Luego de su extraña luna de miel ambos llegaron al apartamento de Dionisio ya que Paula aún vivia con su padre no tenia un espacio propio, Dionisio dejó las maletas en la entrada y camino por su apartamento, todo lo contrario a Paula que estaba en una esquina nerviosa por entrar, se sentía extraña estar en un lugar que no era su casa. Dionisio se dio la vuelta a ver que su esposa no habia pasado ni siquiera a la sala, este suspiro cansado y se acerco hacia donde ella estaba, tomo su mano y la adentro a su apartamento en lugar que estuviera en la entrada, Paula se sorprendió al ver lo ordenado que estaba no era comparado a como se lo habia imaginado, en su mente loca se imaginaba un cerró de ropa sucia en los sofás, calcetines y ropa interior en el suelo y una montaña de platos en el fregadero pero al parecer la realidad habia superado de nuevo la ficción. Se sentó en el sofá y le gustó lo cómoda que este era, cerró los ojos cuando su ahora ya esposo le habia pasado una botella de ag
Cuatro semana después.Todo era común y corriente.Paula no habia notado ningún cambio en su relación, algo que sintiera que algo habia hecho un contraste en su vida pero al parecer esos cambios solo pasaban en el horario del autobús o de la televisión con la programación. Absolutamente nada especial habia ocurrido en su "Mágico matrimonio". Dionisio era el mismo trabajolico y perfeccionista en el trabajo a excepción que casi no discutían por no ponerse de acuerdo en un caso o en algo, llegaban juntos al apartamento y cada quien estaba en su propio mundo, solo hablaban cuando iban a cenar y después para domir donde se decian un escueto: ¡Buenas noches!. Tampoco desde aquel fenómeno sobrenatural el habia intentado propasarse, es más era reacio algunas veces a los coqueteos indirecto que le hacia. La omega no podia entender como se iban a enamorar si el alfa no la determinaba. Paula se estaba frustrando de su farsa de matrimonio, ya que se estaba iendo al demonio.Pa
- Tú esposa es muy hermosa. - Sonrió con amabilidad pero eso asustó a Paula.- ¡LARGO DE AQUI!. - Habló con voz fuerte.- Hijo asi no le hables a tu papá.¿Su papá?. Pensó Paula.(........)Paula podia sentir la ira palpable del alfa, sus feromonas estaban vueltas locas por toda la molestia que sentía al ver la presencia del alfa mayor, Paula tomó la mano de su esposo y abrio la puerta del apartamento que ambos compartían, Dionsio ni siquiera se inmuto en darse la vuelta y despedirse del alfa solo entró, escuchó un bufido del otro alfa, Paula lo observó y sonrió con amabilidad.- Es la primera vez desde que lo conozco que esta muy molesto, discúlpeme que le diga esto pero, no vuelva aparecer aqui, su presencia no es de su agrado. - Hizo una reverencia rápida, signo de respeto entre los menores hacia las personas mayores, el alfa acarició el hombro de la omega.- Es mejor que no interfieras omega. - Respondió con desprecio. - Hay cosas que es
Dos semana después.Cada día la relación entre la pareja iba aumentando cada día más, el problema era que el papá de Dionisio habia vuelto a insistir en ver a su hijo algo que molestaba al alfa, porque no soportaba la presencia del mayor pero quitando esos malos encuentro, su relación entre ellos iban mejorando los besos casuales mientras se daban los buenos días o las buenas noches terminaban en besos apasionados dejando a la pareja con gana de más, pero ninguno de los dos rompían el hielo para dar rienda suelta a sus deseos, y a pesar que intentaba subir al siguiente nivel algo sobrenatural pasaban como: Una vez que se estaban toqueteando en el sofá mientras miraban una pelicula animada, el televisor empezó hacer sonidos extraños mientras pasaban algunas imagenes de miedo, Dionisio se separó de su cuerpo y todo volvió a la normalidad. La segunda vez se besaron mientras cocinaban y los utensilios de las cocinas empezaron a volar asustando al matrimonio. Y la ultima vez
Sonrió con elegancia mientras observaba con atención su rostro y la belleza del mismo, tocó sus pechos y jadeo excitada, escucho unos pasos detrás de ella y detuvo su propios toqueteos.- ¿Estas listas para hacer pecar a los humanos?. - Preguntó con voz fuerte.La mujer se dio la vuelta y caminó con coquetería ignorando las palabras del mayor.(....)Paula tocó la frente de su papá por sexta vez de la preocupacion, Antonio habia caido repentinamente en una fiebre que no lo dejaba moverse a su antojo, sus hijas estaban casi al borde de un colapso nervioso por la enfermedad de su padre, las medicinas al parecer no hacian efectos en el, Juliana hacia de lo imposible probando algun remedio caseros que miraba en Youtube o que alguna vecina le recomendaba, pero la salud del alfa mayor cada vez iba peor. Paula se habia quedado tres días atendiendo a su papá mientras este algunas veces deliraba de las grandes fiebres, la omega nunca habia sido una persona muy religio
