Aunque quiero resistirme un poco al plan de mi jefe, no tengo la valentía de hacerlo, ya que, yo también deseo estar acostada con él, por lo que, me acerco con disimulo hasta la cama, donde mi jefe y novio, solo me observa sonriendo por mi disimulo no tan disimulo.
— ¿Por qué haces esto? — pregunto curiosa. — ¿Qué cosa?— Nunca te he visto como alguien de humor volátil o demasiado rígido, pero, esto supera cualquier pensamiento que pueda creer que haces.— Bueno, me alegra sorprendente. Así te demuestro que no me conoces del todo. — dice mi jefe y yo me quedo mirándolo fijamente en busca de una respuesta más estructurada.Pero, lo que gano de él, es que se encoje de hombros, como si no fuera una pregunta importante. Pero, para mí si lo es. Ya que, realmente quiero saber si yo le hago hacer cosas distintas o es algo que cDebo reconocer que como él lo menciona, es una buena idea. Pero, el temor de no ser suficiente y que en un futuro cercano se dé cuenta de que fue un error casarnos, hace que no me sienta segura de que un matrimonio ahora.— No creo que sea buena idea.— ¿quieres ser madre?— Sí. — digo reconociendo que no quiero perder la oportunidad de formar vida en mi interior.— Entonces, ¿Por qué dudas tanto conmigo? — pregunta Kendrick— Te quiero, Kendrick. Eso es algo que es evidente, como también que quiero mucho a Taddeo. Pero, sigo sintiéndome insegura con esto y no es porque tú hayas hecho algo malo o Taddeo.— ¿Entonces?— No soy buena en las relaciones y que de la noche a la mañana ya tenga una… hace que aún no me crea ello posible.Kendrick se sienta a mi lado y toma mi mano con cuidado.— Yo
Horas despuésMi teléfono suena con el anuncio de la salida de Taddeo y yo trago duro. Después de haber hablado del matrimonio, el almuerzo llegó, pero, no comimos juntos. Solo me ordena cosas como mi jefe y ni siquiera me observa con interés.‘Está molesto.’ Me digo mentalmente.Suspiro profundo y toco en su puerta, preocupada de que me impida hablar con él.— ¿Qué sucede, secretaria Pussi? Puede decirme desde aquí. — dice mi jefe desde el teléfono sobre el escritorio.Trago duro y regreso a mi puesto de trabajo, oprimiendo el botón para poder comunicarme con él.— Es hora de recoger a Taddeo, ¿va a ir conmigo?— No. Vaya usted, de todas maneras, aunque vaya no me notará. — dice Kendrick.— Es importante esto. Posiblemente, recuerde este día tan importante para Taddeo, ¿se lo va
Dos meses despuésLas cosas han resultado bien en mi vida, he podido equilibrar mi trabajo en la empresa con las necesidades de Taddeo. Aunque no trabajo hasta finalizar la jornada, dejo todo listo para que no se note mi ausencia.Algo que no le ha molestado a mi jefe, pero, si ha generado especulaciones entre mis compañeros de trabajo, que me observan con desgrado o simplemente me ignorar, para después susurrar a mis espaldas.Al principio, me molestaba, pero, ahora no le doy relevancia, tengo muchas cosas por hacer, para estar preocupándome por lo que piensen de mí, cuando las personas que quiero no piensan lo mismo.Mi teléfono suena y yo me doy una ducha para posteriormente, levantar a Taddeo. Hoy es domingo y mañana es lunes festivo, no obstante, hemos decidido levantarnos temprano, porque hoy cumple Kendrick.— Cariño, recuerda nuestros planes, debes levantarte pronto. — digo y é
Kendrick corre más rápido y agarra a su hijo de las piernas y lo eleva para verse temible, mientras yo niego desde la sala.— ¿Y ahora qué piensas hacer? — pregunta Kendrick.— Abdominales. Uno, dos, tres. — dice Taddeo, levantando su pecho a la altura de sus rodillas, aprovechando que su padre lo tiene agarrado de los pies.— Taddeo…— En la escuela hay un parque con todo tipo de herramientas donde los niños se ejercitan, uno de esos son una barandas que ellos usan para pasar de un lado al otro. Además, de eso, algunos se agarran de allí con las piernas y hacen lo que Taddeo hace.Kendrick bufa molesto porque no pudo asustar a su hijo y lo coloca sobre el sofá, donde Taddeo le saca la lengua.— Es momento de ir a trabajar. Desocúpate rápido, iremos por ti a la hora del almuerzo. — digo y Kendrick me observa curioso.—
De inmediato, cargo a Taddeo en mis brazos, deseando ser la protección suficiente para él en estos momentos. Algo que le causa gracia a la mujer que se acerca más a nosotros, pero, el mayordomo se interpone entre nosotros, causando que ella bufe molesta.— Soy su tía, deben permitirme acercarme a mi sobrino. — dice la mujer con evidente molestia.— No está permitido que extraños se acerquen a la señora y el joven señorito.— Ella no es nada de ese niño lo está cargando, ¿no crees que estas siendo idiota? — dice la mujer molesta.Mi pecho duele porque lo que dice es verdad, pero, no dejo que una recién aparecida me haga menos porque Taddeo no vino de mí. Eso no importa, lo quiero como si hubiese salido de mí y así lo voy a defender.— Es mi madre. — dice Taddeo con firmeza.— Tu madre es Ivanna, mi herma
Kendrick sale al poco tiempo, mientras yo bajo a Taddeo de mis brazos, antes de que su padre lo regañe por ello. Él me sonríe mientras se acerca a nosotros y yo intento no darle importancia a esa mujer que ya ha empezado a ser molesta.— Estoy listo, ¿A dónde vamos?— Es una sorpresa. — dice Taddeo de inmediato y su padre, desordena un poco su cabello.— Está bien, no haré entonces más preguntas y esperaré ver todo lo que tienen para mí. — dice Kendrick dándome después un casto beso en los labios y sonriéndome.Los tres entramos al ascensor, Kendrick toma la mano de su hijo y mía, al quedar en medio de los dos.— Me alegra no tener que ocultar nuestra relación.— Eso estoy viendo. Parece que ya se te ha quitado el malhumor y has dejado de ser distante conmigo. — digo y él me sonríe c
Kendrick recibe la torta y Taddeo espera que su padre le diga algo, mientras yo me apresuro a grabar el momento que sin duda, será un increíble momento que disfrutaré recordar en el futuro.— Feliz cumpleaños, padre… — comienza a cantar Taddeo y yo lo acompaño, mientras el mastica la torta que su hijo tanto se esforzó en hacer.Aunque no quiero llorar, pensar en un hombre inexperto siendo padre y cuidando a su hijo a su manera, hace que reconozca que los dos han pasado por un largo camino donde cada uno dio lo mejor de sí mismo, para ser quienes son ahora.Kendrick no soporta más y deja a un lado su seriedad, para abrazar su hijo con fuerzas y llorar, mientras yo limpio con disimulo mis lágrimas. Taddeo, abraza a su padre y yo acaricio la espalda de Kendrick, pero, poco demoro haciendo eso, porque los dos me jalan hacia ellos y el abrazo de padre e hijo, termina siendo de los tres.
‘¿Qué es lo que acaba de decirme?’ me pregunto mentalmente al ver la seriedad de sus expresiones.No hay manera de que haya escuchado mal, realmente me dijo que no va a pedirme que sea su esposa. Esto no es broma y lo peor, es que su frase repitiéndose en mi mente, solo me dice que tarde demasiado tiempo decidiéndome.‘¿Se aburrió de esperar? No es posible, él estaba feliz porque hacíamos publica nuestra relación y eso sucedió hace poco.’ Me digo mentalmente, mientras no sé qué decir o hacer.— Oh, entiendo. — susurro disfrazando mi tristeza y aturdimiento con comprensión.— Antes de que pienses que no te quiero…— Es imposible que piense así. una palabra no puede borrar todo lo que has hecho por mí, todo lo que me has dado y hecho sentir, no son superficiales, como para ponerse en duda por unas