Capítulo 38

Kalil.

Los labios de Saravi temblaron, pero ella se colocó firme sin titubear y me observó muy seria.

—Debo ir…

Una ira devastadora se apodera de mi cuerpo. Esto no es posible ¿acaso se ha vuelto loca? ¿Ella está entendiendo lo que me pide? Esto no puede ser real.

Aunque no lo planeé, una sonrisa cargada de cinismo sale de mí mientras paso las manos por el rostro tratando de tragarme esta situación.

—No sé en qué estás pensando Saravi, pero…

—Déjame explicarte primero, no tomes decisiones sin escuchar —dijo tratando de tomar mi brazo, pero yo no dejé que se acercara.

—¿Qué hay que explicar? ¡No hay nada que explicar! Esto es… ¡Esto es inaudito! ¿Acaso deseas regresar? —pregunté yendo hasta su rostro para no darle tiempo de titubear.

—Recordé que tenía mi cadena puesta antes de golpearme la cabeza —dijo en total calma mientras sus ojos se cristalizaban—. Junto a esa cadena estaba el ani

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP