XII
Por un lado la salvó de seguir con la agonía de estar allí sintiéndose de tal manera que resentía la amargura que Lucyan traía a su mente.

—Discúlpenme, pero tengo que irme. —Se apresuró a tomar su bolso y salir evitando mirarlos, con paso ligero salió por la puerta sin decir nada más.

—¿Señor?... —murmuró Claire mirando a Lucyan, quien había estado callado con una mirada indescifrable pensando en algo. Inhaló antes de dejar ir un suspiro mudo y darse la vuelta para retirarse, cerrando la puerta detrás de él sin decir absolutamente nada.

Todo quedó en silencio mientras que el sonido de una tormenta afuera inundó sus oídos con el ensordecedor golpeteo de las gotas que caen ferozmente.

Al paso de las horas se hallaba en la habitación que había sido el último lugar donde su esposa había estado con él. El libro en sus manos era un recordatorio más de su ausencia, paulatinamente lo veía tras lo que finalmente lo dejó sobre la cama.

Cada cosa le planteaba que ella ya no estaba, eso le d
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP