Capítulo 100: No cansarse

Taddeo ordena a la empleada sobre la comida que tendrá nuestro desayuno y es él quien trae el plato de ambos en una bandeja que sin dificultad, mueve hacia nosotros. Como un pequeño gentil, a cada uno de nosotros nos da el plato con amabilidad.

— Buen provecho. — dice Taddeo y yo sonrío al ver que nos lo dice a ambos.

— Gracias. — digo y de inmediato, comienzo a comer al igual que Kendrick, quien sonríe a su hijo por el gesto gentil.

Terminamos de comer y rápidamente, comenzamos a prepararnos para marcharnos, aunque no puedo moverme tan rápido como me gustaría, debido al dolor que siento en mi cuerpo, uno que disfrazo por ‘la caída’ en el baño.

‘Te caíste…. En una polla después de muchos meses de abstinencia.’ Me dice mi mente y yo me ruborizo mientras me cambio por una ropa limpia.

— ¿Te sientes mal, mami? &
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