Luego de que Carolina diera las mejores ideas para aquella fiesta, se dijo en su mente, ay Kelaya, creo que este será tu fin, así que te voy a dejar que sea todo lo feliz que pueda, durante estos quince días que falta antes de tu caída, ya que te puedo jurar que vas a terminar llorando lágrimas de sangre por haberme quitado a Alejandro y lo mejor de todo es que yo esta vez no haré absolutamente nada, para tu gran sufrimiento.

Solo estaré ahí para ver tu cara de decepción y angustia al verte humillada por tu propio esposo delante de la multitud. Ese hombre que piensas que te quiere y te atreviste a quitarme, va a hacer el que te haga sufrir.

Después de todos estos pensamientos, se acercó a Margie y a doña Elsa para ver en que más las podía ayudar de nuevo.

Todo estaba listo para la gran celebración de los cumpleaños de Kelaya y tanto Margie como Elsa habían decidido hacer la fiesta en la hacienda de Alejandro, y que todo fuera una sorpresa para la homenajeada.

¿Que cómo llevarían a Kel