Desde hace una semana la prensa había publicado el estado de salud de Mariam, todo San Antonio se encontraba consternado por la situación que estaba pasando una chica tan joven y con un hijo tan pequeño. La policía había querido detener la información, pero era imposible controlar a todos los medios al mismo tiempo.

Además de que la persona que estaba detrás del secuestro era un empresario de alto nivel en la ciudad, lo que hizo más grande el alboroto. Las versiones se dividían respecto a lo que sucedía, lo que si era inevitable era la condición de Mariam, nadie sabía a ciencia cierta que le esperaba.

Los doctores no daban ninguna esperanza de su recuperación, dado a los pocos avances que presentaba. Toda la familia se turnaba para cuidarla, y mantenían la fe en que despertara del estado en que se encontraba.

—Isaías, ¿Qué piensas hacer con el señor Del Valle? ¿Sigue retenido o se ha salido con la suya?

—Al parecer lo han dejado salir por falta de pruebas, los investigadores no le pie