Arianna no mimó a Brittany ni la consoló. Dejó que Brittany llorara hasta que sus lágrimas cesaran antes de preguntar: “¿Estás lista para hablar ahora?”.

Brittany se sonó la nariz con la servilleta que le dio Arianna. Con los ojos húmedos, dijo: “Sabes… se va a comprometer, pero ni siquiera sé quién es la mujer”.

“Jaj, así que de eso se trata”. Arianna objetó: “Pensé que se trataba de algo más importante. Solo se va a comprometer, no a casar. Incluso si fueran a casarse, las tasas de divorcio hoy en día son altas. ¿Por qué estás tan alterada?”.

Nadie le había dicho algo así a Brittany, desde que se enteró de que Alexander se había comprometido hasta cuando lo confirmó. Sus padres siempre fueron cuidadosos de no sacar el tema, mientras que Brandon le sugirió directamente que se diera por vencida. Sin embargo, Arianna le dijo que no era para tanto. Por un momento, se quedó estupefacta.

“¿En… en serio?”.

“Pero claro, ¿por qué no?”. Inclinándose, Arianna cogió dos tazas de té de fruta