llego asi mañana y no me diran nada.
- Entonces vamos a mi apartamento.
Llegaron al apartamento y Paula sintio el olor suave del alfa, ronroneo gustosa al sentir un olor tan comodo en el ambiente, siguio a la fuente donde provenia el olor y sin pedir permiso entro a su habitación, se tumbo en la cama y abrazo la almohada y aspiro mas el olor del alfa que se habia tomado la molestia en invitarla a su casa, Dionisio se tumbo a lado de ella y tomó su mano y vio que tenia las manos muy pequeña. Paula rio en voz baja al igual que el.
- Si los dioses me escuchan desearia que tu fueras mi omega y tener tu nombre tatuado en mi piel para siempre. - Hablo medio dormido Dionisio mientras apretaba más su mano y la ponia en su pecho.
- Espero que sea asi alfa. - Respondió prácticamente dormida.
Ambos quedaron dormido sin saber que unas simples palabras de borrachos los uniría para todo la vida.
Paula llevaba tiempo que no se sentia tan cómoda durmiendo con el alguien más, por una extraña razón se sentía segura hasta protegida, pero todo esas emociones se fueron al demonio cuando abrió los ojos y se dio cuenta de la verdadera realidad en la que estaba viviendo. Estaba en una habitación desconocida, su cuerpo apestaba a alcohol y a sudor por tanto bailar y sobretodo alguien la estaba abrazando con tanta fuerza que quizás ya habia perdido dos costilla más de las que tenía. Se dio la vuelta en la cama y tanto fue su asombro de ver a Dionisio en la misma cama durmiendo; ajeno de lo que estaba pasando, le dio la espalda y empezó a hacer un mapa conceptual en su mente, de todo lo que habia pasado. Y según su buena memoria y la resaca que le estaba dando los buenos días con un tango en la cabeza acompañado de dos quebraditas y un hip-hop. Habia bebido con su "Enemigo", porque estaba t
Antonio tenia abierto tanto los ojos como la boca después de haber escuchado las palabras que salian de la boca de su hija, Irene aplaudio sorprendida mientras que su marido palmeaba la espalda de su cachorro para que pudiera dormir. Juliana en cambio estaba sonriente y bailaba a escondida de los presentes para que nadie notará su felicidad. Paula estaba aún insegura de lo que estaba diciendo y de lo que iba hacer, todo lo contrario a Dionisio quien actuaba con tanta tranquilidad como si hubiese anunciado su pase a la carrera de sus sueños.- ¡Gracias dioses del cielo!. - Exclamó emocionado Antonio mientras que se levantaba de su asiento. - No sabes lo feliz que estoy por ver a la mimada de Paula elegir a alguien, parece que ayunar sirve para algo al parecer han oído mis plegarias. - Sonrió alegre. - Esto merece la mejor fiesta de compromiso, ¿Y cuandos se casa?, ¿Ya estas esperando cachorrros?, ¿Se a
Paula estaba demasidada nerviosa para su gusto a pesar de que no habian planeado lo suficiente para que fuera la boda que tanto habia soñado, todo aparentamente habia quedado perfecto, su hermana le habia ayudado con los arreglos de las flores, Juliana se habia encargado de la comida y el pastel, Dionisio en buscar la reservación para el gran día y su papá en estar al pendiente de algunos detalles y es que a pesar de que estaba a unas horas de dar el maravilloso. ¡Si acepto!. Dionisio no habia invitado a nadie de su familia, la realidad es que no habia nadie, solo habia invitado a tres amigos cercanos y uno que otro compañero de trabajo además que tampoco habia mencionado a su familia en el rato que llevaban juntos lo que parecia algo extraño, porque a pesar de que ambos no estaban enamorado era importante conocer a la familia de la otra persona, pero al parecer su futuro esposo al igual que la marca que tenia en el cuerpo era un completo misterio.Irene tocó la puerta varias
Alfa y omega se vieron con cara de poker al verse en interiores.- ¿Ya es hora del postre?. - Bromeó Dionisio.Sabia que esa noche iba ser larga para ambos, o al menos eso pensaron los dos.(.......)Paula estaba en estado de shock, se sentía avergonzada de ver a un hombre desnudo, obviamente ella no era virgen pero habia pasado tantos años que habia tenido intimidad con alguien del sexo opuesto. Paula tomó la cobija y se cubrió el cuerpo, Dionisio alzo la ceja con confusión y se cubrio la boca en eso escucho la risa de su ahora ya esposo, Paula lo miro fijamente mientras que se cruzaba de brazos y esperaba que el dejara de reírse realmente se estaba empezando a molestar, Dionisio alzó la dos manos en señal de paz y sonrió con burla.- Descuida Paula no me voy acostar contigo, el hecho que estemos en un hotel y sea nuestra luna de miel, no necesariamente significa que vayamos a tener sexo. - Dionisio se acostó en la cama y espero que ella se acostará ta
