Narra Ciara:Arlen no ha dejado de mirarme de manera extraña desde que llego. Por alguna razón, siento que esta realmente molesto, aunque no encuentro la razón de ello.—Sabes, creo que realmente lo hice mal contigo y con Ethan, quizás ustedes dos estaban mejor sin mi —Dijo Arlen repentinamente logrando sorprenderme.—Creo que es mejor dejar de lado ese sentimiento, lo único que realmente importa es que apareciste en nuestras vidas…y que Ethan te necesita, siempre deseo conocer a su padre, ahora finalmente lo ha conseguido, no puedes dar marcha atrás con eso — le dije con sinceridad.—No Ciara, no quise decir que dejare de verlo, pero, hoy, al ver la dinámica entre tú y tu padre, me di cuenta que tal vez fue lo mejor. Yo me porté muy mal contigo, realmente creo que aquella noche, si hubieras estado en tus cinco sentidos jamás hubieras estado conmigo…yo…me aproveché de eso —Sentí un nudo formándose en mi garganta, por supuesto, jamás me habría acostado ni con el ni con nadie de haber
—Ay mamita, la tía Hada sí es mágica, te ves más bonita que siempre—dijo Ethan sentándose en la cama.—Gracias Coso —le dije dándole un beso en la frente. —Ahora vete a cambiar, no hagas mucho ruido porque Cesar se quedó a dormir en el sillón.—Sí lo sé, por eso me vine a quedar contigo —me dijo antes de salir. Me quedé intrigada de por qué había dicho eso Ethan. Me dirigí a la cocina para sacar un poco de yogurt y cereal para desayunar algo.—Mamita, yo solo quiero un poco de lechita caliente, no tengo hambrita —me dijo Ethan.—No te preocupes, solo leche está bien. Después desayunas con tu papá. Calenté leche en el microondas mientras hervía un poco de agua para hacerme un té. Tocaron la puerta y fui rápido para que no despertaran a Cesar. Pero creo que nada despertaría a Cesar porque ni siquiera se inmutó. Era Arlen que tenía cara de no haber dormido en toda la noche. Mi parte malvada solo quería que hubiera sido porque estuvo peleando y no reconciliándose.—Hola —le dije.—Buenos
Entramos a una oficina y me sorprendí, jamás había visto una oficina como esa. Estaba llena de dibujos, fotografías y más cosas.—Son mis tesoros —me dijo sacándome de mis pensamientos. — Son cartas de agradecimiento de mis alumnos, fotos de las obras de teatro y de los concursos de la escuela, son de varias generaciones. Me le quedé viendo. Sobre el escritorio estaba la foto de dos niños; una niña y un niño. —Estos dos terremotos son mi mayor tesoro. Son mis hijos y soy divorciado. Y bien, ¿qué me dices tú, ¿Cuál es tu historia? —Me dijo y pregunto aquello como su fuéramos conocidos de toda la vida. Me sentí algo avergonzada por eso, yo no soy el tipo de persona que confía en alguien que recién conoce.—Bueno, pues yo solo tengo un niño, pero es más que suficiente, no estoy casada ni divorciada y voy a dar clases de literatura — dije algo seria.—Entonces bienvenida, veo que ya te dieron la información escrita… La siguiente hora se me fue en medio poner atención y en mirar sus ojos
Narra Ciara:Esta vez cuando subí al coche, no llené mis pulmones del olor de Arlen. Por primera vez en muchos años no necesité llenarme de su olor para sentirme completa romper el silencio.— ¿Qué tal estuvo tu día, Ethan?—Muy bien mamita, fuimos a desayunar a un restaurante y mi papá me pidió cereal con lechita caliente y él se comió una cosa muy rara y fea, no me gustó.—Solo fue un poco de queso brie y es algo fuerte para un niño, pero no es desagradable — dijo Arlen un tanto serio.—Si tú lo dices — le dije. Jamás había probado ese queso y por primera vez me di cuenta de las diferencias entre Arlen y yo, él es un multimillonario que jamás ha conocido la miseria…yo solo soy una mujer común y corriente que cuenta las monedas. El queso más caro que yo había probado era el queso parmesano, era muy diferente hablar con él que hablar con Alex. Alex era más como yo; era un padre divorciado que también contaba el dinero para llegar a fin de mes. Sus ojos eran tristes y preocupados, como
