–Si –le soltó de repente –solo quería tenerte en mi cama, me calentaste te vi y te use. Todo fue por…
¿Alguna vez haz sentido como tu corazón se rompe por segunda vez? ¿Alguna vez haz sentido la sensación de levitar para después caer y golpear fuertemente el duro suelo? ¿No? Porque era justo lo que sintió Madison al escucharlo hablar, Madison quiso golpearlo, herirlo a muerte, silenciarlo para que no siguiera hiriéndola con lo que le decía pero no pudo más que apretar los ojos y cerrarlos con fuerza hasta que el ruido de un golpe en seco la hizo abrirlos repentinamente.
Ezra caía al suelo mientras se agarraba la mejilla, había sido Jude quien se había adelantado para golpearlo fuertemente en la cara, Madison se echó hacia atrás cuando pudo notar en él un aura cargada en furia.
–Qué bueno que lo menciones –agrego la otra mujer –porque sería bueno que te vayas enterando de que estamos viviendo juntos.Madison se quedó unos segundos congelada en el umbral de la puerta, Naomi sonrió ampliamente al saber que le había afectado.–Entonces cambia las sabanas –canturreó con un tono de voz tan arrogante que incluso a ella le causo picor –te recuerdo que yo también dormí varias veces ahí, mi esencia en su cama puede distraerlo.Termino de cruzar la puerta sin ver atrás; ya no le importaba más el saber qué era lo que en verdad planeaba Naomi o justificar la actitud del moreno, no, ya no, estaba cansada de ser usada como una maldita muñeca de trapo, ese era el día en que su vida tenía que cambiar y era hora poner de su parte.IIOIIOIIO–¡Ezry! –la voz de Armand le hizo girar de inmediato –¿¡Que mierdas te pasa!? –miro de arriba abajo a la mujer que se le colgaba en el brazo –¿¡Quién es…!? –la volvió a recorrer con la mirada pero esta vez con una mueca de asco –mujerzuel
¿Qué era eso que sintió en su pecho? ¿Por qué de repente se sintió abrumado y frustrado? Esa era la sensación que le había producido al ver partir a Madison, la verla de espaldas y ondear su cabellera con el estrepitoso viento fue casi como tener la sensación de perderla para siempre.–Iré a orinar –dijo de repente a una Naomi colgante de su brazo.–Te espero en el coche –respondió al darle un beso en la mejilla que él correspondió con una mueca.Se introdujo en el baño como si fuera una de sus salidas y cuando estuvo seguro de que no había nadie lanzo un puñetazo en una de las puertas.–Dale más fuerte –el moreno se giró al escuchar esa voz, era Asher quien entraba al baño.Se sorprendió al verlo pues dura
Entro echando chispas por los ojos, encabronado era poco, furioso era la palabra exacta, azoto la puerta con tal fuerza que hizo caer unos cuadros de la pared.–¿¡Pero que mierda te pasa, Ezra ¡? –Había sido Carl quien lo cuestiono primero, salía de la cocina con un enorme sándwich.–¡NADA! –Exclamo sin verlo –¡NO ME PASA NADA!Los ojos de su hermano se clavaron en él.–Tu actitud dice otra cosa –alzo la cabeza cuando escucho la voz de Carla, también salía de la cocina y le miraba incrédula –¿Todo bien con Madison?Los miro a los dos, ahí juntitos como si nada pasara cuando él estaba que se lo llevaba la chingada, apretó los puño con fuerza antes de fulminarlos con la mirada.–¡DIJE QUE NO ME PASA NADA! –Recriminó gritando.–¡Oye! –Llamo Carl en un tono amenazador –Modera tu volumen con ella.Se quedó pasmado cuando lo escucho ¿En qué punto Carl se había convertido en un ser amable? ¿Y desde cuanto tenía una relación fija con alguien? Movió la cabeza negativamente y se alejó de esos d
Escucharla hablar solo le provoco nauseas, en algún punto quiso detener el auto y ser él quien acabara con la vida de esa miserable mujer pero se tragó las ganas al llegar a la delegación, se encargaría que su estadía en prisión fuera lo más miserable de lo que ella tenía planeado para Madison, apago la grabadora cuando obtuvo todo lo que quiso, detuvo el coche justo al frente del lugar en donde ya lo esperaban una fila de policías y bajo a Naomi del auto a rastras. –¡No, por favor! –suplico –¡Ya te dije todo lo que querías pero por favor! Le quito la venda de los ojos mostrándole el lugar en donde estaban, sus ojos se abrieron de par en par al verlo. –Tú… –murmuro cuando fue sujetada por uno de los oficiales –¡MALDITO INFELIZ! –Llévensela –ordeno el capitán de ellos al verla de arriaba abajo –Señor Clarke. –¡MALDITOOOOOOO! –grito Naomi al ser arrastrada en los adentros del edificio ahora esposada y privada de su libertad –¡ERES UN MALDITO! –Aquí viene la confesión de la mujer –l
