Victoria esperaba que se acabara por completo la luz del sol. Hizo señas a su compañera y se movieron sigilosamente dentro del bunker donde estaban cautivas, caminando entre mujeres tiradas en cartones acurrucadas porque solo tenían una sábana sucia para cubrirse. Victoria sacó de los bolsillos de su pantalón un par de piedras pequeñas, lanzó una y con mucha suerte acertó en la bombilla amarilla dejándolas por completo a oscuras. Rápidamente se movieron a la puerta. Victoria se agachó y cargó a su compañera que con agilidad la escaló como mono. Aprovechando la altura de Victoria llegó a la cámara en la puerta que aunque estaba escondida Victoria la había notado y le había indicado cómo desconectar. — ¿Puedes sentir el cable detrás de la tabla? —Sí, listo —informó la chica triunfante dañando la pequeña cámara y con la tabla de madera en las manos. —Ahora esperaremos a Irina. Irina entró y Victoria y la otra chica encadenada a ella le brincaron encima en una pe
Esta vez a Victoria la llevaron a la ciudad, a un vecindario pobre donde abundaban fábricas abandonadas, en una se encontraba la guarida de Ronald. Había varios hombres y mujeres a cargo, muchas mujeres cautivas y también niñas, Victoria supo que había otra ala donde estaba la población masculina. Los empleados de Ronald le llamaban a este lugar “La granjita” A Victoria la metieron en una celda caliente, con un catre para dormir, esta vez estaba sola. Pasaron algunos días y Victoria no sabía ni cuántos, cerraba los ojos y pensaba en Stefan. Lamentaba que hubiera muerto y también estaba furiosa con él. Desde el inicio fue Stefan quien le dio apoyo económico y a sus hombres a Luciano para secuestrarla. Su vida cambió desde que se cruzó en su camino. ¿O fue antes? Cuando terminó en el auto de Stefan, Victoria no estaba del todo bien, pero estaba en camino de recuperarse y trataba de conformarse con no tener a Michael en su vida. Fue desde que ella conoció
Michael regresó a la casa segura de Cosa Nostra, cenó con Antonio y se despidió. Fingió que no sabía nada de la reunión de Antonio con el representante de Slashdot dándole la oportunidad de ponerse de su lado. Antonio se quitó el saco y lo colocó en el espaldar de una silla. —Santo, disculpa por hacerte esperar. — ¿Algún negocio bueno? —Nada importante, espero que no estés tan decepcionado por no haber podido encontrar a Slashdot. Michael sonrió de lado con ironía. —Ya podré matarlo en otra ocasión, apuesto que será pronto. Antonio negó con la cabeza. —Estoy seguro que podrías sentarte en una mesa con Slashdot y limar asperezas, una mujer no vale la pena para perder tantos posibles negocios. Michael no emitió comentario y pasó como si nada junto al saco de Antonio tropezando para que este cayera al suelo y quitar el micrófono. Lo puso correctamente en la silla de nuevo y Antonio no se dio cuenta. De niño vivía en la calle y era carterista, no hab
—Puedo quedarme con esta mujer, pero igual si quieres a la modelo me pagarás mucho dinero —espetó Ronald y en eso volteó dentro de la propiedad y vio a muchos hombres corriendo. Entró e Ivo de inmediato fue tras él, Michael también lo haría y Lina lo sujetó. —Por favor, no me dejes aquí, te lo suplico. —Lo mejor que puedes hacer justo ahora es largarte de aquí —Michael le tiró un fajo de billetes—, solo vete, no me gusta que me manipulen, aunque no te hubiera dejado aquí, no te quiero cerca de mí. Michael entró también corriendo, la salida estaba sola y la chica sorda empujó a Victoria para que salieran. Victoria lo hizo y corrieron fuera. —Hey, espera —gritó Victoria y Lina volteó. —No quiero problemas —espetó Lina que no paró de caminar, se abrazaba a sí misma, se sentía muy mal. —Yo tampoco quiero problemas, ayúdanos a alejarnos de aquí y te compensaré. Lina miró para todas partes. —Está bien, espero que no me maten por su culpa —contestó Lina. L
