“Esta chica es tan extraña. Es joven y competitiva, pero ¿de qué sirve discutir quién es el ganador en este tipo de cosas? ¡Qué poco interesante!” —pensó Kasey.

Mientras Lily no habló, asumieron que tenía miedo y se rieron.

—Es tan obvio que la atraparon. ¿Ya estás tirando la toalla?

—¿Con qué deberíamos competir? —La declaración de Lily fue tan repentina que todos se congelaron y no pudieron reaccionar por un tiempo.

—Veremos quién conoce mejor sus olores —dijo la chica que se burló de Kasey. Aunque no era alta, todavía se veía imponente. Era evidente que ella era la cabecilla.

—¿Estoy compitiendo contigo? —preguntó Lily sorprendida. Al escuchar esto, el grupo se echó a reír.

—¿La estás menospreciando? ¿Sabes quién es ella? ¡Es hora de que te humilles!

—Kasey, ¿no deberías mantener actualizada a tu actriz antes de traerla aquí? ¿Cómo se atreve a menospreciar a Rachel de esa manera? ¡Ahora solo estás cavando tu propia tumba!

—Todo el mundo sabe que Rachel es la reina