Antonella:
Desde aquella noche las cosas entre ambos no estuvieron tan tensas, sin embargo, puedo decir que mi estancia tranquila se complicó. Por lo visto Sebastián y Chelsea esparcieron el rumor que Giancarlo y yo andábamos juntos, al ser un poblado pequeño las noticias corren rápido. Es por ese motivo que me siento observada e incómoda con la actitud de las personas, las costumbres aquí son muy conservadoras, no ven con buenos ojos que ambos estemos bajo el mismo techo sin estar casados.
Por el momento, la señora Nodal no me hizo ningún comentario, eso me alivia un poco porque no sabría qué decir. Me siento en uno de los bancos pequeños necesito pensar.
—Antonella, deseo hablar un momento contigo — Me habla la señora Nodal.
—Puede ser después, tengo que irme de inmediato — Me l
Antonella:Ambos hicimos lo acordado, sin embargo, muchos no creen del todo la historia que inventamos. Al menos espero que con esta celebración se olviden por fin de aquel rumor, chisme o en lo que sea que se convirtió y tomen una nuevo, por supuesto que no esté relacionado conmigo.Al salir noto el alboroto de inmediato en las calles. Todo está hermosamente decorado con cadenetas, hay un estrado con músicos en la plaza municipal, al igual que varias personas con sus puestos ofreciendo distintos productos. Por lo que me contó Nodal, esta es una de las fiestas más grandes del año. Aparte de ser la celebración de la vendimia también es la del aniversario del pueblo.Ella me contó cosas que me dejaron sorprendida, por ejemplo, que la familia de Giancarlo fue quien le dio vida a este pueblo que se encontraba perdido en medio de la nada. Por lo que me dijo la tátara, tát
Giancarlo:Gran parte de la mañana la he pasado buscando a Antonella, no la he visto en todo el día. Me pregunto si le gustaran esta clase de festividades, tal vez ha decidido quedarse en casa. Voy para allá y en el camino la encuentro junto a Sebastián cerca del puesto de la madre de Sarah, voy de inmediato.—Antonella ¿Quieres tener una cita? – Le pregunta Sebastián, no pienso escuchar la respuesta que le dará ella. Tomo la mano de Antonella, la alejo de Sebastián lo más rápido que puedo, perdiéndolo de vista.—Espera – Planta los pies en la tierra.—¿Qué sucede? – La cuestiono.—¿Cómo?, ¿qué sucede? La que debe hacer esa pregunta soy yo…Dime ¿Por qué me alejaste de Sebastián? Estaba hablando
Antonella:Estamos frente al escenario donde se encuentran varias tinajas de madera, que si no me equivoco su nombre es lagar, ahí depositan los racimos de las uvas para que luego ingresen personas que aplasten las uvas y consigan el jugo de la uva para fermentar.—Apúrate, hemos llegado a tiempo — Giancarlo y en menos de un minuto estamos en el estrado atrás de uno de esos lagares. – Quítate los zapatos, enjuágalos en cualquiera de esos depósitos de agua e ingresa ahí.—Estás loco — Le susurro.—Es un concurso de pisado de uvas, se hace en parejas. Solo tenemos que saltar, bailar hasta que salga el jugo suficiente para llenar una botella antes que los otros competidores… El premio te va a gustar — Me explica mientras se quita los zapatos. — Te ayudo — se ofrece.&
Giancarlo:Luego de ver los fuegos artificiales en la rueda de la fortuna nuestro deber como reyes de la vendimia es ir a la fiesta que se realiza en la plaza. La tradición para elaborar uno de los vinos gourmet de la zona, consistía en que todas las mujeres del pueblo entraran en uno de los lagares y con sus pies pisaran las uvas. Antonella ya es miembro oficial así que tenía que participar mientras los hombres teníamos que poner la música, tomo mi violín y comienzo a tocar.Los visitantes aplaudían y festejaban esta tradición, Antonella por su parte al principio esta reacia a participar, pero luego que la sujetaran y la obligaran, no le quedo de otra. Todos animaban a las mujeres, la gente vitorea, grita y bailan al ritmo de la música. Para terminar, se da comienzo a la gran fiesta de cierre donde se invita a la gente parte de la producción del año pasado.<
Antonella:Me siento como una pobre estúpida. Voy, me lance a sus brazos, lo beso, creí que me correspondía al igual que hace un momento en la plaza y al final me detiene. Estoy tan avergonzada, soy un fracaso como mujer, todo el mundo me rechaza. He malinterpretado sus intenciones…Soy una tonta.Me siento al final del pasillo que daba al patio trasero, no me buscara ahí, dudo que lo haga.—Antonella — Lo escucho a mis espaldas. No me muevo ni siquiera me atrevo a levantar el rostro, prefiero continuar como si no pasara nada, tal vez se harte y me deje tranquila. Además ¿Qué quiere? Humillarme, despreciarme más o tal vez burlarse de lo patética que soy.—Antonella, por favor — Lo escucho de nuevo, para sentir como se sienta a mi lado, se apoya en mi brazo. — Sé que estás despiertas, que m
Giancarlo:Ella se ha quedo dormida, en si ambos, pero luego de un rato me desperté con la incertidumbre que se había ido sin embargo al sentirla entre mis brazos la angustia que sentía desapareció. No quiero que se vaya al igual que ese día. Aunque estoy seguro que en la mañana cuando ella despierte las cosas no serán fáciles, negara sus sentimientos, dirá cosas con el fin de disuadirme. Tendré que insistir.Miro hacia la ventana, viendo como la lluvia cae y choca contra la ventana. Es de esperarse, los juegos artificiales siempre tienen ese efecto todos los años, eso significa que tal vez el día este despejado y pueda salir a caminar con ella. Podemos tener hasta un picnic, no es mala idea. Después de todo Esther no va a venir mañana, tendremos toda la casa para nosotros solos. Por lo menos hasta el medio día en que viene el viejo
Giancarlo:Al abrir los ojos, veo al ser más bello durmiendo a mi lado, es igual que hoy en la mañana, duerme tranquila. Creo que sería bueno darle una sorpresa además que estoy seguro que se encuentra agotada. Me levanto con cuidado de no despertarla, me visto y salgo de la habitación, al menos sé que estás no sé escapara.Antonella:Despierto con miedo de lo que suceda respecto a lo que, acontecido en la mañana con Giancarlo, pudo ser un simple sueño. Busco con mi mano el contacto de su piel, pero ni señas, la cama está fría y vacía. Entonces fue un tonto sueño, suspiro y abro los ojos viendo que no es mi habitación, si no la de él. ¿Dónde está? Seguro consiguió lo que quiso y se aburrió. Lo sabía fue igual que aquella vez.Me trae recuerdo
Dos meses despues.Antonella:Las cosas entre Giancarlo han surgido mejor de lo que espere. A pesar que algunas veces es antipático, siempre su respuesta es: que igual así me gustó. También me di cuenta que con las demás personas él es muy reservado, no habla mucho, quizá puede llegar a ser huraño y todo un mandón, en sí creo que su mismo porte lo hace ser así, una especie de demonio que, si le das la contra, lamentaras las consecuencias. Otra cosa es que Giancarlo no suele ser de los que dice por favor y cuando lo hace suena igual a una orden.Pero cuando estamos solos, es muy diferente, es comunicativo muestra sus emociones porque sonríe, se ríe suele ser bastante juguetón. Los fines de semana solemos irnos a la playa o a las aguas termales. Nos quedamos en cualquiera de los dos lugares hasta que caiga el sol. Regresamos caminando en compa&ntil