Ustedes ya saben que la síntesis no es lo mío, así que podrán imaginarse cuánto me costó atenerme a las cien o doscientas palabras que dijera Isaac. Quería que fueran algo especial, significativo, pero sin mostrar mis verdaderos sentimientos. Tenían que aportar a la historia que él quería contar, aun si lo contradecía. Un momento. Eso era algo que sabía hacer.
Bien, así que contradecirlo, pero en un sentido positivo. Había dicho que se proponía contar una historia muy diferente a lo que mostrara durante los últimos diez años. Que siempre se había mostrado como el investigador temerario, desafiando a la oscuridad para desentrañar el misterio de turno. Las entidades oscuras eran los malos, y él era el héroe que llegaba a desafiarlos y salvar a la víctima de la semana, si había una. Había dicho que no haría nada de eso en su último episodio con Cazadores, sino más bien todo lo contrario.
Si a eso le sumaba su rotunda negativa a dejarme ver siquiera una escena de lo que él
Regresé a la mansión el lunes, feliz por haber pasado dos días con Kujo. Y tres días después llegaron los dos últimos Cazadores, en una de sus típicas camionetas negras de alquiler. Ya era casi hora de la cena, así que los envié a dejar sus cosas y saludar a los Blotter mientras yo terminaba de cocinar y poner la mesa.Cuando se me unieron en la cocina, me di cuenta enseguida que se sentían incómodos conmigo. Como si no supieran bien qué decir y qué no.—Permítanme aclarar algo —dije, trayendo el pan de carne a la mesa. Me senté con ellos y hablé mientras les servía—. Sí, Bran y yo rompimos. Sí, todavía siento algo por él. Pero puedo escuchar su nombre y hasta hablar de él de una manera mínimamente racional sin sufrir una crisis nerviosa —sonreí—. Qué hacerle. Son cosas que pasan.—Son cosas que pasan —repitió Ted alzando su cerveza.Y brindamos los tres por las cosas que pasan. Cenamos hablando de los lugares que estaban investigando para su primera temp
Como si no quedara nada por decir tras la conversación en el estudio, pasé todo el día siguiente filmando con los Cazadores, mayormente al aire libre, junto al Quabbin y en el bosque. Insistieron en hacer cuatro tomas diferentes de mi texto, más las tomas adicionales. A la hora de la cena estábamos los tres agotados y nos fuimos a dormir temprano. Nos despedimos a la mañana siguiente y no volví a saber de ellos.Agosto trajo otra visita del señor Edward y su familia durante el primer fin de semana.Y el cumpleaños de Brandon el dieciocho. Lo veía venir una semana antes, y decidí que me sentía lo bastante fuerte para enviarle un regalo sencillo, algo para que supiera que recordaba la fecha. Le hubiera enviado una carta por correo, pero no me atrevía siquiera a tratar de escribirle. Pasé varios días intentando decidir qué le regalaría.El viernes
—Brandon te necesita aquí —dijo Isaac volviendo a sentarse, y alzó una mano para evitar que lo interrumpiera—. No tiene nada que ver con el estreno. Tiene cirugía ocular el primero de noviembre.—Sí, lo acordó con su oculista meses atrás. ¿Y eso qué tiene que ver conmigo?Me enfrentó ceñudo, como si fuera un niñato consentido haciendo berrinches.—No me mires así, Isaac. Rompimos, ¿recuerdas? Hace casi medio año. Los tiene a ustedes y a sus chicas para que lo cuiden.—No, Fran. Nos hace dejar la ciudad ese mismo día para reanudar las filmaciones. Y respecto a sus chicas, ¿recuerdas que te dije que era imposible que hubiera vuelto con Serena? Pues tenía razón. —Resoplé y me gané otra mirada reprobadora—. Presta atención. Serena es una influencer y estaba baja en po