Cuatro horas atrás.Paula se quedó como piedra al ver el hambre en los ojos de alfa, nunca habia visto uno en celo y al juzgar sus feromonas Dionisio no tendria misericordia por ella. Paula caminó hacia atras hasta que chocó con la pared que estaba cerca de su habitacion, tragó saliva con nerviosismo para controlar la ansiedad que se estaba alojando en su cuerpo.- Dionisio, tranquilo cariño. - Susurro Paula con miedo al ver el deseo en los ojos de su pareja. Dionisio gruñó y la apegó a su cuerpo.- Hoy nadie va arruinar este momento entre nosotros.(.......)Antonio no era ni una sombra del hombre que habia estado en cama por varias semanas, caminó de nuevo a su trabajo en dónde todos lo recibieron alegre al ver la energía inquebrantable del alfa, Paula asesoró algunos clientes cuando volvio a sentir un olor dulzón en el aire, su omega internó gruño molesto al recordar ese olor tan desagradable. Paula se levantó de su asiento mientras se disculpaba con
Paula entró a la oficina como todos los días cuando observó un silencio sepulcral en el lugar, miró desconcertado a todas las personas cuando alguien se acercó a ellos con los ojos llorosos, Dionisio estaba igual de extrañado en eso una de las abogada tocó el hombro de la pareja. Martha era una amable beta que se desesmpeñaba como abogada laboral con más de quince años de experencia y que igual habia puesto el nombre del buffet en alto. La mujer sonrió con tristeza al ver la confusión en los de los ojos de Paula y Dionisio.- Ha pasado algo muy horrible. - Miró el escritorio de Arriety con pesar. - Ayer la mamá de Arriety me llamó para decirme que había tenido un accidente de auto y estaba mal en el hospital. - Paula abrió los ojos sorprendida por sus palabras. - Pobre chica, espero que pueda salir pronto.- ¿Y donde está Eva?. - Preguntó Paula desesperada. - ¿Ella aún no ha venido?.La beta negó, Paula salió de la oficina seguida por su esposo, Dionisio la tomó de
Dos semana después.Pov Dionisio.¡Lo odiaba pero a la vez sentia mariposa en el estómago!.Era dos cosas muy completas contradictorias en el interior de el alfa, estaba maravillosamete feliz y cada vez que miraba un destello de celos en el rostro de su pareja cada vez que miraba a Eva o los miraban juntos por cosas de trabajo. Conocía el carácter seductor de la omega pero desde que se conocieron y hasta el momento el le habia dejado en claro que estaba feliz con su matrimonio y que no iba dejar que un desliz arruinará lo poco que habia construido con su esposa. Pero por otro lado senti un ardor en el estómago cada vez que miraba al estúpido de Samuel acercarse a su esposa, el alfa a pesar de que no le coqueteaba directamente a Paula sabia que cada vez la miraba habia algo en su mirar que lo hacia sentir ansioso y molesto, siempre llegaba a la oficina de Paula con la excusa de ¿Me ayudas a leer esto o te necesitó Paula?. Cosa que Dionisio detestaba con todo su ser,
Ammon tenia una sola cosa en su mente y era ver muerto a la diosa que tenia ante sus ojos, Afrodita chasqueó su dedo y liberó una espalda del mismo tamaño que él tenía entre sus manos, a pesar de que en su versión angelical su belleza era insuperable. tenia un cabello roijzo como el fuego y cada vez que el viento se movia parecia un rio de lava en él, sus ojos era azules como el mar y intensos como uno embravecido. Afrodita era todo lo contrario a Sytri su belleza era algo más erótico sin llegar a lo vulgar. El demonio alzó su espada para atacarla pero ella lo esquivó con demasiada rapidez para su gusto, sabía que no estaba con un mísero ángel sino con una diosa y que su energia espiritual era más elevado, asi que la pelea estaría demasiado tedioso para su gusto por lo menos valdria la pena con tal de tenerla a sus pies suplicando por su vida.- ¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez que peleamos juntos?. - Habló Ammon con voz sardónica, tenia una especie de amor y odio