Matthew entró a la habitación de Stefan, con cuidado sin hacer ruido para no despertar a Adriana que está profundamente dormida en una silla con el cuello doblado. Chequeó los aparatos a los que estaba pegado Stefan. Tuvieron que poner a Stefan en un coma inducido para que sanara de sus heridas, el haber salido antes de lo recomendado agravó su condición ya delicada, incluso habían tenido que operarlo de nuevo. Adriana y Matthew habían conseguido una tregua, eran compañeros por la salud de Stefan, porque Matthew no permitió que lo sacaran de la clínica y ella se negó a irse. Los últimos días Anka y Adriana han vivido en la clínica y aunque tienen habitaciones por lo general están junto a Stefan. Matthew le tocó el hombro de Adriana. Ella se despertó de golpe. —Estoy despierta, ¿Stefan? —Él está igual, debes descansar un rato, yo puedo cuidarlo, te prometo que no me moveré de acá. Adriana pasó la mano por sus ojos, siente que le echaron un kilo de arena en e
Victoria maldijo su mala suerte, pero no le bajó la cabeza a Ivo. Este entró a la oficina y en primer lugar observó a Lina. —Lina, Lina —Ivo chasqueó la lengua—. Tú no te cansas de meterte en problemas. —Yo no quiero problemas, te lo juro que desapareceré, por favor fantasma, olvidemos esto, fue un error haber venido. —Ya lo creo que sí —comentó Ivo con suavidad y se acercó a Lili y pasó su mano por el cabello con ternura. — ¡Suéltala desgraciado! —Espetó Victoria. — ¿Qué haces con estas mujerzuelas, niña? Con ellas no aprenderás nada bueno —comentó como si conversara y Lili estaba aterrorizada y sin mover un músculo. —Señor, iba a llevar a mi nueva paciente a tratamiento uno —dijo Matthew haciéndose el desentendido. —Estás mujeres no van a otra parte que no sea conmigo. —Eres un hijo de perra, traidor —le acusó Victoria. —Tú sí que eres una descarada —le contestó Ivo—, tienes la desfachatez de presentarte aquí después de traicionar a Franco, ¿es que vien
Adriana estaba sorprendida, en otro tiempo de su vida hubiera reído de la urgencia que mostró Matthew, pero es consciente que descubrió una forma de vida que jamás imaginó que hubiera tenido su hermano. —Matthew claro que te ayudaré a salvar vidas, ¿pero de qué se trata? —Haz que tu padre entre aquí y por nada del mundo dejes que salga de la habitación, pero tampoco lo dejes solo con tu hermano. Matthew corrió fuera de la habitación. —Matt, ¡Matthew! —Gritó Adriana y miró como Matthew corrió por el pasillo, en cuanto volteó venían sus padres caminando hacia la habitación. En cuanto Ivo entró frunció el ceño. — ¿Dónde está Matthew? Adriana abrió la boca y la cerró. —Lo llamaron —dijo finalmente casi susurrando. —Necesito hablar con él. Ivo dio la espalda para seguir por el pasillo y buscarlo y Adriana lo detuvo tomándolo del brazo. — ¡Espera! Ivo observó la mano de su hija en su brazo y vio en su rostro el nerviosismo de que la delataba. — ¿Qué
Adriana y Matthew corrieron dentro de la clínica, Ivo tomó la mano de Anka y caminó con ella a paso rápido, pero más lento que Adriana que se aseguró que Matthew permaneciera con ella, ahora era su escudo. Stefan estaba sentado en la cama y se sobresaltó al ver entrar a Adriana, ella con mucho tacto frenó en seco antes de llegar a él. —Hola, sé que es algo extraño, necesito saber cómo te sientes. Stefan afirmó con la cabeza. No sabía cómo actuar o qué decir, jamás estuvo más confundido en su vida, la experiencia que vivió era para él parecida al tratamiento con ibogaina y aquí estaba el hombre que lo ayudó en esa ocasión. —Matthew. El médico se acercó y tomó de su cuello el estetoscopio, aún estaba temblando. —Cómo está jefe, permíteme revisarte. — ¿Por qué estás nervioso? —Preguntó Stefan—. No entiendo mucho de lo que pasa. —Es normal, no te exaltes. —Estoy desconcertado, no sé muy bien que es real y que no. ¿Qué me pasó? —Estuviste en coma debido a