Pobre Lizzie. Bien, y pobre Charlotte. Necesitaba desahogar toda la angustia y el miedo que me causaran las novedades, pero no podía hablar con Trisha ni con Amy. Así que la pobre Lizzie tuvo que ofrecerme su hombro fantasmal para llorar a mares. Esas dos semanas fueron las más largas de la historia, y las pasé luchando contra mi urgencia por dejar todo e irme a Los Ángeles. De hecho, estuve a punto de hacerlo en tres ocasiones.La peor fue cuando Brandon encontró a Cake hablando conmigo y perdió el control. Me quedé en silencio y no descubrió que era yo, porque había perdido tanto la vista que no era capaz de discernir mi cara en pantalla. Pero se enfureció tanto, sospechando que Cake estaba hablando de él, que no sólo amenazó al hombrón, sino que hasta le arrancó el teléfono de las manos y lo estrelló contra el suelo, pisoteándolo hasta
El episodio abrió con una toma del drone volando sobre el Quabbin hacia mi playita, y luego sobre los árboles. La narración en off de Brandon tenía un eco ominoso que parecía acentuar su tono solemne cuando habló con claridad y lentitud.—Escondido en los campos de Nueva Inglaterra, lejos de multitudes y grandes ciudades, está el lugar que cambió mi vida para siempre: Casa Blotter.El drone aminoró la velocidad cuando alcanzó el jardín, para mostrar la antigua mansión victoriana en toda su gloria bajo un cielo muy azul y brillante.—Fue aquí que vi mi primera aparición.Cortaron a un montaje de ese momento de su primera investigación en la mansión, en la primera temporada del show, mostrando a Brandon que huía despavorido del dormitorio principal, luego de sorprender allí a Ann Marie.Entonces apareció Bra
Un rápido fundido a negro se abrió a una oficina desordenada, con varios escritorios cubiertos de pantallas, teléfonos, papeles, vasos descartables y hasta envoltorios vacíos de comida rápida. La decoración bastaba y sobraba para identificar el lugar. Las paredes estaban cubiertas de posters enormes de cada temporada de Cazadores, y había estantes llenos de placas y trofeos de premios. Era el cuartel general de la pequeña productora de Brandon.Alguien sostenía una cámara.¿Perdón? ¿Era capaz de darme cuenta que estaba sostenida por manos, no por un trípode? Quién lo hubiera dicho.Decía, una cámara filmaba a Brandon sentado al escritorio más grande, por supuesto, arrellanado en un gran sillón giratorio negro. De pie frente a él, al otro lado del escritorio, estaba Jeff, su segundo al mando. Brandon enfrentó la cámara con esa sonrisita que solía hacerme reír primero, y luego saltarle encima para besarlo. Oh, aquellos buenos tiempos en los que podía dejarme lleva
La imagen fundió a negro. Pero en vez de abrir al principio de su visita a la mansión, aparecieron Isaac, Ricky y Ted. Estaban en el salón oriental por la noche. Isaac ocupaba el sofá bajo la ventana, los otros dos flanqueándolo en los sillones de un cuerpo. Isaac habló mirando a la cámara mientras los otros dos asentían, para mostrar que estaban de acuerdo con sus palabras.—Ya todos deben saber que éste es el último episodio de Brandon con Cazadores. Y también es mi último episodio. Sabemos que quiere que lo vean como jamás lo vieron antes, aun si eso muestra sus aspectos negativos. Pero ninguna historia está completa a menos que escuchen lo que el resto de los involucrados tiene para decir. Por eso hacemos esto. —Se frotó la cabeza rasurada mirando a sus compañeros, que sonrieron como para animarlo a continuar—. Seguramente nos matará ape
La transmisión cortó de inmediato para mostrar el cine, donde todo el mundo se incorporó de un salto y se volvió hacia el palco para una ovación plagada de vivas y silbidos.Brandon no reaccionó, ni siquiera cuando sus amigos le palmearon los hombros, al parecer felicitándolo. A su lado, Serena pareció volver a la vida y cubrió la mano de Brandon con la suya. Él se envaró, como sobresaltado, tomó su mano y se puso de pie, dejando el palco con ella.Dejé escapar un suspiro entrecortado, apretándome los ojos. Kujo me lamió la cara, arrancándome una risita reluctante.—Lo amo tanto, mi niño —murmuré—. No sé qué haré si no me deja quedarme con él.—Brandon también ama.Mientras yo seguía tratando de controlar mi llanto, la transmisión me hizo el fa