—No puedo aferrarme a ti Kevin, no es correcto para ninguno de los dos. —Por ahora estamos en el mismo barco, luego que puedas recuperar tus dones seguirás tu camino, seguro conocerás a tu pareja destinada —Kevin sonrió—, quizás Baly quiera morderlo. —¿Solo Baly? —preguntó Briana con un hilo de voz. —Es seguro que estaré de acuerdo con mi lobo. —Ojalá pudiera detectar lo que sientes por mí, así como tú te enteras de lo que siento yo. —Cariño, si pudieras percibir lo que me haces sentir no estaríamos aquí conversando como tontos. Briana arrugó la cara. —Pues mejor así —Briana se deshizo de su abrazo y limpió su cara con su camisa—. Estoy terriblemente avergonzada por lo que siento por ti, creeme que no sé como explicarlo, pues la mayoría del tiempo no me agradas, creo que se debe a que es la primera vez que alguien que no sea mi familia me toca. Kevin la miró elevando sus cejas. —¿Te refieres al sexo? —No me hables de eso por favor —expresó Briana con de
Kevin abrazó a Briana, podía escuchar el ritmo desbocado de su corazón, pero no era por nerviosismo por él, era la respuesta del cuerpo a la infección, su piel caliente sudaba, más no eliminaba la fiebre y el olor de las bacterias le indicaba a Kevin que la cosa no estaba bien.Baly permanecía callado, más su miedo Kevin podía percibirlo. —Papá —murmuró Briana derrepente. —¿Briana? Ella no lo veía, sus ojos estaban cerrados. —Arrancaron tu corazón, yo vi tu pecho vacío, como puedes estar aquí, ¿vienes a buscarme?, no…, debo vengar tu muerte, no quiero morir. Un sentimiento de deja vu se apoderó de Kevin y se estremeció. —Ya Briana, estás a salvo. —¿Kevin? —Sí, aquí estoy. —No me hagas daño. Kevin no pudo soportarlo, se levantó y al abrir la puerta ya venía Ron cargado de indumentaria médica. Kevin le dio paso. —Dice incoherencias —murmuró Kevin. El médico no le hizo caso y empezó a conectar a Briana a aparatos para leer sus signos vitales, camb
Carrie estaba en shock, pero sin duda tenía muchas preguntas, entonces escucharon los pasos de Thalia y Baly regresó dentro de Kevin dejándolo dormido en la silla. Carrie no podía hacerse la dormida, así que solo miró a la puerta ordenando a sí misma calmarse. —¿Qué pasó?, Briana —exclamó Thalia muy asustada al detectar el nerviosismo de Carrie. —Nada Thalia, ella está bien, es que acabo de tener una horrenda pesadilla, perdón por asustarte. No se detectó olor a mentira, pues para Carrie guardar ese secreto era una verdadera pesadilla. Thalia se sentó junto a su amiga y puso sus manos dentro de su cabello. —¿Por qué esta prueba tan dura Carrie? Carrie la abrazó demostrando que son muy allegadas. —Ojalá te tuviera una respuesta, solo nos queda esperar lo mejor, luchar por seguir adelante. —Creo que la diosa me castiga por haberme negado a tener hijos por mucho tiempo. —No lo creo, pues te dio hijas como pediste. Thalia negó con la cabeza. —Siempre h
En cuanto Kevin cubrió su boca, Briana sintió revivir una energía que no sentía desde hace tiempo, pero fue opacada por las necesidades que siente solo desde que lo conoce. Ese extraño choque en su pecho explota e irradia hasta llegar a la puntas de sus dedos y en su feminidad que clama por atención.Kevin la pegó a su cuerpo y se recostó en la pared de la ducha, el agua se colaba en medio de ambos, acariciando los pechos de Briana. Ella jadeo en la boca de Kevin, que exploró su boca con la lengua y ella imitó sus movimientos y puso sus manos en su cuello aferrándose a él y a su sabor adictivo Fue Kevin quien redujo la intensidad del beso, con la respiración acelerada, tratando de calmarse con renuencia y dejó besos cálidos en sus mejillas, su frente, sus ojos hasta llegar al cuello entre el nacimiento del cabello y la oreja. Acariciando con su nariz apenas al rozar su piel. No pudo resistirse a tomar el lóbulo entre sus dientes y acariciar con la lengua. Briana emiti
Briana, se quedó dormida muy feliz sobre el pecho de Kevin, él no se movía para que ella descansara mientras jugaba con un mechón de su cabello. Deseaba que se recuperara pronto y poder acabar con todos los rogues que merodeaban las tierras, no era difícil imaginar porque estas jaurías de lobos renegados querían esas tierras. Alaska tenía poca población, cosa que les daba libertad a los lobos, por otra parte, en especial la manada luna de hielo era rica en diamantes, tanto que al apenas buscar un lobo podía sentir el olor de cómo el carbono se transforma en diamante, lo mejor es que los humanos ni lo imaginaban. Eran vastos terrenos con agua, comida, casas hechas y pocos lobos. Para Kevin estaba claro por qué querían conquistar el territorio. «Mi Alfa, no me lo va a creer» —escuchó Kevin a su Delta Arthur por el link que comparten. «Te escuchó Arthur» «Nos topamos con rogues, hay abominables» Kevin se sentó despertando a Briana con el movimiento repentino.
