“Me… Me temo que no puedo vendérselo. Como sabe, esto no es fácil de cultivar. Hemos invertido mucho tiempo y esfuerzo en estos injertos. Además, no los tenemos en grandes cantidades, así que no son adecuados para su compra”. Ben se negó.

“No necesito una gran cantidad. Solo necesito la mitad de lo que tienen aquí. También quiero la otra mitad, pero dejaré el resto por ahora, ya que necesitaré que los cuide bien. Aun así, no tiene permitido que se los venda a otros”.

“Lo siento mucho, pero no podemos hacer eso”, dijo Ben de manera avergonzada mientras seguía negándose.

“Solo diga su precio”, dijo Jenny. Ella vio la persistencia de Lily y se dio cuenta de que debía tener algo en mente para los sándalos. Además, el sándalo rojo injertado era en efecto raro. Sería de gran ayuda si pudieran obtenerlos todos. Sin embargo, el precio probablemente sería elevado.

“No… no se trata de dinero. Pusimos mucho esfuerzo en estos sándalos, pero aún están incompletos. Todavía estamos experimentando