-No te vayas amor hoy para esa ciudad, tengo un mal presentimiento.
-Tú y tus presentimientos, nada pasará, además estaremos a tan solo dos horas de distancia, volveré lo más rápido ya lo verás.
-Si ya no puedo convencerte de que no vayas, al menos no olvides avisar apenas estés en la casa de tu socio.
-Lo haré no te preocupes, apenas llegue te llamo.
De pronto desperté… solo fue un sueño…
[…]
Mi nombre es Mayra Castelli, tengo 30 años de edad, soy cirujana cardiológica, vengo de una familia conocida de la ciudad, mis padres son dueños de una de las mejores editoriales de la ciudad además de que a mi madre le encanta el diseño y la moda, por eso tiene una empresa que se dedica a el diseño y modelar.
Tengo dos hermanos, Alaia y Martín, ambos están en unas bonitas relaciones también, en el caso de Martin fue un poco más difícil el conquistar a la que es ahora su esposa, mi querido hermano es unos de los mejores abogados del país, tiene un estudio jurídico de renombre, nunca han perdido un caso, y Alaia que lleva 2 años casada y está embarazada de su segundo hijo que por lo que se es varón, tiene mucha alegría pues ya tienen a la niña así que se quedaran con la parejita por lo pronto.
Creo que yo les tengo envidia de la sana pues ellos ya están realizando una a una las cosas que desearon en su vida, tengo fe que pronto será mi oportunidad y seré muy feliz como los son mis queridos hermanos.
[..]
Hace aproximadamente dos meses mi novio Ernesto Villanueva me pidió matrimonio, después de casi 6 años de noviazgo, pues en lo que me especialice él me ha acompañado siempre, tenemos una relación muy bonita, vivimos juntos desde hace un año, aunque el por su trabajo viaja mucho y son pocos los días que coincidimos por mis guardias en el hospital, pero cuando tenemos esos pequeños espacios los sabemos aprovechar.
[…]
La mañana había pasado tranquila, me tocó trabajar desde la mañana, amo lo que hago, trabajar salvando vidas es lo más bonito que me ha pasado, aunque me afecta de gran manera cuando una de esas vidas se apaga.
Se dice que la desgracia no viene sola siempre acompañada de algunas cosas que si bien es cierto ignoramos no porque eso es algo que hayamos decidido sino más bien por el descaro de otras personas, hace aproximadamente tres meses atrás tuvimos una pelea que casi hace que una relación tan larga como la nuestra llegue a su fin, yo recibí algunas llamadas y mensajes en donde me aseguraban la infidelidad de Ernesto, no sé cómo me convenció de que todo era mentira, creo que por todo el amor que le tengo es que termine creyendo en lo que me decía.
Estábamos a horas de contraer matrimonio, sería una ceremonia sencilla pues yo no he sido nunca de cosas ostentosas, eso no es mi fuerte, la gente piensa que porque mi familia tiene dinero soy de las que me gusta gastar a manos llenas, pero no es así, aunque por palabras de mi papá yo no debería estar de empleada en un hospital sino tener mi propia clínica, pero ese es un proyecto que tengo en mente y que espero que pronto salga a la luz, pues lo estoy creando con recursos propios, algo que sea trabajado por mí.
Mi boda se llevará a cabo en uno de los hoteles de la ciudad, decidimos que sea allí pues son pocas las personas que asistirán, estoy muy nerviosa soy mujer de emociones fuertes, pero sin embargo hay cosas que aún me dejan ver ese espíritu adolescente que vive en mí, y este es uno de esos casos.
Mi hermana me dice que todo está listo, que aún no llega el novio pero que de pronto ya está por llegar, mi hermano está un poco molesto a Martín nunca le ha caído bien Ernesto, mi hermano siempre dijo que no se metería en mis decisiones pero que esperaba que todo fuera como siempre lo he deseado.
Mi mamá entro al dormitorio a decirme que ya estaban esperando por mí, que Ernesto aún no había llegado que si era posible que me comunicara con él pues ya en la sala estaban tanto el juez como el sacerdote que oficiará la unión.
Sin más tomé mi teléfono y marqué su número, pero no tuve ninguna respuesta, seguí insistiendo sin ninguna señal de Ernesto, hasta que sonó mi teléfono, era una llamada del número de él, pero no era de su parte sino de otra persona.
¿Usted es familiar del dueño de este teléfono?
Soy su novia, dígame, ¿paso algo con él?
