Tiempo después… Mansión DiNozzo.Ha pasado mucho tiempo, desde que Mónica dejó el hospital, aunque logro salir con vida, su estado emocional cada vez empeora, actualmente muestra un silencio absoluto producto del trauma, que vive al ver su rostro tan desfigurado. Las secuelas que le dejó la mala praxis, son aparentemente irremediables, aún sigue en negación por lo sucedido. Se ha aislado en su habitación y no sale, ni para tomar el sol.—Hola mamá ¿Cómo amaneciste hoy? —la saluda Erick y Mónica, continúa en silencio ignorando su saludo. Ante que Erick se vaya lo detiene. Lo toma por la espalda y se interna, entre sus brazos. Musitando:—Quiero ver a mi nieta—Erick se sorprende al escuchar su voz.—Hablaste mamá, claro que sí pronto la traigo. Qué alegría oír tu hermosa voz mamita—la abraza con mucha fuerza y se conmueve de inmediato.—También quiero ver a Tatiana—Erick la mira con extrañeza y Mónica le indica: —Tranquilo, sólo mírame jamás podría humillar nuevamente alguien—Erick se
Horas más tarde... Ya éste par, son por fin marido y mujer oficialmente, lo que tanto anhelaba Pierre, de la compañía de familiares y amigos, todo se hallan felizmente reunidos, hasta Zelim se ubica al lado de Matías, quién siguió los consejos de Tatiana, dejando de lado a Alí de su relación, por ser hermano de Zelim. Se aparta por un momento, Salvatore con Erick y con melancolía le manifiesta: —¿Hijo te quitarás el apellido DiNozzo? —pregunta Salvatore inmediatamente. —Papá, mejor hablemos eso en otro momento si, es la boda de mi papá Pierre, no quiero arruinarle el momento—señala Erick con confusión. —Te confieso que, a mí me entristecería que no lleves más el apellido DiNozzo, pero finalmente es tu decisión Erick. Siempre serás mi hijo, nunca lo olvides. —Viejo no me atormentes por favor. Te juro que pase, lo que pase, tú tienes un lugar privilegiado en mi corazón. Aquí entre nos, te quiero unas milésimas más que a Pierre—señala Erick, para apaciguar un poco los temores de su
Cinco años después… Algunas veces la vida nos sorprende agradablemente... Tatiana comprendió que, al corazón para latir, sólo hace falta mantenerlo contento. Y esa alegría la logró al lado del simpático Franco, después que había roto sus esperanzas en hallar amor verdadero. Consiguió en él, mucho más de lo que hubiese imaginado, esta vez a su lado se tomó las cosas con calma y fue, hasta estar convencida de quien era en realidad, que dio su firme paso. Él por su parte la esperó pacientemente, definitivamente es un buen hombre, familiar, tranquilo, simpático, trabajador y sobretodo un buen padre para sus hijos, a los que quiere como suyos. Actualmente esperan a su primer hijo, Tatiana definitivamente le tomó gusto a la maternidad. —Mi Felicidad, está exteriorizada en mi hermosa familia—expone Tati muy contenta. —Nuestra familia, fue lo mejor que me sucedido cariño, no dejaré de darle las gracias a Gabriella, por invitarme a su boda, allí fue donde te conocí. —Ahora trabajamos junto
—Eres insaciable Tati, cada día más intensa—comenta el apuesto Erick, mientras arregla su corbata, dentro de su oficina. —Ja, ja, ja, amor cada vez me cuesta, más ocultar lo nuestro—lo rodea Tatiana por la cintura —Tienes que hacer un esfuerzo, hazlo por mí—él hace ligeramente pucheros—arréglate cariño. —Ya me arreglé—comenta Tati, Erick abre sus ojos como un plato y murmura mentalmente: «Wao merezco un óscar, con qué mujer tan fea, me estoy acostando». Ladea la cabeza, éste arrogante galán. —Amor tenemos una conversación pendiente—apunta Erick. —Si cariño, cuando quieras hablamos, mientras tengo que finiquitar los detalles de la junta, acomodar los balances, que debes de presentar, para que solo dirijas la reunión como siempre—esboza un sutil suspiro, la muy tonta enamorada. —Gracias, que haría yo sin ti, mi tati tan… audaz—se reserva la palabra “Linda”, le da un ligero beso en los labios. Sale Tati y se acomoda en su escritorio, sonríe con picardía, al recordar todo lo, que a