Los próximos días fueron una prueba de resistencia para Kevin, no solo porque deseaba ir a la habitación de Briana, no había dormido más que a ratos bajo algún árbol, y es que no confiaba en Gerald. Kevin quería estar en todos los turnos de vigilancia y Bradley y Arthur lo apoyaban para cubrir todo el territorio por miedo a que dejaran entrar enemigos. Ryan prefería no objetar la decisión de Kevin y procuraba organizar a sus lobos de manera exigente. El matrimonio entre Briana y Kevin nunca fue tan necesario, ambas manadas se fusionaron en una sola por el momento. Kevin estaba dándose un baño en el río y al salir siente el aroma de Ava. —Por fin puedo verte a solas, no entiendo porque me evades. —Ava, no lo hago a propósito, tengo mucho trabajo —exclamó Kevin serio y quiso pasar por el lado, ella le sujetó el brazo. —Estás molesto conmigo, es lo que pasa. Kevin no miró su rostro, miró su mano en el brazo de él y Ava lo soltó bajando la cara con pena. —¿Qué
Ryan y Carrie no podían creerlo, Briana también observaba confundida, Rhiannon heredera de un linaje Alfa había conseguido a su pareja destinada en otro Alfa. A Kevin solo le cegó una ira descomunal. —¡Rhiannon apártate ahora mismo! La loba de Rhiannon no le hizo caso y para ser justos, Gerald en el suelo tenía las palmas abiertas sin tocar a la loba. Kevin se acercó al lomo de la loba y ella volteó lanzando mordiscos disgustada, Baly se materializó en armonía con Kevin; gruñó y mordió a la loba por la nuca para alejarla, esta se negaba a obedecer. —Pequeña me vas a lastimar —pronunció Gerald y su voz fue dulce, pero su expresión se acercaba más al asco y la indignación, se negaba a mirarla y a tocarla, la loba se apartó gimoteando de pena. Kevin regresó a su forma humana de nuevo. —Maldición Rhiannon regresa a tu forma humana, la loba le mostró los dientes a su hermano. —¡Kevin dejala! —exclamó Briana—, recuerda que no es fácil la primera vez, menos con todas
Kevin acercó sus labios a los de Briana y apenas los rozó, la acercó a su cuello, la nariz de ella estaba muy fría y él la dejó allí para que ella se calentara. Briana fue consciente como nunca de su cercanía a este hombre que entró en su vida en el peor momento y de la peor manera y que ahora se aferra a él cuando quiere exteriorizar lo que siente. Cuando Kevin movió su rostro ella hizo lo mismo para que sus labios se encontraran, y es que en sus besos está lo que anhela ahora mismo. Para Kevin, Briana fue la calma, sus problemas estaban allí y no podía olvidarlos, pero justo en este momento agradeció poder estar con ella y es que le ha hecho mucha falta, como si cuando ella no estuviera entre sus brazos se quedara vacío. Briana se deshizo de sus zapatillas y metió los pies fríos entre las piernas ardientes de Kevin y emitió un gemido de satisfacción, pudo sentir como la hombría de Kevin se movió haciéndose más dura y su corazón se aceleró con miedo. Kevin quiso retir