Soy del departamento de criminalística, al señor lo hemos encontrado sin vida dentro de un vehículo que causo un accidente en la vía principal del centro de la ciudad.
¿Qué? ¡¡No!! Dígame que lo que me dice no es verdad… ¿dónde se encuentra ahora él?
Ahora estamos en la oficina forense, ¿puede venir a hacer el reconocimiento.
Salgo para allá señor oficial.
¿Necesita la dirección?
No se preocupe sé dónde queda.
Con el corazón destrozado, salí de la habitación a la que había entrado para poder llamar a Ernesto, mi madre que venía a mi encuentro me tomó en sus brazos y lo único que hice fue llorar, llorar de manera desconsolada, había perdido a mi novio, mi compañero de aventuras por más de 6 años.
Papá se encargó de dar a conocer que la boda no se realizaría y de despedir a los invitados, cancelar todo lo planeado en el hotel y así dirigirnos a la casa para poder cambiarnos de ropa y acudir a la oficina forense, ya en la salida del hotel al ir bajando las escaleras, en una de las entradas se escuchaba una conmoción y sin querer me dirigí hacía la entrada, pues la que estaba alterada pidiendo que la dejaran entrar pues debía hablar con alguien dentro era una mujer con una nena de aproximadamente unos 4 años de edad, la mujer se veía un poco alterada y su ropa no está del todo bien, al parecer las cosas para ella no estaban muy buenas.
Me acerqué a ella con la intención de ayudar, sin más al verme ella me dijo que justamente era conmigo la persona con la que quería hablar, yo por mi lado asombrada sin conocer a aquella mujer, igual le pedí a las personas de seguridad que la dejaran entrar pues si seguían con la actitud de molestia la niña iba a empezar a llorar. Les pedí que fuéramos a uno de los muebles que había en el lobby del hotel, y le dije a uno de los camareros que por favor le diera algo de tomar a ellas, necesitaba que se serenara y me dijera que era lo que necesitaba hablar conmigo.
- Doctora Castelli, sé que usted es una gran persona y no se merecía a la persona con la que se iba a casar, él la estaba engañando.- ¿Qué me está diciendo usted?- Lo que escucha doctora, Ernesto Villanueva vivía conmigo hasta hace un año atrás, la niña es su hija (señalando a la nena que yace sentada tomando una soda a su lado) pero después me dejó pues había empezado una relación con la hija de uno de los socios de la empresa de sus padres y por lo que sé, ella está embarazada, resulta que el papá de esa chica es una persona con negocios turbios y se había enterado que Ernesto hoy se iba a casar.- ¿Cómo sabe usted todas estas cosas?- Porque a mí me amenazaron con hacerle algo a mi hija si yo buscaba a Ernesto.
Hace aproximadamente 5 años atrás cuando estaba por cumplir 25 años de edad conocí a una mujer muy bella, con un cuerpo de infarto, todo puesto en su lugar de la mejor manera, aunque me podía dar cuenta que también era así por las manos del cirujano, con unos ojos color miel y teníamos casi la misma edad, ella tenía un año menos que yo, nos vimos de casualidad en una fiesta que dio uno de mis amigos y aparentemente quedamos prendados el uno del otro.Ella por su parte trabajaba de asistente del departamento financiero en una empresa de diseño de modas de la familia Castelli, una muchacha sencilla o al menos eso es lo que aparentaba ante mí, después de aquella vez en esa fiesta, habíamos intercambiado números telefónicos y pues después de ese día las cosas entre nosotros fueron diferentes, una noche en la que salimos las cosas se tornaron más &ia
Mayra CastelliLa convención estuvo muy buena, vimos algunos avances en las operaciones a corazón abierto, nuevas tecnologías y algunas cosas más muy útiles para implementar en las diferentes áreas y de paso llevarlas a cabo en mi clínica cardiológica.Me dirigí a mi habitación a ducharme y cambiarme pues las chicas y yo quedamos en encontrarnos en unas horas en el lobby del hotel para nuestra salida, hoy estoy cumpliendo 33 años de edad, no me siento vieja pero aún no me siento realizada del todo, tengo el gran deseo de ser madre, pero no tengo la intensión de tener una relación, además que no tengo confianza en ningún hombre pues siento que mi corazón aún no está curado del todo.[…]Duchada, terminando de maquillarme y con mi vestido que como diría Corina esta de infarto, es negro p
