Briana no contestó a la declaración de Kevin, salió de la ducha y se cubrió con una toalla, tenía miedo de que luego Kevin le dijera que lo mejor era no marcarse de nuevo. Kevin la miró esperando su respuesta, pero ella en cambio lo abrazó fuerte y puso su rostro contra su pecho escuchando los latidos de su corazón, para ella ese era el sonido más relajante en el mundo, algo que le recordaba cómo se sentía protegida por su padre, pero aún mejor, porque a Kevin lo sentía de ella. —Por un momento yo también pensé que moriría —dijo en voz baja Briana y Kevin la apretó en sus brazos dandole un beso en el cabello—. La madre de Agata, Teodora quería matarme, estaba celosa porque August le pidió llevarme, pero yo prefería morir que ir con August, claro que era mejor matarla y Kila se encargó. Kevin la separó de su pecho sorprendido. —¿Mataste a Teodora? Briana afirmó con la cabeza sonriendo. —Así es y Agata encerró a August y sus hechiceros en el refugio a donde fueron ba
En África, en el refugio improvisado. Arthur estaba dormido en el suelo junto al catre de Emma cuando el aroma intoxicante de ella lo hizo despertar. «Mía, mi loba, necesitamos reclamarla» Arthur era un hombre callado y mal encarado, amaba la guerra, pensaba que un buen golpe adiestraba más que una advertencia, en realidad él y Bradley eran la combinación perfecta para Kevin, Bradley era el diplomático y Arthur la fiera. Pero su lobo tenía un carácter apasionado e impaciente, algo característico en seres con esta actitud, en este momento Anko le ordenaba marcar a Emma a la fuerza de ser necesario. «Domina a tu hembra humano inutil, mi loba me necesita y yo a ella» Arthur observó a Emma en el momento en que ella abrió sus ojos, aunque no lo veía, porque seguía ciega, la tomó en sus brazos y la sacó fuera del refugio. —¿No me dirás nada?, ya Kevin y Briana se han marcado —dijo Arthur de mala gana, quería que ella no fuera con él como es después que supo que eran parejas,
Bradley se dio cuenta de que Arthur se había llevado a Emma, no se movió del refugio, pero estaba despierto, molesto por su suerte. «¿Por qué tenía que enamorarme de la mujer de mi amigo?» —pensó Bradley y su lobo Valta siempre muy sabio lo reconfortó. «Ella no es nuestra mate, solo la que parecía ser más idónea» Bradley se echó a reír con ironía y salió del refugio, no se atrevió a alejarse demasiado y dejar a Kiara desamparada, miró al cielo viendo la luna detrás de las nubes, como si la diosa quisiera esconderse de él. —Diosa, no es mi intención ser inconforme, pero era yo quién deseaba tener una pareja, ni Kevin ni Arthur querían saber nada al respecto; fui yo quién te rogué que apareciera la pareja de Kevin. ¿Dónde está mi loba? —Quizás no es loba tu pareja destinada… Brandley volteó con actitud defensiva y entró en fase de cambio, la voz era de mujer, se detuvo apenas porque aunque no detectaba que quisiera atacar era una hechicera que venía del refugio. —¿
Briana y Kevin estaban por salir a New York, la madre de Briana, Thalia se comunicó con ella, estaba muy angustiada porque Sophia había salido con su novio hacía tres días y no sabía nada de ella. Briana se sentía mal por su hermana. —Yo no tengo idea de qué hacer con Sophia —expresó angustiada—, la muerte de mi padre la cambió por completo. —¿Cuánto le falta a tu hermana para su primera transformación? —preguntó Kevin. —Solo unos días —respondió Briana y levantó los ojos para ver a Kevin, él tenía las manos en los bolsillos y sus ojos fijos en ella. —Briana, aunque ella tiene 15 años de vida no es una niña, es decir, lo es, pero me refiero que en nuestra especie llegar a 16 años equivale a unos 21 o hasta 25 años humanos, ella está rodeada de humanos, es más fuerte que un humano común y la acompaña su novio que asumo es licantropo. —Sí, es un heredero Alfa, pero su manada matriz no nos apoya y recuerda que mi hermana está inválida. —Vayamos allá y la encontra