Luego de su extraña luna de miel ambos llegaron al apartamento de Dionisio ya que Paula aún vivia con su padre no tenia un espacio propio, Dionisio dejó las maletas en la entrada y camino por su apartamento, todo lo contrario a Paula que estaba en una esquina nerviosa por entrar, se sentía extraña estar en un lugar que no era su casa. Dionisio se dio la vuelta a ver que su esposa no habia pasado ni siquiera a la sala, este suspiro cansado y se acerco hacia donde ella estaba, tomo su mano y la adentro a su apartamento en lugar que estuviera en la entrada, Paula se sorprendió al ver lo ordenado que estaba no era comparado a como se lo habia imaginado, en su mente loca se imaginaba un cerró de ropa sucia en los sofás, calcetines y ropa interior en el suelo y una montaña de platos en el fregadero pero al parecer la realidad habia superado de nuevo la ficción. Se sentó en el sofá y le gustó lo cómoda que este era, cerró los ojos cuando su ahora ya esposo le habia pasado una botella de ag
Cuatro semana después.Todo era común y corriente.Paula no habia notado ningún cambio en su relación, algo que sintiera que algo habia hecho un contraste en su vida pero al parecer esos cambios solo pasaban en el horario del autobús o de la televisión con la programación. Absolutamente nada especial habia ocurrido en su "Mágico matrimonio". Dionisio era el mismo trabajolico y perfeccionista en el trabajo a excepción que casi no discutían por no ponerse de acuerdo en un caso o en algo, llegaban juntos al apartamento y cada quien estaba en su propio mundo, solo hablaban cuando iban a cenar y después para domir donde se decian un escueto: ¡Buenas noches!. Tampoco desde aquel fenómeno sobrenatural el habia intentado propasarse, es más era reacio algunas veces a los coqueteos indirecto que le hacia. La omega no podia entender como se iban a enamorar si el alfa no la determinaba. Paula se estaba frustrando de su farsa de matrimonio, ya que se estaba iendo al demonio.Pa
- Tú esposa es muy hermosa. - Sonrió con amabilidad pero eso asustó a Paula.- ¡LARGO DE AQUI!. - Habló con voz fuerte.- Hijo asi no le hables a tu papá.¿Su papá?. Pensó Paula.(........)Paula podia sentir la ira palpable del alfa, sus feromonas estaban vueltas locas por toda la molestia que sentía al ver la presencia del alfa mayor, Paula tomó la mano de su esposo y abrio la puerta del apartamento que ambos compartían, Dionsio ni siquiera se inmuto en darse la vuelta y despedirse del alfa solo entró, escuchó un bufido del otro alfa, Paula lo observó y sonrió con amabilidad.- Es la primera vez desde que lo conozco que esta muy molesto, discúlpeme que le diga esto pero, no vuelva aparecer aqui, su presencia no es de su agrado. - Hizo una reverencia rápida, signo de respeto entre los menores hacia las personas mayores, el alfa acarició el hombro de la omega.- Es mejor que no interfieras omega. - Respondió con desprecio. - Hay cosas que es
Dos semana después.Cada día la relación entre la pareja iba aumentando cada día más, el problema era que el papá de Dionisio habia vuelto a insistir en ver a su hijo algo que molestaba al alfa, porque no soportaba la presencia del mayor pero quitando esos malos encuentro, su relación entre ellos iban mejorando los besos casuales mientras se daban los buenos días o las buenas noches terminaban en besos apasionados dejando a la pareja con gana de más, pero ninguno de los dos rompían el hielo para dar rienda suelta a sus deseos, y a pesar que intentaba subir al siguiente nivel algo sobrenatural pasaban como: Una vez que se estaban toqueteando en el sofá mientras miraban una pelicula animada, el televisor empezó hacer sonidos extraños mientras pasaban algunas imagenes de miedo, Dionisio se separó de su cuerpo y todo volvió a la normalidad. La segunda vez se besaron mientras cocinaban y los utensilios de las cocinas empezaron a volar asustando al matrimonio. Y la ultima vez