Narra Ciara: Todos comenzaron a mirarse entre sí, y era fácil saber que Carlisle y Victoria no estaban de lo mas felices, sin duda aquello me parecía extraño, el padre de los Chadburn parecía estar muy de acuerdo con cada desalmada actitud de esa víbora rubia. Antonella abrió la boca y finalmente dijo. —Bravo Marshal, nadie pudo haberlo dicho mejor, y Arlen si tu novia no se comportar, es mejor que te la lleves, nosotros podemos regresar a Ciara a su casa. Victoria miró a Arlen y dijo. —Vámonos mi amor — Y se dio la media vuelta. —No te vayas papito —dijo Ethan tomando su mano, y vi a Arlen debatirse entre quedarse e irme. Arlen vio hacia el elevador y luego a Ethan, suspiró y dijo: —Dame unos segundos, solo voy a decirle a Victoria que me quedo —dijo despeinando a Ethan. Arlen se acercó al elevador. Victoria zapateó y lloriqueó, pero él le entregó la cajita con el anillo que Arlen le había comprado para contentarla y Victoria sonrió, le dijo algo y se fue. —Chico —le dijo mi
La frustración se apodera de mi cada vez que Victoria hace un comentario desafortunado. Mi padre me mira con desaprobación, y sé que finge en estar de acuerdo con el sheriff Edevane, así que solo asiento a todo lo que el padre de Ciara me esta diciendo. Ciertamente, me gustaría poder mandar a Victoria al mismo infierno, pero nada me esta resultando sencillo. Últimamente me siento atrapado, completamente fuera de mi mismo. El clasismo de Victoria, sumado a sus horrendas actitudes, me hacen desear el arrojarme de un puente, en realidad, cualquier opción es mejor que tener que soportarla, sin embargo, aun no puedo darme por vencido.Ethan parece muy emocionado por el nuevo departamento que mi madre compro para el y para Ciara. Por sus expresiones, realmente es sencillo enterarse de la terrible carencia en la que vivieron durante todo este tiempo. Admiro mucho a Ciara por ser capaz de salir adelante y sacar adelante a nuestro hijo a pesar de todo, y deseo con todo mi corazón poder ser lib
—Mira mamita, ¡son mi tía Hada y mi papito! Tía Hada, ¿me regalas esta foto? Porfa, porfitas, no tengo una de mi mamita y mi papito juntitos, pero tú te ves bonita en esta foto. Era, evidentemente una foto de la graduación que la había tomado Alina, una selfie. En ella estaba Alina, con su hermoso vestido verde algo despeinada, supongo que fue una buena noche para los hermanos, en aquella fotografía Arlen parecía muy feliz, con una sonrisa genuina. No pude evitar preguntarme como era en realidad, que historia había para contar…yo…concebí un hijo con el sin siquiera estar plenamente consciente de cual era su nombre.—Mira tía Hada, yo tambien tengo una foto de mi mamita, me la robé de su cajón — dijo Ethan corriendo directamente hacia su mochila, y yo entristecí al saber a qué fotografía se refería, aquella en la que uso ese vestido…la fotografía de aquella noche. Alina tomo la fotografía y se río.—Ciara, qué cara de idiota tenías en esta foto, pareciera que quisieras estar en cualqui
Narra Ciara:Arlen y yo seguíamos hablando de lo único que nos “unía” mi amado Ethan.— ¿Cuándo?—No sé, tal vez el viernes. Podemos ir a un lugar donde Ethan pueda jugar.—Por mí no hay problema, pero tendrías que preguntarle a los demás.— Emmeran me dijo que sí, Alina no creo que diga que no, pero tú tendrías que convencer a tus amigos de la playa, quiero que ellos también estén presentes.—Con Alfonse no veo tanto problema, pero con Cesar veré. ¿Quieres que sea en el departamento?—Me gustaría más ir a un lugar, así no queda la tiradera que levantar.—Pero sería más bonito en el departamento porque no hay que ir de un lado a otro y con Ethan es más fácil si se quiere dormir, solo se va a su recámara y ya.—Buen punto, ¿te parece si lo platicamos mañana? La verdad estoy muerto, Ethan es incansable y yo creo que ya me agoto muy rápido, en la oficina no paraba.—Gracias — me dijo repentinamente.—¿Gracias? ¿Por qué? — le cuestione a Arlen sin entenderlo.— Ethan es un niño maravillos