A Briana le cayó bien el humano, pero en definitiva sólo vendería casas, su madre no estaba para nada interesada. Después de almorzar y que Briana hiciera una cita con Matthew para ver casas lo despidieron. Briana se reía a carcajadas. —Mamá, traes a ese hombre enamorado. —Es una lata, yo trato de ser fría y sólo educada, pero cada cosa que hago le parece más interesante ¡puaj! es un fastidio. Briana dejó de reír y tomó sus manos. —Eres muy bella mamá, por donde pases conseguirás a muchos Matthew interesados —Briana reía por la cara de desagrado de su madre—. Recientemente me enteré que hubieron algunos elegidos para tener más de una pareja destinada en el pasado —Briana la miró ahora con seriedad—; en cuanto lo escuché me pareció abominable, pero al escucharte que te sientes sola y presa en el mundo, quizás sea bueno que pudieras conocer a alguien más, aunque sea como compañía para combatir la soledad. A Thalia se le humedecieron los ojos. —Yo agradezco que pi
Kevin llevó a Jay a un restaurante, el rogue comía con entusiasmo. Kevin lo observaba, sabía que el muchacho tenía muy poco y que cuidaba de su madre y hermanos menores, ya que su padre había muerto. —Jay, ahora que tengo a mi luna, lamento profundamente lo que sufriste por mi culpa, quisiera resarcir de alguna manera el daño, pero es difícil que confiemos uno en el otro. —Aunque creas que mi motivación fue volverme poderoso para enfrentarte y vengarme, no lo hice pensando en ti. En realidad no hace falta, tú eres uno de los principales objetivos y tus días están contados —Jay seguía comiendo y Kevin cada vez lo admiraba más, el hombre tenía pelotas, pues aunque le temía no se contenía—. Está en el ojo del huracán, Alfa, no te han atrapado porque ordenaron no tocar tu corazón y para los rogues desquiciados es muy difícil resistirse. —¿Por qué no te hiciste abominable? —preguntó Kevin. Jay negó con la cabeza. —No pude hacerlo, me ordenaron comer el corazón de mi Alfa
Para Bradley era una prueba de fuego lo que estaba pasando, él accedió a ser un canal para traer de vuelta a Kiara, incluso estaba preparado para hablar con ella en algún recoveco entre la conciencia que te ata al plano físico y el siguiente paso. Para lo que no estaba preparado era para que lo arrastraran a un pueblo de hechiceros; y lo peor de todo era que no veía a Kiara por ninguna parte y más importante para él, tampoco veía la salida. —¿Qué buscas aquí, lobo? —preguntó un hechicero con desconfianza a Bradley. —Busco a una hechicera, creo que es bastante obvio. —Este no es lugar para licántropos —exclamó una mujer más allá, otra sujetó a un pequeño niño con miedo de Bradley. Bradley se dio cuenta que no solo él estaba asustado. —Vengo en paz —objetó Bradley—, solo necesito encontrar a una chica y podremos irnos de aquí. —Sí esa chica está aquí es porque ya su tiempo en el plano físico pasó —exclamó una anciana sentada en una especie de trono que hacía e
Kevin convenció a Emma de volver, en cuanto llegaron al refugio, Bradley estaba de cuclillas y sostenía la mano de Arthur, angustiado por su amigo. Miró a Emma llegar con Kevin, ella venía con muy mal semblante, sufría, más no como Arthur. —Hermanos, déjenme morir, por favor —suplicó Arthur—. Estoy seguro que ya he puesto mi cuota de estupidez al mundo, incluso dañé a la mujer que la diosa me regalaba, con ello terminé de desperdiciar mis dones. Kevin se puso de rodillas junto a su compañero y tomó su mano. —Arthur, hemos cometido errores, pero en nuestro paso por este mundo no lo hemos hecho todo mal… —Yo sí mi Alfa, yo dañé a mi mujer… —Yo también —expresó Kevin—, lo hice de la peor manera… —No es igual, tú no eras consciente de lo que hacías… —Tú tampoco lo eras, no querías que ella hiciera lo que hizo, querías que fuera feliz sin ti. —Aún lo deseo, estoy seguro de que la diosa puede perdonarla y darle otro mate, porque yo soy un abominable y la hice a el