Llegaron los primeros rayos de sol y con ellos mi entrada en razón, como doctora sabía que los excesos son perjudiciales, y justo anoche incurrí en excesos, sin duda alguna fue algo que nunca olvidaría, me dolía todo el cuerpo, más que todo mi entrepierna, tenía la leve sensación de no poder caminar correctamente por algunos días, sin contar con el hecho que no recordaba si nos habíamos cuidado, aunque en mi caso no era necesario pues según unos análisis que me realice un tiempo atrás cuando tenía la maravillosa idea de tener un bebe por medio de un donador de esperma, me dijeron que yo era infértil, lo que se traduce en pocas palabras a una casi esterilidad, debía ser algo sumamente extraordinario para que yo conciba.Me levante de la cama, pues debía llegar a mi hotel pues en unas pocas horas saldría mi vuelo, yo tenía que realiz
En la ciudad las cosas siguen iguales, ya el día de mañana se casa Irvin con Karina, y yo como uno de sus mejores amigos y de paso el soltero seré su padrino, en el caso de Karina será su amiga Corina, tenía la ilusión de que volvería a ver a la hermosa mujer que no sale de mis pensamientos en ningún momento, no sé si es mi deseo grande de verla otra vez que no puedo olvidarme de ella de su olor, de todas sus caricias, es verdad que estábamos tomados cuando decidimos acostarnos, pero a mí se me fue la borrachera cuando vi esos hermosos ojos verdes miel, mirarme con tanto deseo, tanto que parecía que nos consumiría en cualquier momento, sé que apenas ha pasado una semana, pero en cierto sentido siento que tengo una conexión única con ella, de pronto es porque ambos practicamos la medicina y ayudamos a quien más lo necesita.[…]Después de
Santiago Roosevelt La belleza de la mujer que vive en mis pensamientos no me deja concentrarme en lo que estoy haciendo, debo tener la mente clara entraré a una cirugía, vendría siendo la última pues dentro de poco me iré a los seminarios, el niño que está en el quirófano es de escasos recursos y pues su vida aparte de las carencias ha sido muy mala pues su enfermedad lo tiene cada día sin ánimos, eso es malo para un niño de apenas 8 años.Mi colega dice que no tengo nada en los exámenes que me realice que quizá se deba a exceso de trabajo y que ese estrés me pone como enfermo, decidí creer en lo que me dijo trataré de relajarme un poco, de pronto en medio de los seminarios tenga oportunidad de irme a una playa o a un lugar donde pueda sentir paz, al menos lo deseo, pues ahora mismo esa paz ansiada se fue al caño pues
Y cuando menos lo pensé, allí estaba ella, aunque al parecer no se encontraba muy bien pues lo que alcance a ver antes de tener que subir obligadamente a el avión, fue que su papá la auxilio porque parecía que algo le pasaba, de pronto esta hubiera sido mi oportunidad de poder conversar con ella, pero las obligaciones no me lo permiten, espero que mi estimado amigo haga las averiguaciones correspondientes, y que al regresar ya me tengan una razón positiva de la situación. El bloque de seminarios es en Brasil, y luego iremos a Argentina a visitar una fundación, espero que estos días por otros lados me sirvan para poder poner mis ideas en orden, y de esa manera llegar renovado a atender a mis pacientes, y seguir dando todo de mi en mi carrera. Las horas de vuelo se me hicieron eternas, quería llegar lo más pronto al hotel asignado, necesitaba ducharme y sobre todo dormir, me sentía demasiado cansado, mi amigo Luis había quedado en empezar las averiguacio
No sé cómo abordar el tema, ni sé si será adecuado que yo le llame y mucho menos para decirle que por descuidada termine embarazada, imagino que para él también fue una cuestión de calentura de una noche y está en todo su derecho de no tener en cuenta esta situación, pero sinceramente deseo que tenga en consideración que el cuidado no solo debía ser de mi parte sino también proveniente de él. Karina me proporciono el número telefónico de Santiago, lo agregue a mis contactos, pero aún estoy analizando si le escribo, si lo llamo, ese dilema me tiene un poco nerviosa y eso no es normal en mí, suelo tener todo en orden en mi vida, me he caracterizado por el orden en muchas cosas en mí, pues esta situación si bien es cierto no la esperaba, pero ya esta y lejos de parecerme algo malo, lo considero lo mejor. […]SantiagoRoosevelt Lo que me acaba de contar Luis me desconcentro del seminario, ya mi mente se fue a donde me imagino que est