Escucharla hablar solo le provoco nauseas, en algún punto quiso detener el auto y ser él quien acabara con la vida de esa miserable mujer pero se tragó las ganas al llegar a la delegación, se encargaría que su estadía en prisión fuera lo más miserable de lo que ella tenía planeado para Madison, apago la grabadora cuando obtuvo todo lo que quiso, detuvo el coche justo al frente del lugar en donde ya lo esperaban una fila de policías y bajo a Naomi del auto a rastras. –¡No, por favor! –suplico –¡Ya te dije todo lo que querías pero por favor! Le quito la venda de los ojos mostrándole el lugar en donde estaban, sus ojos se abrieron de par en par al verlo. –Tú… –murmuro cuando fue sujetada por uno de los oficiales –¡MALDITO INFELIZ! –Llévensela –ordeno el capitán de ellos al verla de arriaba abajo –Señor Clarke. –¡MALDITOOOOOOO! –grito Naomi al ser arrastrada en los adentros del edificio ahora esposada y privada de su libertad –¡ERES UN MALDITO! –Aquí viene la confesión de la mujer –
Las siguientes semanas que pasaron fueron caóticos pues el carnaval llego y la ciudad fue Inundada por un sinfín de turistas desenfrenados por la festividad: alcohol, música y el desorden era lo que reinaba en esos momentos en las calles sin embargo para él no era cosa de fiesta sino más mejor dicho de tortura humana porque comenzó a experimentar la abstinencia de no saber nada de ella, de ser ignorante a lo que pasaba a la distancia y para colmo de sus males incapacitado para ir a buscarla porque si bien había intentado llamarle más de una vez, Madison simplemente no aparecía.Y el caso contra El hombre y Naomi ya casi concluía; supo por medio de Asher (quien seguía ahí hasta que concluyera la investigación) que las influencias de Jude le ayudaron a la muchacha a poder rendir su declaración a la distancia, sin necesidad de hacerse presente en la ciudad, algo que no tomo nada bien pues limitaba cada vez las posibilidades de volver a verla, aunando que el muy imbécil no quiso revelarle
Después de lo que paso en carnaval sus pláticas con Armand fueron nulas, no podía ni verlo por error en la casa por eso mismo se recluyo en su habitación, siempre de malas y desesperado, la puta necesidad de hablar con Madison no se le pasaba con nada, ni durmiendo, ni leyendo, ni haciendo otra pendejada que no fuera pensar en ella: Asher se había ido una vez que el asunto de El hombre y Naomi concluyo, no había nada más que hacer pues gracias a las influencias de Jude y las denuncias pertinente logró lograr una gran red de trata de blancas, obviamente volvió a insistirle con el tema de Madison pero no obtuve nada del pelinegro que le contesto con un simple lo siento mucho Ezra pero Madison me pidió que no te dijera nada obviamente su desesperación se acrecentó aún más cuando regresar a clases se dio por enterado de la baja permanente tanto de Madison y la de Jude como profesor y para el colmo de sus masculinos no podía salir de la jodida ciudad hasta que su idiota tío recuperara el s
IIOIIOVolvería a verla, en malas condiciones pero lo haría, no pudo evitar mover la pierna inquieto.–Ya cálmate –espeto Carl a su lado –me pones nervioso.Sentados en la sala de espera de la oficina de su tío esperaban a que los dos últimos invitados llegaran, quería romperle la cara a Estefan pero ahora mismo estaba más concentrado en volver a verla.–¡Que te calmes! –bramo Carl al sujetarle la pierna.Ezra y él se miraron con el ceño fruncido hasta que…–Por aquí Señorita Bailey… Señor Clarke –la secretaría de su tío encamino a la pareja hasta donde ellos estaban.Los cuatro se vieron entre sí cuando Ashndaron la sala de espera; Madison respiro hondo, Jude entrecerró sus ojos y Ezra no pudo más que admirar a la mujer que amaba.Llevaba puesto un holgado vestido negro con un listón del mismo color rodear su cintura, la altura del mismo le daba justo por arriba de la rodilla, dándole ese toque provocador pero elegante, zapatillas de tacón negros, su cabellera recogida en un bonito c