Charlie
Observé las imágenes que salían en el televisor de su oficina, habían cuerpos flotando en el agua, autos destruidos, casas derrumbadas, escombro y ruina.
—Estoy viva Edward, mi hija está viva —las lágrimas rodaron por mis mejillas y Edward se levantó de su escritorio para rodearlo y sentarse sobre él y frente a mí.
—Cuando Will me informó que estabas en Waikiki mientras la tercera ola hacía impacto… Dios niña, casi haces que a este viejo le dé un infarto, aún recuerdo la primera vez que te vi, querías estar en todos los trabajos de campo, querías revisar todos los sismógrafos, estabas tan llena de energía, con tantas ganas de aprender, pero también estabas tan rota. Pensé que era por tu estado, pero luego Kwon me contó el verdadero motivo de tu t
Charlie.—¿Mi papi? —Kai me observó confundida, pero antes que pudiera decir algo Nate habló.—Sí cariño, yo soy tu papi…— él se acercó un poco más. Y Kai se alejó un paso.—¿Kai? — dijimos ambos al tiempo ante la reacción de Kai.Le hice una señal con mi mano a Nate para que dejara de avanzar y acaricié la mejilla de mi dulce niña.—Nate ha venido desde muy, muy lejos a verte bebé, él te quiere mucho y quiere ser tu papi—le hablé con voz baja y suave.—¿Me quiere? — la voz de mi niña fue pequeñita.—Te amo —la voz de Nate se quebró y mis propios ojos se llenaron de lágrimas. Él extendió su mano hacia ella, pero ella volvió a dar un paso a
CharlieLa imagen en la pantalla cambió y esta vez la cámara enfocaba la vista del flujo de lava emitida por Kilauea y cómo esta fluía por el mismo camino de hacía un año hasta llegar a la costa norte, justo a unos pocos metros del túmulo que se había formado el año anterior y había dado como resultado una nueva isla para el archipiélago.La imagen cambió mostrando cómo el magma había atravesado patios y calles de la isla y quemado decenas de casas y seguía avanzado bajo tierra unos 40 kilómetros al este, mientras en el cráter, el volcán seguía lanzando ceniza a entre 3.600 y 4.500 metros de altura.Esperaba que esta erupción fuese más corta que la del año anterior, me preparé una taza de café para empezar el día y tomé uno de los informes del
Nate.—¿Te vas?—El canal dispuso de mí, ha enviado los tiquetes para mi equipo y me han conseguido un vuelo para hoy, un nuevo equipo se está haciendo cargo de cubrir lo que pasó en el tsunami y con el volcán. No puedo negarme, mis documentos están en tu departamento bajo el agua aún, no tengo dinero y no pienso aceptar más nada que venga de parte de tu amiguito.Ella ignoró la manera en que llamaba a William. En cambio, se levantó del escritorio y lo rodeó para sentarse en la silla de cuero que había tras el mismo.—¿Y Kai? —Preguntó después de unos segundos de silencio.—Por eso te estaba buscando, necesito que nos pongamos de acuerdo en cuanto a la manutención.—¿Me estás hablando de dinero? —levant&oac
Charlie. Me tomó media hora calmar a Kai, en mi interior quería picar a Nate y luego sumergirlo en alcohol, ¿simplemente no podía esperar a que fuese yo quien se lo dijera? Al final Kai se había quedado dormida después de llorar. Eran casi las dos de la tarde, las habitaciones en el hotel que Will había conseguido ya estaban desocupadas por lo que nos mudaríamos momentáneamente ahí, el observatorio pagaría mis gastos debido a que mi departamento estaba completamente destruido. También la junta había decidido adelantar mis vacaciones cuando el doctor Louis expuso mis pesadillas y Jagger había comunicado cómo afronté el tsunami.Tendría un mes de vacaciones y la junta había recomendado que por ese mes era preferible que saliera del archipiélago. Cheung y Jagger sabían que si me quedaba
Charlie. Kai empezó a llorar una vez Nate desapareció por completo, llamándolo con sus manos y removiéndose entre mis brazos, mientras sollozaba, me senté sobre una de las sillas y la alejé de mi pecho prometiéndole que pronto iríamos a verlo, comprometiéndome a ir a Nueva York y ver al único hombre por el cual había sentido amor entregarse a otra mujer.Eventualmente nos dirigimos al hotel, con una Kai molesta pero más tranquila, Will lamentó no poder quedarse, pero lo entendí, había un volcán haciendo estragos, además que lo prefería así, Kai y yo necesitábamos tiempo. No había sido fácil volver a decirle adiós a Nate. Una vez estuvimos en la habitación le di una ducha a Kai a pesar de que estaba en modo berrinche, pedí algo de comer
Charlie—sé que tú aún sientes cosas muy fuertes por Nate, Charlotte, tienen una hija juntos, deberían dejarse de tonterías, besarse y tener más bebés al final hasta les salen bonitos. —Me reí, porque él lo hacía sonar tan fácil…—Eso es lo más tonto que te he escuchado decir. —lo miré fijamente y él se quitó las gafas para devolverme la mirada.—¿Tonto? Tonto es que lo quieres y vas a dejarlo ir de nuevo ¿O estoy equivocado?—Él va a casarse — dije lo que Nate me había mencionado.—Aún no lo ha hecho. —Ry se encogió de hombros —Solo es que tu vayas y lo impidas.—¿Y quién te dijo que yo quiero impedirlo?—Vamos Charlie, he estado hac
NatePara cuando el avión aterrizó en el JFK, había tomado cerca de seis vasos con whisky doble, pero no estaba tan ebrio como lo hubiese deseado, quise marcarle a Kai, pero en Hawái debían ser las dos de la mañana, como no tenía más equipaje que una bolsa de lona con una muda de ropa, caminé directamente del avión a la sala de llegadas donde Jess me había estado esperando.Ella era simplemente hermosa, siempre había podido apreciarlo, pero no sé si era el alcohol en mis venas o los recuerdos de un pasado que quería volvieran a desaparecer lo que me hizo desear que fuese Charlie la que me esperaba, como en los viejos tiempos. Ella sonrió al verme salir con los demás pasajeros, empezando a caminar en mi dirección, imaginé que cuando estuviéramos frente a frente le soltaría de un solo
Charlie.Mientras observaba el mar debajo de nosotros desde la ventana del avión, no podía dejar de pensar si realmente estaba haciendo lo correcto, no había querido volver a Oahu, ni ver en qué estado había quedado realmente mi departamento, aunque la aseguradora se había comunicado conmigo para informarme que el edificio era una pérdida total.En las noticias, solo transmitían el caos, la ruina y cómo el agua retornaba a su lugar poco a poco. El número de muertos aumentó drásticamente tres días después de la tragedia, los heridos de gravedad estaban siendo trasladados a las diferentes islas del archipiélago ya que no todos podían ser atendidos en los hospitales. Hawái se enfrentaba a uno de los desastres naturales más grandes de todos los tiempos, no había sucedido algo así desde el