Llega Tati, a su puesto de trabajo muy temprano, a su costado estaba Larissa una mujer intrigante, quien es aliada en la empresa, de Mónica DiNozzo la madre de Erick, que por puro placer no deja de molestar a Tati, cuando tiene la oportunidad. Sin embargo, esta vez no se saldrá con la suya la muy cizañera. —Llegó la gárgola milenaria—apunta Larissa burlándose de la inofensiva Tati. —¿Deseas algo Larissa? —Pregunta la dulce Tati, manteniendo la calma. —Si vine a molestarte. —Ya se me hacía raro tu acercamiento—Tati no les presta atención a sus burlas, ella es mucho más inteligente, que esa payasa. Al percatarse de la cercanía, de ésta infame mujer, llega el buen Marlon y la pone en su lugar: —Larissa mi oficina queda en el piso de arriba—la mira con aprensión, ya que Larissa es su secretaria, no la saca de la empresa, porque su madre siempre la protege. —Marlon, viene a conversar un raro con Tati. —¿O búrlate de ella? —puntualiza Marlon. —¿Por qué dices eso? Si yo la estimo tan
Erick había salido de la mansión a toda prisa, desconoce, que su padre ha sufrido un ataque al corazón, motivado por la riña, que sostuvo con su hermano Aníbal. Toma su celular y llama de inmediato a la ingenua Tatiana: —Amor paso algo terrible. —¿Qué pasa Erick? —pregunta con ligereza. —Me quitaron la presidencia, por culpa de mis hermanos, que conspiraron en mi contra. —¡Rayos! ¿Ahora qué harás? —se asombra Tati. —¿Cómo, que haré Tatiana? Tenemos que seguir con nuestros planes y la nueva constructora. Por favor renuncia mañana, te lo ruego. —Pero, Erick tengo mucho tiempo trabajando allí, me da pena con tu padre, no quiero fallar a su confianza. —Mi padre es un malagradecido, me echo como a un perro y tú eres mi novia ¿No pensarás dejarme solo en todo esto? ¿O sí? —la acorrala valiéndose de su amor por él. —No amor como crees, si yo te amo. Jamás te dejaría de lado—sonríe Erick, al comprobar, que es dueño de su voluntad. —Entonces demuéstrame ese amor, renunciando a la const
Se levanta Erick muy temprano, esta tan sumergido en su mundo, que ni se percató del incidente que sufrió su padre ayer, producto por la pelea, que tuvo con Aníbal. Llega su alcahueta madre a su cuarto, para despertarlo con mimos: —Hola mi pequeño. —Buenos días mami, ¿Qué hora es? —suelta Erick un ligero bostezo. —Son las ocho de la mañana. —Vaya, tengo que salir, a resolver unos asuntos de trabajo—se levanta, para entrar a la ducha. También se le hizo tarde, para recoger a Tatiana. —Espera hijo—lo detiene su madre. —¿Qué pasa mami? —A tu padre le dio ayer un infarto. —¿Cómo fue? —Según tus hermanos fue tu culpa, por el asunto ese del desvió de fondos. Pero despreocúpate, que ya puse a Aníbal en su lugar. Se comportan con tus enemigos, cuando todos son hermanos, hijos del mismo padre—sostiene Mónica la mirada erguida. —Ya sabes, cómo son de envidiosos, que bueno que lo pusiste en su sitio. Y por el viejo, ni te preocupes, que hierba mala nunca muere. Jamás le voy a perdonar l
Constructora DiNozzo… Ya la junta directiva, había aprobado la decisión de Salvatore DiNozzo, ahora su hijo mayor Aníbal es el nuevo presidente: —Bueno hijo, te deseo todo el éxito del mundo en tu nuevo cargo, yo por lo visto, no podré hacerme cargo de la constructora, mi corazón no resiste tantas emociones. —Tranquilo, que yo desde ahora, me encargaré de todo y pondré cada cosa en su lugar. —Lo sé hijo, desde un principio debió de ser así, solo que me deje llevar por tu madre, ya sabes como es y Erick no lo estaba haciendo tan mal aparentemente. —Dejemos el pasado de lado, ahora entraré de lleno en las finanzas y veré que arrojan los nuevos resultados. —Esperamos que sean favorables. —No quiero ser ave de mal agüero, pero me temo lo peor—su padre abre los ojos desconfiado y Aníbal lo mira con mucha ligereza. Aparece Tati, quien acababa de renunciar a su puesto, esperaba no encontrárselos, pero lo inevitable ocurre rápidamente: —¿Tatiana para dónde vas? Te iba a pedir, que me